Impredecible Jeon

XXX

-Jungkook...-trato de decir el alfa cuando vió al pelinegro cerrar la cajuela del auto, aquel lugar donde se mantuvo oculto durante el viaje hasta lo que parecía ser un estacionamiento.

Pero ni siquiera se le permitió decir algo más.

-Ahora no- lo interrumpió acercándose a colocarle una gorra- necesito que vayas a la tienda con la que está afiliada la empresa, Namjoon ya ordenó que apagaran las cámaras y ya le ha informado a sus contactos que no se te acerquen pero por nada del mundo te quites esto- dijo esta vez colocándole un cubrebocas con cuidado- busca ropa de tu talla y métete a un probador, todo en veinte minutos, anda- ordenó dándole un pequeño empujón incentivándolo a que lo obedezca y se fuera- te veré ahí, por favor vé- insistió lográndose que con esas palabras el alfa obedeciera.

Cómo le hubiera gustado llevarlo el mismo, ojalá no haya complicaciones en su camino a los vestidores.

-Escuchen- dijo esta vez tomando uno de los dispositivos que llevaba escondido, quería que su mensaje fuera escuchado claramente- centro comercial que esta cerca de nuestro antiguo instituto, estaremos en la tienda que pedí que mantuviera discreción, Namjoon necesito que les especifiques como está vestido ahora mismo y que se hagan de la vista gorda, nadie puede intervenirlo, estaremos en los vestidores y no pueden demorar mas de 20 minut...- quiso seguir indicando más algo llamó su atención.

Cuando quiso cerrar la puerta del conductor notó un pequeño objeto peculiar pegado en el techo del auto.

Sabía que era esa pequeña mierda así que la dejó donde estaba y se metió al auto para poder estacionarse en un lugar donde el auto estuviera dentro del rango de visibilidad de las cámaras de seguridad.

-Seokjin- llamó antes de bajar del auto- llámale a los chicos y dile que en cuanto tengan a Taehyung lo metan a otro vestidor y lo hagan cambiarse pero que no me salgan de la tienda hasta dentro de veinte minutos más- ordenó para luego salir apurado del auto en busca de su alfa.

Quería verificar que esté en el lugar en el que le había pedido.

Quería tranquilizarlo un poco, su mirada confusa y preocupada que le dió antes de irse le hizo estrujar su corazón.

Sabía que a pesar de todo se estaba preocupando de lo que le fuera pasar, esa mirada angustiada era para el.

Taehyung pensaba que pasaba más peligro que el al intentar ayudarlo.

Y estaba más que acertado, el pobre alfa comenzaba a inquietarse al ya haber pasado cinco minutos desde que llegó al lugar pedido pero ni señales de su Omega, veinte desde que lo vió en el estacionamiento.

No sabía que más hacer, quería salir en busca del pelinegro pero en el había la duda de si desobedecerlo o no.

¿Debía probarse la ropa? ¿Que hacían ahí? Hubiera querido poder escuchar desde su escondite lo que pasaba pero a lo mucho sentía que el Omega se puso a discutir con alguien en cuanto el auto se detuvo poco después de que lo metieran en la cajuela ¿Ese alfa pelirrojo no era...?

-Estas aquí- escuchó aquella voz melodiosa notablemente agitada hablar suavemente mientras ingresaba al vestidor. La mente aturdida del mayor no dejandolo responder o decir algo, tenía tantas preguntas pero nada salía de su boca.

-Gracias- apenas susurró chiquito el alfa.

Jungkook en reacción se acercó aún más a el quitándole el gorro y quitándole la mascarilla cuidadosamente con tal de no hacerle doler su ya lastimado rostro.

Sintió su omega gruñir, si antes le angustiaba ver su rostro maltratado en el oscuro sótano, verlo con ayuda de la luz brillante del probador lo dejaba sin aliento.