En realidad solo conocía a su hermano Alan, pero sabía que tenía dos hermanos más, una chica y un chico. Y por primera vez veía a su hermana, Sofía era idéntica a ella.
– Hola Jos – me dijo su hermana como si ya me conociera.
– Hola – traté de recordar su nombre.
– Karen – completó Sofía –, no la conocías ¿verdad?.
– No – respondimos Karen y yo al unísono.
Traté de no ser obvio al observar toda la casa, es de mala educación, por eso fui discreto. Su casa era pequeña pero bastante bonita.
– Abue, vino para continuar la clase – anunció Sofía y su abuelita sonrió dulcemente como asintiendo.
Eso quería decir que aquí todos sabían la razón por la cual estaba aquí, las ridículas clases.
– ¿Quieres agua o algo? – me preguntó Sofía.
– No, gracias – sonreí.
Caminamos hacia el comedor porque ahí tomaría la clase dada por Sofía.
– Veo que vas progresando, lo de hace rato – se refería a la puerta del auto – fue muy bueno, hazlo siempre.
Asentí.
– También ¿sabes qué? – parecía que algo le había llegado a la mente.
– ¿Qué? – pregunté, a veces la clase se la llevaba tan rápido.
– Aquella chica debe sentirse protegida contigo siempre – nuevamente aquella cara de chica enamorada, como si me contara una historia de amor.
– Si ¿verdad?
Recordé a Romina, al parecer todo el tiempo me lanzaba indirectas sobre eso, pero era más fácil decirlo directamente ¿no?.
– He llegado a la conclusión de que jamás te has enamorado – asentí –, todo te nacería.
– Supongo que no – hice una mueca.
– Será mejor que esperes a que sea la indicada – sonrió.
Se escuchó que abrieron y posteriormente cerraron la puerta principal, después se escucharon unos pasos hacía el comedor.
– Sofía, ya llegaron y ya ves como son – Karen había llegado corriendo a advertirle a su hermana que sus temidos hermanos habían llegado.
– Si ya llegamos – confirmó Alan llegando detrás de Karen.
– Alan – sonrió Karen y luego volteó hacia él –, más te vale comportarte con Jos, sólo es su amigo y están estudiando.
Al parecer ambas le temían a sus hermanos, ¿por qué?, eso no era correcto.
– Hola Alan – lo saludé.
– Hola – me contestó serio.
– Te estaré vigilando Sofía – esta vez dijo Iván quien llegó después de Alan, se dio la vuelta y se fue.
Miré a ambas hermanas, quienes se miraban asustadas.
– No le hagas caso, yo los controlo, no te preocupes – me tranquilizó Karen y se fue hacia la sala.
– Me protegen demasiado ¿sabes?.
– Yo también protejo a mi hermana – traté de darle el lado bueno a la forma en que se comportaban.
La hermana de Sofía entró a la cocina.
– ¿Quieren pizza? – nos preguntó.
– Vamos Jos – me indicó Sofía que fuéramos.
Fuimos hacía la sala donde estaban todos, en el centro estaba la pizza sobre una mesita.
– Toma asiento – me dijo su abuelito amablemente.
Asentí agradeciendo.
– Toma una rebanada – me dijo su abuelita.
Empezamos a hablar con sus abuelitos, pero los únicos que estaban en silencio eran Alan e Iván, estuvimos así durante 1 hora aproximadamente.
Hasta que tuve que irme. Me despedí de su familia dentro de la casa y de ella afuera.
– Entonces te veo el lunes – me dijo Sofía con una sonrisa mientras salíamos de su casa –, en la escuela.
Iba a despedirse de beso, pero no me había percatado de eso, y me moví de lugar, quedando a centímetros de sus labios.
Ella al instante se alejó, qué incomodo.
– Nos vemos – se dio la vuelta y se fue.
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Clases de amor. (Jos Canela) [EDITANDO]
FanfictionLA NOVELA SE ENCUENTRA EN EDICIÓN. Jos no ha sabido tratar a las chicas, por esa razón nunca ha tenido relaciones duraderas ni mucho menos chicas a sus pies. Esto llevará a pedirle ayuda a una inexperta en el amor pero sin embargo sensible respecto...