Capítulo 5: Sed de venganza.

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TN: No, no, lo siento, por favor, tienes que perdonarme, no lo hagas, por favor... ¡¡¡POR FAVOR, NO!!!
Me desperté bañada en sudor y con los ojos abiertos como platos. Me pasé una mano por la cara y pensé: "Fui tan estúpida... Lo hice todo mal con él, no se merecía eso...". Estaba completamente empapada, así que me tomé una ducha. ¿Por qué había soñado con él? ¿Por qué lo había recordado justo ahora, cuando creí que ya lo había dejado atrás?
✴✴✴✴✴ NARRA GIANLUCA ✴✴✴✴✴
No estoy seguro de querer volver a verla de nuevo. Lo de ayer me dejó bastante en shock y no creí que fuera a sucederme eso. ¿Por qué me sigue doliendo? ¿Por qué muy en el fondo esperaba que se acordara de mí cuando estaba claro que no lo haría? El sonido de mi móvil me sacó de mis pensamientos. Miré la pantalla. El identificador de llamadas me avisaba de que era él:
Gianluca: ¿Sí?
Su voz ronca pero a la vez aguda llegó a mis oídos:
...: Ayer la viste, ¿cierto?
Gianluca: Así es.
...: ¿Y qué te pareció?
Gianluca: ¿Que qué me pareció? ¿A qué te refieres?
...: Tú sabrás. Espero que no se te esté pasando por la cabeza traicionarme, ve haciéndote a la idea de que muy pronto yo llevaré a cabo tu venganza, y de que tu querida familia estará en peligro si te echas para atrás.
Cerré los ojos con fuerza:
Gianluca: Ya lo sé... No me importa lo que le hagas. Solo... Quería verla una vez más.
...: ¿Sabes qué? Ve otra vez al bar. Quiero que la atormentes. No la dejes en paz, quiero verte todos los días allí, ¿estamos?
Mierda, yo no quería regresar... Traté de zafarme:
Gianluca: No, no creo que haga falta, seguiré con el plan, pero eso no es necesario...
...: Oh, Gianluca, pequeño, inocente y estúpido Gianluca, yo he decidido ayudarte, pero con la condición de que yo dirigiría todo el tinglado. No quieras cambiar los papeles. Vete preparando, hoy quiero verte allí.
Y colgó. Joder, tendría que volver... Me arreglé y me metí en el coche, poniendo rumbo al dichoso bar. No tenía más remedio si no quería que mis familiares sufrieran las consecuencias de la ira de este tipo. Yo solo sabía que él también quería vengarse de ella, pero no sabía el por qué... ¿Qué le habría hecho?
✴✴✴✴✴ NARRA TN ✴✴✴✴✴
Me puse el uniforme y bajé a trabajar, pero sorprendentemente no estaban ni Piero, ni Nico ni ningún cliente. Bueno, mejor, tendría la mañana libre... Decidí limpiar un poco el mostrador, estaba algo sucio, y luego me senté en una de las mesas a leer un libro.
✴✴✴✴✴ NARRA GIANLUCA ✴✴✴✴✴
Llegué y aparqué en el mismo sitio de ayer. Salí y me dispuse a entrar, y ahí estaba, en una mesa. Sonreí levemente mientras la contemplaba, pero... ¡Hostia, las gafas! ¡No las llevaba puestas! Ella me miró y eché a correr de vuelta al coche.
✴✴✴✴✴ NARRA TN ✴✴✴✴✴
Estaba tan tranquila leyendo hasta que vi una sombra reflejada en el suelo. Levanté la mirada y... ¿Era él? ¿Era el chico de ayer? No pude saberlo, porque se largó en un abrir y cerrar de ojos. Empecé a andar detrás de él, pero alguien me frenó, cogiéndome por el brazo:
Ignazio: ¿Adónde vas?
TN: Yo... Ya vuelvo ahora.
Él hizo fuerza:
Ignazio: No, no volverás, porque no te irás a ninguna parte. Ponte a trabajar, vaga de mierda.
Me dio un pequeño empujón y me obligó a quedarme. Joder...
✴✴✴✴✴ NARRA GIANLUCA ✴✴✴✴✴
Entré con la cara roja y muy nervioso, así que me senté en el asiento del conductor y me puse las gafas. Agarré el teléfono móvil para marcar un determinado número:
...: ¿Qué quieres?
Gianluca: Casi me descubre, no puedo entrar otra vez ahí, por favor...
...: Vale, ya lo he visto. Vete, pero mañana regresarás.
