Nunca estamos del todo solos. | ~Joetrick

No puedo estar sin ti.

Empezó a sonar el móvil de Joe, me levanté como pude sin despertarle, me puse uno de sus pantalones de pijama y bajé a la cocina. Su madre estaba haciendo la cena.

-¿Dormiste bien Patrick?

-Si, comparado con lo que he dormido estos días...

-Cariño, debes de tomártelo con un poco más de calma, sino acabarás enfermo... ¿quieres cenar ya o vas a esperar por Joe?

-No tengo mucha hambre...

-Si no cenas no te dejaré estudiar. -Dijo la madre de Joe muy segura, y la conocía sabía que era capaz de eso. -Y otra cosa ¿te vas a quedar a dormir?

-No lo se, depende de la hora a la que acabemos de estudiar.

-Es que no me fío, hoy vamos a salir y no quiero dejar a Joe solo, la última vez dijo que iba a estudiar y nos lo encontramos jugando con Spencer y Ryan, y como esta noche no estaremos pues va a ser peor.

-Pues entonces me tendré que quedar.

-Buenas noches. -Dijo Joe entrando por la cocina mientras estiraba los brazos.

-Por favor hijo ponte unos pantalones.

-Como si nunca me hubieras visto en boxers.

-Pero está Patrick, ¿no crees que es una falta de respeto ante tu novio?

-Pero si me ha visto desnudo, que más dará ya. -Deje caer mi cabeza contra la mesa. Joe se reía y la madre hablaba por lo bajo "no se podría callar..."

-Ahora no se si quiero que Patrick se quede contigo esta noche...

-¿Patrick se va a quedar?

-Si, va a ser tu niñera, para que estudies, tu padre y yo tenemos una cena y no dormiremos aquí.

-Voy a arriba para sacar las cosas...

-Les dejo aquí la cena, cuando tu padre venga les avisaré para que sepan que están solos. -Escuché decir de lejos a la madre de Joe.

Cogí los libros y las libretas por la cama, me senté en el suelo y me puse a hacer algunos ejercicios, pasaron 20 minutos y ya me aburría, realmente no se si es porque ya me lo se de memoria o por que estoy solo... realmente me he acostumbrado a pasar casi todo el día junto a Joe, y cuando estamos estudiando aun más, menos de noche, siempre lo hacemos juntos.

Aparté las cosas y bajé. Joe estaba en el mismo lugar de antes con la cabeza apoyada en la mesa. Me senté a su lado e hice lo mismo.

-¿Qué haces? -Dije sonriendo.

-Pensar en ti, como siempre. -Me contestó con una sonrisa aun mayor, notaba como mis mejillas se tornaban a un color rosada, ese calor es inconfundible. Puso su mano en mi mejilla.

-¿Y tu madre?

-Ya mi padre vino a buscarla, me echó la bronca por lo que dije antes. -Reí.

-Lo veo normal.

-Bueno, por no decir que hasta tu padre me ha visto en boxers, eso no me importa mucho que digamos... 

-¿Por qué te quedaste aquí?

-No quería molestarte, no tengo ganas de estudiar, tengo sueño, no se como tienes tanta capacidad para estas cosas. -Me encogí de hombros.

-¿Te puedes sentar bien?

-Claro ¿pasa algo? -Se apoyó en el respaldo. Me levanté de la silla y me senté encima suya. Agaché mi cabeza hasta su cuello y empecé a besarlo y darle pequeñas mordidas, el con sus brazos me apretó fuertemente. Saqué la cabeza de su cuello y empecé a besarle. Joe empezó a meter sus manos debajo de la camisa, nos separamos un momento y me la quitó y aprovechó y se quitó también la suya, me levantó aun con las dos camisas en las manos y las tiró al suelo, me tumbó en la mesa y el se colocó encima mía.

-La mesa está fría.

-Es de mármol, es normal. -Reímos. -Oye, ya que estamos así... solos digo... ¿por qué no probamos algo nuevo?

-¿Como algo nuevo?

-Ya es de noche, estamos solos, los vecinos que coinciden enfrente de la cocina ya están de vacaciones, la del lado derecho ya está durmiendo y en la otra casa no vive nadie, además hace calor... ¿por qué, no vamos a la piscina?. -Dijo eso y acto seguido empezó a besarme el cuello. Le aparté y subí al baño que había en su habitación, el no sabía que acaba de pasar, por que me había ido, pero bajé con dos toallas y lo entendió todo, me quité el pantalón y lo dejé junto a las camisas y corrí a la piscina, tirándome en bomba. Joe acto seguido hizo lo mismo. Cuando ya los dos estábamos en la superficie, el nadó hasta a mi y me besó, le abracé cruzando mis piernas en su cintura y los brazos agarrándole por el cuello, y nos seguimos besando mientras el nos iba dirigiendo a una de las paredes de la piscina, pasó a besar mi cuello, mientras tanto le conseguí quitar los boxers, le deshice el agarre de las piernas y el me quitó los míos. Seguimos besándonos hasta que los dos, cuando nos volvimos a abrazar, notamos como lo que allá abajo se había despertado.

-Patrick...

-Ssii... -contesté entre gemidos al notar como pasaba su mano por mi erección.

-Gime bajito ¿vale?

-Mmm... -Me levantó un poco más y con sumo cuidado se adentró en mi, los dos dimos un gemido largo hasta que Joe estuvo dentro del todo. Poco a poco empezó a aumentar la velocidad, tenía los brazos fuera de la piscina, intentando agarrarme a algo, mordiéndome el labio apunto de hacerme una herida para que nadie nos escuchara. Joe movía sus caderas más rápido y ya no podía aguantar. Joe acercó mi cabeza a el para poder besarme y así callar los gemidos, pero lo empeoraba porque me ponía mucho más. Después de un largo rato intenta omitir mis gemidos, al igual que Joe, acabó dejando su semilla dentro de mi, aquel líquido tibio hizo que de mis labios saliera un gemido muy suave y casi inaudible. Joe salió de mi, estaba algo asfixiado, empezó a besarme el cuello para poco a poco ir bajando. Cogió aire y se sumergió en el agua, en ese momento noté como sus labios entraban en contacto con mi erección, no es que hiciera mucho más, solo apretó un poco más y todo mi semen acabó en su boca, noté como succionó un poco para tragar cualquier rastro y subió, y nos quedamos en la misma lugar abrazados, yo apoyaba mi cabeza en su hombro mientras el se movía un poco. Cogimos los boxers y nos los pusimos y seguimos un rato en el agua jugando y besándonos.

-No sabía que eras capaz de aguantar tanto la respiración.

-Algo nuevo que sabes de mi. -Ambos reímos y nos volvimos a besar. Me separé un poco de el y me puse a flotar en el agua, noté como pasó debajo mía y salía justo donde quedaba mi cabeza y me dio un beso en la sien.

-Te amo Jojo. -Le dije mientras me movía para quedarnos mirándonos a los ojos, el solo sonrió algo sonrojado. Cada vez que le digo esto se sonroja y me encanta verle de esa manera.

-Y yo a ti mi Patito. -Me abrazó, no más tarde de 5 minutos salimos de ahí y nos fuimos a duchar, para luego seguir estudiando.