La verdad nos hará libres

31. Una botella de cristal

- ¿Qué hace una botella de cristal en un lago?
Preguntó Alex.
- ¡Mirad tiene un mensaje!
Exclamó Javier.
- Se nota.
Saltó Yara.
- Os habéis superado lleváis unos cuantos días sin pelearos...
- Salta a la vista.
Dijeron a coro.
Yo saco la nota y se la doy a Nicky y a Alex porque había dos notas, carraspaé. Ellos me miraron sorprendidos (Para ser exactos todos me miraron)
- Oye ¿Por qué nos das esto a nosotros?
- Me adelanté a la aventura y ahora por haber hecho eso me arrepiento esto va de amor.
- Pero hay que leerla.
Nicky se disponía a leer cuando yo la callé.
- Primero va Alex.
- Hola Marina, sé que nunca me quisiste y que solo te enamoraste de mí por pena. Yo la verdad si estaba enamorado de ti. También me gustaba ir a aquella casa del bosque donde había un río y esperábamos al anochecer y embarcábamos en medio de la nada tú y yo solos... También quiero que sepas que aunque tú y yo tomamos caminos diferentes y que lo nuestro fue pasajero y nada de amor verdadero. Que nunca te pude olvidar y jamás lo haré.
- ¡Qué triste y romántico!
Exclamaron Rocío, Yara y Nicky.
- Sigo sin entender como se supone que eso es romántico.
- Tú no sabes nada de romanticismo.
Se burló Marcos de mí.
- Retira eso ahora mismo.
Dije enfadada.
- Venga di algo romántico.
- Acepto el reto... Un momento no no olvídalo.
- Cobarde.
- No me gusta ponerme plan cursi.
Dije yo mordiéndome las uñas.
- Cobarde.
- Vale lo diré. Una noche estrellada en medio del mar con luna llena es romántico, nevando, sentado en un banco al atardecer o por último una lluvia débil y agradable que te acaricia en esta parte del bosque ¿Contento?
Todos me miraban desconcertados.
- No es mi culpa ver tantas películas de romance.
Marcos se rió y le tiré al suelo.
- Te recuerdo que fuiste tú el que insististe.
- Ya lo sé.
- Nicky lee antes de que alguien salga herido.
Dije dirigiéndome a Marcos.
- Hola Alejandro, me encantó lo nuestro pero siento decirte esto tengo que dejarte mis padres quieren emparejarse con otro chico al parecer es el favorito, el hijo perfecto y quieren juntarme con ese imbécil. Siento mucho que sea tu enemigo pero tengo que hacerlo no sé lo que me harían mis padres si los desobedeciera.
Me miraron pero yo negué con la cabeza.
- Mejor mañana.
Dije.