Gianluca: ¡PERO...!
...: No hay "peros", Ginoble. Harás lo que yo te diga.
Pulsé el botón de colgar y me lamí los labios. Parece que ahora nos veríamos muy a menudo... ¿Le habría dado tiempo a verme los ojos?
✴✴✴✴✴ NARRA TN ✴✴✴✴✴
No podía sacármelo de la cabeza. No me había dado tiempo a ver bien sus ojos, pero sabía que era el mismo de las gafas de sol... No tenía pruebas, pero yo lo sabía. Solo podía esperar a tener suerte y que volviera otro día para verlo bien. Tenía que investigar e intentar averiguar algo sobre él, su comportamiento era sospechoso. Demasiadas preguntas sin respuesta, necesitaba resolver dudas...:
Piero: Hermanita, ¿qué haces?
Miré a Piero:
TN: Nada, pienso... Voy a trabajar.
Pero no me dejó:
Piero: TN, yo conozco esa mirada... Sé en lo que piensas. Ven aquí.
Y me abrazó con firmeza. Yo me acurruqué contra su pecho y cerré los ojos, dejando que hablara:
Piero: Sé que lo que pasó con Gianluca nunca debió suceder. Sé que piensas que fue culpa tuya, pero no es así, ¿vale? Fue decisión suya hacer lo que hizo. Anda, deja de recordar eso...
TN: No sé por qué lo he pensado. Sigo... Acordándome de él, por supuesto, y he vuelto a sentirme culpable... Yo no quería que le pasara nada, Piero, de verdad que no...
Piero: Lo sé. Pero no puedes hacer nada. Si de mí dependiera, preferiría ponerme yo en su lugar.
TN: No, no seas bruto, eres mi hermano y te necesito a mi lado. Pero es que es tan raro, ¿sabes? Nunca había vuelto a pensar en él, ¿por qué ahora lo hago?
Piero: Porque lo amabas. Y sigues amándolo, pero tienes que aceptar de una vez por todas que no va a volver, yo lo siento muchísimo, pero los muertos no regresan. Creo que lo que necesitas es conocer a alguien que te haga feliz. Ya es tiempo para un nuevo amor.
Me desprendí de su abrazo y miré al suelo:
TN: ¿Puedes cubrirme un momento, por favor? Será mejor que vaya a descansar un poco.
Piero: Claro, ya se lo explico yo a Ignazio.
✴✴✴✴✴ NARRA GIANLUCA ✴✴✴✴✴
Conducía hacia cualquier cafetería para tomarme un café con leche. Me senté en la terraza y me lo bebí tranquilamente. De pronto, me di cuenta de que todavía tenía puestas las gafas de sol y me las quité. Tenían la montura negra y los cristales morados, eran chulas. No sé por qué, pero mirarlas detenidamente me hizo sentirme un rompecorazones, y me gustó esa sensación. Sí, todos decían que estaba más bueno ahora, y el "jefe" quería que la atormentara, así que... ¿Por qué no trataba de enamorarla para romperle el corazón como ella me lo había hecho a mí? Estaba más que dispuesto a hacérselas pasar canutas, así que lo volví a llamar para contarle mi plan:
Gianluca: Bueno, entonces... ¿Qué te parece?
...: Me encanta. Quiero que sufra, y nada como un amor adolescente para eso. Genial, mañana estaré observándoos, no quiero perderme este dramón.
Gianluca: Será de tu agrado. La dejaré hecha un trapo. Te aseguro que esa maldita no volverá a ser feliz nunca más.
Él se rió perversamente:
...: Así me gusta, Ginoble, lo mejor es ser testigo de cómo te hierve la sangre de toda la rabia que tienes acumulada y que muy pronto dejarás caer sobre ella. Hasta mañana entonces.
Gianluca: Hasta mañana.
Le pagué al camarero y me marché a mi apartamento. Ya había avanzado mucho en el plan y no podía ponerme sentimentaloide ahora. No la amaba, ya no. Solo... Solo la deseaba. ¿Por qué la deseaba? Simplemente me parecía la chica más preciosa que jamás había visto. Quizá llegara a acostarme con ella antes de dejarla. Cada vez tenía más ganas de jugar con TN. Quería humillarla y hacerla sentir lo peor posible. Ahora yo era el que llevaba las riendas de todo esto.

✴ VIVO PER LEI ✴ {Gianluca Ginoble & Tú} #Wattys2015Donde viven las historias. Descúbrelo ahora