three swords for a heart (kylie, Malia y Ruby)

cuarenta y nueve

Cap 49
Día intenso y un casi te amo

Pov karla

El viaje de regreso fue tranquilo pero cansado, kylie tuvo que parar en la carretera por estar muriendo de sueño.

Me dejó manejar aproximadamente una hora y luego cambiamos de lugares con Ruby antes de llegar a la ciudad porque no tengo licencia.

Que suerte que papá me dió unas clases de manejo hace un año.

Al llegar al campus ya estaba anocheciendo, kylie durmió casi todo el viaje y aunque me ofrecí a cargarla a su habitación para no despertarla, Malia y Ruby insistieron en que no era buena idea que alguien nos viera en eso.

A penas llegué a mi habitación tomé un baño relajante y luego me acosté a dormir.

Mi alarma sonó a las tres de la madrugada, tuve que darle comienzo a mi día con un estirón y levantarme.

La noche anterior estaba tan cansada que ni siquiera me molesté en buscar alguna pijama para ponerme.

Tomé mi bolso poniendo los libros que usaría junto a mi laptop para luego conectar mi teléfono y buscar la ropa que me pondría.

Tengo suerte de tener dos novias obsesionadas por la moda y una obsesionada con series de universitarios.

Tenía una pequeña idea no muy clara de que usar, pero algo es algo.

Gracias a todas las idas al centro comercial, lo que comenzó siendo una maleta para todo el trimestre de universidad terminó convirtiéndose en dos maletas llenas de ropa con un estilo que a mi parecer grita "fui obligada a comprarlo por tres chicas a las que no les gusta mi estilo"

Tenía jorts y camisetas, era lo que más usaba junto a la ropa deportiva. Para esta ocasión no podía optar por esa opción, puesto que, aparte de tener un buen intelecto, debo verme presentable.

Algunas veces olvido que esta universidad tiene cierto prestigio y solo estoy aquí por la beca.

Me lave los dientes, me bañe, tome mis pastillas y le.envie un mensaje rápido antes de buscar lo que me pondría.

Opté por una camisa blanca de botones y un jean bastante básico, hoy me encargaría de analizar la vestimenta de mis compañeros y aplicarlo a el resto de mi semana.

Tomé mis lentes y mi bolso junto a las llaves y mi teléfono saliendo de la habitación.

Para llegar debía cruzar técnicamente todo el campus, cosa que no había hecho desde que llegué.

Solo conocía la parte de negocios y parte de los pasillos de arte porque ambos estaban en el mismo edificio, había entrado solo una vez en el gran auditorio para la bienvenida.

También contando la cancha interna, el estacionamiento y el patio que debo cruzar diariamente para llegar al edificio de habitaciones.

La universidad era literalmente del tamaño de mi vecindario en Miami y contaba con lugares que probablemente nunca conocería.

El programa de becados consistía en reunir a los estudiantes más aplicados por una semana para tener conversatorios, debates y otras actividades, sumando que en el trayecto nuestros guías o quienes nos evaluarán serán personas de alto valor en las áreas o carreras de cada uno.

Esto más que todo ayuda a tener más oportunidades para pasantías o próximos trabajos fijos junto a la posibilidad de que puedas obtener una beca que cubra más tu matrícula.

Es técnicamente un curso, la verdad al principio ni siquiera estaba interesada en asistir, pero luego de recibir la invitación me motivó un poco.

Los pasillos estaban vacíos, en algunos sólo podías ver a conserjes limpiando.