Creo en ti

"Un cambio oportuno" Capitulo 22

¿Por qué dijiste eso? ¿De verdad pensabas eso? No lo sé...

Aturdida me dirigía hacia mi casa. Sin olvidar sus palabras. Sin dejar de sentir su furia. Sin poder enojarme con él y aun así mirarlo con pena. Sin poder comprender todo lo que me estaba sucediendo. Ya lo estaba olvidando.

Había llegado a tocar el cielo con las manos nuevamente, pero una vez más. La montaña rusa bajo. Bajo velozmente en un impacto de miedo y desesperación. Estaba fuera del juego y ya no me subiría más. Desilusión.

Había sucedido todo tan rápido que ni siquiera pude mencionarle que ya no tenía padre y que me iría a Londres.

Tal vez si él no hubiera mencionado aquellas palabras, yo seguiría aquí. Con él. Pero el me había lastimado, el me veía como una nena caprichosa y consentida que sin duda no lo era... pero aun así. Estaba dispuesta a olvidar.

Olvidar... No solo olvidar sus palabras, nuestros momentos, nuestra historia, nuestros besos, nuestras casualidades y nuestros mismos ambiciosos deseos sino también estaba dispuesta a olvidarlo a él. Completamente.

Por mi sorpresa no llego a mi destino. Sino que a un destino completamente diferente. Estaba justo enfrente de la casa de Dakota. Necesitaba hablar. Necesitaba contarle un par de cosas.

Toco la puerta de madera.

Abre.

Se ve sorprendida pero feliz. Alegremente me hace pasar. Con absoluta confianza entro y entablamos una conversación.

-Lo siento porque desde la fiesta no hemos hablado... - Recupero fuerzas – es que han pasado demasiadas cosas.

-¿Ah sí?, ¿Qué sucedió? – pregunta integrada.

Suspiro

-En la fiesta lo vi. Vi a Tobías.

Ella se queda callada.

Continuo.

-Y...Luego fuimos a caminar.

Ella levanta sus cejas en expresión de asombro. Pero sigue callada.

-Estuvimos entablando una conversación. El me confesó lo que sentía, lo que sintió y... simplemente... nos besamos.

Dakota abre terriblemente los ojos y al fin habla.

-¿Se besaron? ¡Hay dios Ámbar! ¡No lo puedo creer! ¡¿Están nuevamente juntos?!

Estábamos.

-Ya no... - digo sin aliento.

-No comprendo. – dice cambiando su expresión a una confundida, entristecida.

-Estuvimos juntos desde la fiesta – que había sido hace unas semanas. – Estábamos comenzando una relación de vuelta, me sentía feliz. Pero todo se volvió difícil. A lo mejor ya era todo difícil.

-¿Quieres decir que terminaron? – pregunta con asombro.

-Si...

-Ay Ámbar lo siento... - dice mientras se calla por un momento. - ¿Pero cómo es que paso otra vez?

-Simplemente el siente que no le soy sincera, y que soy una nena consentida. – respondo.

-¿Pero qué le pasa este hombre? ¡Está equivocado! – dice furiosa.

-Tal vez tiene razón... - digo al fin.

-¿De qué hablas Ámbar?

-No le he sido sincera... No le he dicho que mi padre había muerto y añadiéndole que me ha llegado una propuesta.