Over Again || Alexis Sánchez

Capítulo 31:"¿Qué hago ahora?"

¿Qué fue lo que pasó? Ah sí, creo que me desmayé en plena alfombra roja, oh esto es catastrófico, Caitlyn me va a matar... Ahora todos deben estar hablando de mí e inventando quizás qué. Me dolía la cabeza, demasiado. Abrí mis ojos y me encontré con la visión de una enfermera tratando de pincharme el brazo ¡Mierda no! . Alejé mi brazo de su aguja amenazadora...

—¿Qué cree que hace? Usted no me va tocar con su aguja—dije con pánico, en serio ya había tenido suficiente con las agujas cuando tuve mi accidente no quería más. 

—Niñita cállate—dijo la voz de mi manager, no me había dado cuenta que ella estaba ahí—tienen que sacarte sangre para que ver qué mierda te metiste al cuerpo...—rodé los ojos, hablaba con ese típico tono demandante que tanto odiaba. Además yo no me metí nada en el cuerpo esta vez, estaba limpia, solo tomé un poco de espumante. 

—Caitlyn te juro que no tomé nada, solo un vaso de espumante—ella frunció el ceño, no me creía nada, típico, nunca creía nada de lo que yo decía. La odiaba, no sé ni siquiera por qué no la despedía... Bueno supongo porque es buena arreglando mis desastres, pero igual la odio. 

—No soy tonta niñita...—Estaba diciendo la verdad ¡Maldita sea! Detestaba cuando decía la verdad y no me creían— ¿Te das cuenta del escándalo que hiciste? Ahora todos están diciendo que te dio una sobredosis, o que tienes una enfermedad mortal.—suspiró.—Enfermera continúe—era impresionante, con tan solo hablar de esa manera demandante que tenía todos le hacían caso... y a mí nadie me pescaba, era como si mi palabra valiera mierda... La aguja se acercaba amenazante a mi brazo, ay Dios iba a morir, si tan solo estuviera Alexis aquí... él siempre me lograba calmar...

—FRAN—salté ante el grito de mi amigo Eduardo, lo bueno es que la enfermera alejó su aguja asesina—Te vi desmayarte en la tele hueón, fue cuática la hueá. ¿Cómo estay?—preguntó mi amigo con voz de preocupado. Esa voz si era agradable de escuchar, no como al de mi manager. 

—Bien—dije con voz de pánico porque la enfermera volvió a su trabajo... Cerré los ojos para no ver... AY AY AY MIERDA DOLÍA, AUXILIO, DOLOR, PUTAS AGUJAS. Deberían hacerlas desaparecer porque eran la peor invención del universo. 

—Oye ¿Qué te pasa?—preguntó la voz del Eduardo—¿Por qué tení esa cara?—¿acaso no veía que las agujas eran lo peor de la historia de la vida?

—Le tiene miedo a las agujas—dijo esa voz... la voz de Mauricio Isla, ¿Qué hacía aquí? ¿Quién chucha lo invitó? Eduardo se rió. ¿De qué se reía ese ahueonao?

—Pero Fran... Tranqui si ya pasó. Ya te sacaron sangre— ¿QUEEÉ? No, eso era mentira, yo todavía sentía el dolor de la aguja traspasando mi piel. Abrí los ojos y miré mi brazo, era verdad ya me habían sacado sangre, pero me dolía, ay ay, bueno quizás estaba exagerando un poco, pero igual...

—Huaso ¿Qué chucha estay haciendo aquí?—le pregunté. No quería verlo aquí, él no era mi amigo en verdad porque siempre preferiría al Alexis, así que no podía confiar en él... 

—¿Acaso no puedo venir a ver a una amiga?—lo miré feo. Él suspiró—Fran ¿acaso cada vez que termines con el Alexis me vas a odiar a mí también?—preguntó. Sí, así iba a ser, porque él siempre se pondría de su lado y yo lo sé. 

—Tú no erís mi amigo, tú erís amigo del Alexis, no me dijiste lo que él me había hecho, cuando perdí la memoria, tú y todos los otros que decían ser mis amigos me lo ocultaron—me crucé de brazos y sentí un dolor donde me habían pinchado. AUCH. El Huaso suspiró—Aparte ¿para qué quieres ser mi amigo? ahora tienes a la Barbie para que sea tu amiga po, más encima te va a dar un sobrino, ¿Qué mejor?—el Huaso rodó los ojos.