✴ VIVO PER LEI ✴ {Gianluca Ginoble & Tú} #Wattys2015

Capítulo 7: Necesito tu ayuda.

✴✴✴✴✴ NARRA GIANLUCA ✴✴✴✴✴
Aquel día llegué a casa muy contento. Tenía su número de teléfono, ahora podía llamarla o mandarle un mensaje siempre que quisiera. Era un paso sumamente importante para el plan, así podría mangonearla a mi antojo.
✴✴✴✴✴ NARRA TN ✴✴✴✴✴
El chico de las gafas de sol (bueno, Edoardo) se fue y yo me quedé un rato mirando la mesa en la que se había sentado, y también observando su taza de café vacía, hasta que...:
Ignazio: ¿Por qué no estás trabajando?
Lo miré y dije:
TN: Tranquilo, ya estaba trabajando. No vaya a ser que te estalle esa vena de la mala hostia que tienes en la frente, primito.
Le di un golpecito en la cabeza y seguí atendiendo las mesas hasta que llegó la hora de cerrar:
Nico: Bueno, hasta mañana, TN.
TN: Adiós, Nico. Duerme bien.
Él rió:
Nico: Por favor, volveré a dormir solo. Así nadie duerme bien. Pero bueno, espero que tú también concilies el sueño.
Le sonreí tímidamente y vi cómo se largaba. Yo subí a la casa de Ignazio y me metí en mi habitación. Salté sobre la cama y miré al techo con los ojos muy abiertos y una gran sonrisa:
TN: Edoardo... Se llama Edoardo. Qué nombre tan bonito tiene. Edoardo, Edoardo, Edoardo...
En ese momento, irrumpieron en el cuarto sin llamar a la puerta:
Ignazio: Estúpida, quiero hablar contigo, levántate... Por Dios, ¿qué haces? ¿Te masturbas o qué?
TN: A VER, IDIOTA, ¿ACASO ERES TAN POCO HOMBRE QUE NI SIQUIERA RESPETAS LA PRIVACIDAD DE UNA CHICA? TEN UNA MÍNIMA PIZCA DE EDUCACIÓN Y LLAMA A LA PUERTA ANTES DE ENTRAR, HAZ EL FAVOR. Y NO, NO ME ESTABA MASTURBANDO. SI TE INTERESA SABERLO, YO NO HAGO ESAS COSAS. Y, ADEMÁS, ¿QUÉ MIERDA HACES AQUÍ?
Continuó acercándose y tiró de mi brazo para elevarme de la cama:
Ignazio: NO VUELVAS A HABLARME ASÍ, O SINO...
TN: ¿O SINO, QUÉ? ¿QUÉ ME VAS A HACER, IMBÉCIL? ¿ME VAS A PEGAR? ¿ME VAS A ENCERRAR EN ESTA PUTA HABITACIÓN? ¿ME VAS A OBLIGAR A HACER HORAS EXTRA EN TU ESTÚPIDO BAR DE BORRACHOS? Adelante, no te tengo miedo. Hazme lo que sea, me la va a bufar, como siempre lo ha hecho todo lo que me dices.
No lo vi venir y me tiró sobre la cama de nuevo, inmovilizándome:
Ignazio: NO JUEGUES CON FUEGO, TN. QUIZÁ TE QUEMES...
TN: ¡¡¡DÉJAME!!! ¡¡¡SÁCATE DE ENCIMA, PETARDO DE MIERDA!!! ¡¡¡SOCORRO!!! ¡¡¡SOCORROOOOOOOO!!!
No sé cómo lo logré, pero lo golpeé en la entrepierna y conseguí deshacerme de su agarre. Me puse de pie rápidamente y abrí la puerta para irme, pero justo cuando lo hice, al otro lado estaba Piero:
Piero: TN, ¿qué pasa? ¿Qué son esos gritos?
Entró sin esperar mi respuesta y vio a Ignazio retorciéndose de dolor como el bicho asqueroso que era:
Piero: ¡Primo! ¿Qué haces aquí? ¿Qué ha pasado?
Él seguía gimiendo y quejándose:
Ignazio: Auch... TN... Yo solo quería hablar... Oh, oh, joder... Y... Y ella casi me deja estéril... Joder tío, mis huevos... Creo que me los ha triturado... No sé por qué me odia tanto... Ay Dios, el dolor que estoy sintiendo no es ni medio normal...
Piero lo ayudó a incorporarse mientras él se masajeaba la zona afectada. Yo me reía a más no poder, por supuestísimamente:
TN: Venga, Ignazio, no exageres, no puedo triturarte lo que no tienes...
Piero: ¡¡¡TN!!! ¡¡¡ESTÁS AGOTANDO MI PACIENCIA!!! ¿TE PARECE BIEN EMPEZAR A PEGARLE A UN HOMBRE EN ESA PARTE DEL CUERPO ASÍ PORQUE SÍ?
