Con la respuesta de mi hermano no supe que hacer o como reaccionar, solamente lo miré y respiré.
—¿Ya ella lo sabe? —Arregló su bata con su mirada clavada al piso.
— No, aun no lo sabe, está en la habitación doce —Me paré y comencé a caminar con él hacia allá..
—Espera, ¿se va a quedar aquí? —Le pregunté.
—Eso depende, ya le dimos algunos medicamentos para que se le calmara el dolor y bajara la hinchazón —Asentí. —Pero el dolor va a seguir apareciendo y después va a ser peor. —Llegamos a la habitación y respiramos hondo al mismo tiempo, entramos y le sonreí.
—Hey, ¿como te sientes? —Le dije con una suave voz.
—Bien, un poco cansada, ya quiero ir a casa —Le di un beso en la frente y acaricié su cabello.
—Si yo también. —Mi hermano carraspeó su garganta, Camila lo miró.
—Chris, ¿ya me puedo ir? —Me vio con un gesto de que lo perdonara.
—Lauren, ¿puedes esperar afuera? —Camz se sujetó de mi chaqueta.
—No ella no se va, quiero que este aquí conmigo, ya siento que es algo serio —Coloqué mis brazos a su alrededor envolviéndola en un caluroso abrazo.
—Camila tienes un tendón inflamado que te está afectando los nervios de la pierna, el cual se necesita una operación —Dijo sin rodeos, ella se sujetó mas de mi.
—Pero, ¿qué tan grande sería la cirugía? —Chris se apoyó de las barandas de la cama.
—El problema es que... Puede ser que no vuelvas a bailar —Una vez dichas esas palabras, Camz no habló mas escondiendo su cara en mi pecho, mi hermano salió y me acomodé en la cama junto a ella, no quería dejarla sola.
[...]
Después de unos minutos o algunas horas, tuve que romper el silencio que atacaba ese momento.
—¿Camz? —Pasaron unos segundos, pensé que se había dormido, pero recibí una respuesta.
—¿Si? —Como ella no podía verme, hice un gesto de alivio.
—Sé que es pronto, pero, ¿qué vas a decidir? —Se levantó solo un poco para poder mirarme.
—No voy hacer una niña malcriada, me operaré, espero ser de esas personas de una en un millón, le pido a Dios ser una. —Con una de mis manos acaricié su mejilla.
—Sabes que voy a estar aquí contigo —Negó y yo me extrañé al ver su reacción —¿Que pasa?
—No Lauren, durante mi recuperación, no quiero atarte a alguien discapacitado —Me paré enojada.
—Dijimos que haríamos esto juntas —Ella se logró sentar.
—Pero es que..—La interrumpí.
—Pero es que nada, yo voy a estar aquí, ¿bien? —Ella sonrió y alguien abrió la puerta, su sonrisa se desvaneció, al ver a la persona que estaba allí.
—¿Shawn? —Me adelanté.
—¿Que haces aquí? —Le dije apartando y sacándolo de la habitación.
—No es obvio —Dijo con antipatía.
—Vete o llamo a la policía. —Sonrió.
—No te tengo miedo, pero tranquila, yo las dejaré en paz, no quiero estar con alguien que es tan cochina y tuvo la osadía de meterse contigo —Hice un movimiento para darle un golpe, pero mi hermano apareció y me detuvo.
—Lauren no vale la pena —Dijo sujetándome. —¿Que haces aquí? —Chris preguntó.
—Simplemente quiero pedirle disculpas, fui al estudio y me dijeron que llamó para decir que tuvo una emergencia, y bueno, que estaba aquí.
—¿Ahora te haces el bueno? —Me miró con incredulidad.
—¿Puedes parar? Te estoy dejando el camino libre. —Mi hermano razonó.
—Tiene razón Lauren, deja ya el tema. —Se dirigió a él —Ella está bien, se tiene que someter a una operación, pero nada en que puedas ayudar. —Asintió.
—Si bueno, tampoco iba hacerlo. —Negué.
—Que imbécil eres. —Se fue, Chris y yo nos miramos.
—No es por nada, pero no confió en él, algo me huele mal, solo le di la razón para que se terminara de ir. —Estuve de acuerdo.
Por ahora me concentraría en el próximo paso, la cirugía de Camz.
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Mi hogar es Contigo | CAMREN
FanfictionPor un error de la inmobiliaria Camila se ve obligada a compartir su nueva casa con una completa extraña, con el tiempo empieza a sentir una fuerte atracción por esta chica, sin importarle que esta comprometida.