El encanto de Max

Capítulo 8

Pov. Max

Estaba corriendo tras Sofi y Sara.
En la mañana había decidido visitar la escuela vacía. Sofi quería ver en que instituto me formé, por mi estaba bien. Así que decidimos ir a hurtadillas. Yo sabía perfectamente a que hora era la llegada de Will, por lo tanto las llevé temprano, después de ir al hospital. Y de sentar en un ataque de celos enfermizos.
Cuando llegamos entramos por la principal, estaba abierta y es muy raro, normalmente estaba con candado, y yo que pensaba entrar de contrabando. Entramos y recorrimos las paredes blancas, que estaban cubiertas con poca propaganda y cuando llegamos a la plaza principal... las dos fotos de nuestros primeros besos entre mi dulce Abby y yo estaban esparcidas por todas la sala, techo, piso y paredes repletas de estas fotocopias. Esas fotos habian desaparecido.
Entré en un pánico que no podía soportar, tenía un miedo horrible, el simple pensamiento de perder a Sofi es desagradable. Mientras tanto Sofi observaba muy detalladamente las copias, tomó una del suelo y empezaban a salir las lágrimas de sus ojos y Sara estaba apretando los puños. Esto iba a acabar muy mal. Sino hacia algo pronto.

- ¿Acaso...? - Sofi negó con la cabeza y no terminando la pregunta- es ella - y comenzó a sollozar más fuerte. Por cada gemido de dolor una daga se instalaba en mi corazón. Yo no quería hacerle daño.

¡Por Dios! Quiero estrangular al que hizo esto.

Intenté acercarme a ella pero Sara me detuvo. Al fin y al cabo es una buena hermana.

- ¡No la toques! ¡Ambos son unos mentirosos! - Sara trataba de controlar su enojo. Ella tambien estaba lastimada porque admiraba a mi hermana como persona y escritara.

Tenía razón. Éramos de lo peor. En especial yo. Por ocultarle información.

Nuevamente intenté acercarme a mi novia, ya que Sara fue a consolarla. Necesitaba saber que me seguía perteneciendo.

- Déjanos solas - Sofi dijo con una suave voz. Que hozo que me sintiera la peor mierda de todas.

Me quedé en mi lugar como una estatua y ellas aprovecharon para irse. ¿Qué mierdas tiene Abby en la cabeza? ¿Por qué nos puso en evidencia? ¿Qué te hice para merecer esto? No sabía ninguna de esas respuestas, no le he hecho nada. Incluso no la he dejado de amar. Pero creo que tal vez ese sea el error.
Cuando caí en cuenta de que dejé salí huyendo a Sofi y su hermana, reaccioné. No la puedo dejar ir. La necesito y la quiero a mi lado para siempre. Así que corrí lo que apenas pudimos recorrer y al salir estaba Abby con cara de confusión y pánico. La conocía muy bien para saber eso. Pero es sólo un engaño, ella planeó esto. Ella es la culpable de que esté lejos de mi pequeña Sofi.

Me acerqué a ella con paso decidido y furioso. Will se dio cuenta y se interpuso entre ella y yo. Que bueno que lo hizo, sino yo hubiera reaccionado de otra forma.

Le dije: - Eres de lo peor, mira que arruinar mi relación con tus estúpidos sentimientos. Es simplemente patético - negué con la cabeza.

Esto no tenía justificación. No sé si todavía me quiera, sólo lo dije para herirla y que sienta lo que sentí ante su traición. Por eso me había comentado de que le confesara a Sofi lo nuestro. Ella tenía un plan mejor. No ha cambiado mucho, después de todo.

Me marché sin mirarla, si lo hacía iba a volverme loco.

Corrí en busca de ellas. Ya había perdido un valioso tiempo por quedarme a lastimar a mi dulce Abby. Por fortuna a doblar la esquina de la escuela las vi, más no me acerqué. Las dejé vagar hasta el parque que estaba a unos cuantos minutos de mi casa. Se sentaron y por fin pude estar cerca de ella. En verdad es hermosa. Su cabello negro, que estaba un poco largo, caía de una forma muy preciosa sobre sus hombros y espalda.