*Narra Adrián*
Y aquí mi preocupación aumentó más que nunca, Romina estaba mirando un punto fijo en la pared, las lágrimas caían de sus ojos sin parar y su cuerpo tiritaba como si le estuvieran dando la corriente...
*Narra Romina*
Sentí una opresión y estaba completamente en shock... Yo sabía qué hacer para calmarme, pero también sabía que a Adrián no le gustaría...
Romina: Necesito... un... filo... - susurré
Adrián: ¿Cómo? - preguntó atónito
Romina: Un cuchillo, navaja, vidrio, lo que sea que corte...
Adrián: Romina... no...
Romina: Es lo único que me tranquiliza...Y no mentía siempre que pensaba o hablaba de mi pasado me daban estos "ataques" y mi única salida era cortarme, eliminar el dolor psicológico con dolor físico...
Y cuando ya sentía que mi problema empeoraba sentí los labios de Adrián sobre los míos... y mi tranquilidad volvió... solo con un beso de él...
Juro haber intentado de todo, y nada que no doliera daba resultado... hasta ahora...