Capítulo 19

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-¡No puedes entrar ahí! -me grita una enfermera.

No le hago caso, sigo andando hacia la puerta de cristal que me separa de Alex. La enfermera chillona me agarra del brazo y me detiene.

-Solo la familia puede entrar a cuidados intensivos.

-Necesito verle.

-Está prohibido.

Me deshago de su agarre bruscamente y vuelvo al sitio dónde he pasado toda la noche. Colton se quedó dormido hace un par de horas.

(...)

-Se acaba de despertar -me dice Bea- él quiere verte.

Me levanto rápidamente y voy hacia la puerta de cristal. Alex está mirándome mientras me acerco a él. Le cojo de la mano y no soy capaz de decir una palabra.

-¿Recuerdas el lugar secreto que te enseñé?

-Sí -sonrio.

-No se lo enseñes a nadie. Va a ser solo tuyo.

-Nuestro -le digo.

-Si... Nuestro.

Me acerco a él y le beso, y no puedo retener más el sollozo entre mis labios. Una sola lágrima resbala por mi rostro y Alex la seca con su pulgar.

-Te amo -su voz suena débil.

Aprieto los labios con fuerza y parpadeo varias veces.

-Te amo.

La mano que agarra la mía ya no hace fuerza. Le acaricio el rostro y le beso por última vez, sé que es la última. Sonríe y sus ojos se cierran poco a poco hasta quedar sellados. Una de las máquinas empieza a pitar continuamente, y dos enfermeras entran corriendo. Me levanto poco a poco y salgo de allí, abrazo a Bea mientras lloro con fuerza, ahora sin aguantar nada.

ImpronunciableDonde viven las historias. Descúbrelo ahora