TN: ¡¡¡NO JODAS, PIERO!!! ¡¡¡YO A ESTE PUTO GILIPOLLAS NO LO TOCARÍA NI CON UN PALO!!! SI LO HE HECHO, HA SIDO POR UNA RAZÓN...
Piero: ¿Y cuál es la razón? Venga, explícamela y así quizá, y solo quizá, te libres del castigo que te pienso poner.
TN: ¡Claro! Le pegué una hostia en los cojones porque...
Ignazio: Porque la pillé tocándose.
Piero: ¿¡QUE QUÉÉÉ!?
TN: ¿¡SE PUEDE SABER QUÉ COÑO DICES, PUTO RETRASADO MENTAL!? PIERO, NO TE CREERÁS ESTO, ¿VERDAD?
Pero permaneció callado:
TN: ¿VERDAD?
Piero: Mira, TN, entiendo que estás en una edad muy mala, y que quieres experimentar y descubrir tu cuerpo y todo eso, bueno... ¿Quieres que hablemos sobre ese tema? Creo que lo necesitas.
TN: ¿¡PERO QUÉ COÑO ME ESTÁS CONTANDO!? ¿¿¿INTENTAS TENER UNA CHARLA SOBRE SEXO CONMIGO??? ¿¿¿ES EN SERIO, PIERO??? ¿¿¿ES ESTA TU FORMA DE RESOLVER LOS PROBLEMAS???
Piero: Yo solo trato de hacerlo lo mejor que puedo...
TN: ¡¡¡QUE YO NO ME TOCO!!!
Ignazio: Sí que lo haces. Antes de entrar en tu habitación, susurrabas: Edoardo... Edoardo... Edoardo... Y estabas tumbada cuando entré. Te estabas tocando, di ya la verdad y acabemos con esto.
TN: ¿¡QUIERES QUE TE VUELVA A TRITURAR LOS POCOS HUEVOS QUE TIENES, HIJO DE PUTA!? ¡¡¡DEJA DE INTENTAR PONER A MI HERMANO EN MI CONTRA, METEMIERDA!!!
Piero: ¡¡¡TN, PARA YA, ESTÁS TOTALMENTE DESCONTROLADA!!! Se acabó, estás castigada.
TN: Uh, qué novedad...
Piero: No me provoques o te aumentaré el castigo... 2 semanas sin salir, solo trabajarás, empezarás a ir a la universidad de Abruzzo y te quedarás en casa. Y tú y yo... Ya hablaremos sobre temas candentes en otro momento.
Le puso una mano en el hombro a Ignazio y salieron, pero cuando Piero no miraba, se giró para hacerme la burla. ¿Ah, sí? ¿Creéis que podéis manejarme como a una marioneta? Estáis muy equivocados... Y os lo voy a demostrar.
✴✴✴✴✴ NARRA GIANLUCA ✴✴✴✴✴
Gianluca: Madre mía, qué bien me ha quedado la tortilla... Hoy cenaré de lujo, qué buena pinta tiene...
Agarré el cuchillo y el tenedor y, justo cuando iba a empezar a comer, mi móvil sonó. Miré la pantalla, esperando que fuera él... Pero no. Para mi sorpresa, era TN:
Gianluca: ¿Diga?
Tuve el placer de escuchar su dulce voz al otro lado:
TN: ¿Edoardo?
Gianluca: Eh... Sí, soy yo.
TN: Oh, qué bien, soy TN, la chica del bar...
Inmediatamente me quise hacer el chulo:
Gianluca: Ah, hola preciosa, ¿cómo te va?
TN: Pues no muy bien... Pero escucha, necesito tu ayuda.
¿Que necesitaba mi ayuda? En teoría, acabábamos de conocernos, ¿qué querría ella de un desconocido? Entonces caí: Sexo:
Gianluca: ¿Y para qué quieres que te ayude?
Esperaba que se me insinuara, o algo así... Pero no lo hizo. Resultó ser que yo no estaba en lo cierto:
TN: Sé que no nos conocemos ni siquiera de un día, pero quiero que me ayudes a escaparme de casa.
Gianluca: ¿Cómo dices?
TN: Ya has oído. Quiero escaparme de casa. Por favor, ayúdame, Edoardo.
Gianluca: Pero... ¿Por qué quieres escaparte?
TN: Larga historia...
Gianluca: ¿Me la contarás si te ayudo?
TN: ¡Sí! Te lo contaré todo, te lo prometo, pero échame un cable... ¿Te apuntas?
Dudé, pero la escuchaba tan ansiosa y decidida, nunca había hablado con ese tono de voz. Parecía como la típica niña pequeña que coge un berrinche por cualquier cosa, pero ella semejaba estar realmente harta, y necesitaba saber el por qué:
Gianluca: Me apunto. Te ayudaré, TN.
Ella suspiró como si se sintiera aliviada:
TN: Muchísimas gracias, Edoardo, de verdad... Te daré la dirección.
Me la mandó en un mensaje y yo corrí a prepararme, dejando que mi perfecta tortilla se enfriara. Pero, ¿qué importaba eso cuando ella había recurrido a mí para llevar a cabo una aventura como esta?