Capítulo 22: Los Ginoble.

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✴✴✴✴✴ NARRA TN ✴✴✴✴✴
Todavía seguía esperando a Ernie, que parecía no tener prisa por volver conmigo. Pero, finalmente, regresó:
TN: ¡Vaya, por fin has terminado! Has tardado mucho, ¿no crees?
✴✴✴✴✴ NARRA ERNIE ✴✴✴✴✴
Dios, ahora debía mantener a TN a mi lado todo el día e impedir que cogiera el autobús hasta que Gianluca viniera a buscarme:
Ernie: Discúlpame. Es que... Era importante.
Ella sonrió con visible incomodidad y dijo:
TN: Vale, no pasa nada... ¿Me vas a enseñar esto?
Ernie: Claro, claro que sí, vamos... Yo te lo enseño todo.
✴✴✴✴✴ NARRA TN ✴✴✴✴✴
Los dos nos fuimos hacia la puerta y él la abrió, haciéndome un ademán para que entrara dentro. Mi primera reacción fue:
TN: ¡¡¡WOW!!! ¡¡¡ESTO ES JODIDAMENTE ENORME!!!
Ernie sonrió:
Ernie: Ya, bueno... Ya te irás acostumbrando. Por cierto, ¿qué curso vas a estudiar?
TN: 1°... ¿Y tú?
Ernie: Yo también.
✴✴✴✴✴ NARRA ERNIE ✴✴✴✴✴
Aunque yo era pequeño cuando Gian y ella salían, solamente lo era de estatura. Pero tanto él como yo hemos cambiado radicalmente de apariencia física, así que es completamente normal que no me reconozca. En realidad, ella y yo teníamos la misma edad. Gianluca era un poco más mayor. TN se puso muy contenta al saber que estudiaríamos lo mismo:
TN: ¿En serio? ¡Qué guay! ¡Ya tengo un compañero de clase!
✴✴✴✴✴ NARRA TN ✴✴✴✴✴
Saber que Ernie podría estar en mi clase me había hecho feliz porque al menos, ya no estaría sola:
Ernie: Ven, tenemos que ir al corcho, ahí ponen los nombres de todos los alumnos y qué clase les corresponde a cada uno de ellos. ¡Vamos a ver las nuestras!
Accedí. Echó a correr en una dirección y yo fui tras él porque sabía que, si no lo hacía, me perdería. Llegamos a un pasillo estrecho, (demasiado estrecho, diría yo) y rebosante de gente. Ernie señaló una pared de color blanco. En ella estaba el famoso corcho, ahí clavado y lleno de papeles:
Ernie: Busquemos el que pone los nombres de los alumnos de 1°...
Yo lo encontré bastante rápido:
TN: ¡Mira! ¡Es este!
Empezamos a mirar y me topé con el mío:
TN: TN Barone... Clase de 1° B. Aula 210.
Ernie: Oh, vale... Busquemos la mía.
✴✴✴✴✴ NARRA ERNIE ✴✴✴✴✴
Mientras mirábamos, me di cuenta de que podría ver mi apellido en las listas. En ese momento, gritó:
TN: ¡Mira, estás aquí, en mi clase! Ernesto...
En un auto reflejo, tapé mi apellido con una mano y sonreí con nerviosismo:
Ernie: ¡Oh, sí, estamos en la misma clase, genial!
TN: Espera, déjame ver bien... Quizá sea otro Ernesto.
Ernie: ¡NO! Soy yo, soy yo... Venga, vamos a secretaría a pedir nuestro horario.
TN: Pero...
Ernie: ¡Vamos! Vaaamos, vamos, vamos.
La fui empujando para alejarla lo más rápido posible de ese estúpido corcho. Entramos en secretaría y había una fila enorme de chicos y chicas que, al igual que nosotros, venían a recoger sus horarios. Nos colocamos en ella y nos tocó esperar un poco, pero al final llegamos:
Secretaria: Buenos días, venís a por el horario, ¿verdad?
Ernie: Sí, exacto.
Secretaria: Vale, ¿qué clase es?
Ernie: 1° B, aula 210.
Revisó unos papeles y nos dio dos exactamente iguales, uno para mí y el otro para TN:
Ernie: Muchas gracias.
Secretaria: De nada, y a estudiar mucho este año.
Ernie: Sí, sí...
Salimos y miramos el papelito:
TN: Según esto, ahora tenemos... ¡Plástica!
Ernie: Oh, Dios... Qué asco. Soy un paquete en el dibujo, la escultura, la pintura y todo lo que engloba esa dichosa asignatura.
Ella se rió:
TN: Tranquilo, a mí se me da bastante bien. Yo puedo ayudarte.
Ernie: Vale... Deberíamos ir yendo.
Avanzamos con dificultad por el pasillo, tropezándonos con la gente, y por fin pudimos entrar en la clase.
✴✴✴✴✴ NARRA TN ✴✴✴✴✴
Nuestra clase era grande y espaciosa, muy bonita. Dentro de ella ya estaba un hombre y también algunas personas que habían recogido el horario antes que nosotros. El hombre, que en realidad era el profesor, nos saludó amablemente:
Profesor: Buenos días, chicos. Soy Carlo, vuestro profesor de educación plástica. ¿Cómo os llamáis?
TN: Hola. Yo soy TN, TN Barone. Y él es Ernie.
Miró un papel, que debía de ser la lista de alumnos, y nos miró como si estuviera extrañado:
Carlo: ¿Ernie? Aquí no hay ningún Ernie. Tú sí que estás, pero Ernie...
Él dio un paso al frente:
Ernie: Ernesto, profesor. Me llamo Ernesto.
Volvió a mirar y luego nos sonrió:
Carlo: Ah, ahora sí. Bueno, pues... Tomad asiento, empezaremos con la clase cuando lleguen los que faltan.
Nos sentamos juntos. Me gustó muchísimo la clase de Carlo. A Ernie, no tanto. No bromeaba con eso de que era un paquete en plástica, de verdad lo era. El profesor nos puso delante un dibujo que teníamos que copiar. Era un bol con frutas. Y... A Ernie, en vez de un bol, le salió algo parecido a un plátano con pelotas por encima:
Ernie: ¡Joder! Cómo odio los boles con frutas...
Yo eché un vistazo y me burlé de él (tenía que hacerlo):
TN: Mi caca tiene mejor forma que tu dibujo.
Me dio un golpe en el brazo:
TN: ¡Auch!
Ernie: No le hagas bullying a mi dibujo.
Y así transcurrió mi primer día en la universidad, con Ernie de clase en clase, hasta la última. Salimos de camino a los autobuses, pero de repente, me retuvo:
TN: Hey, ¿qué pasa? ¡Vamos al bus!
Ernie: No, yo no subo.
TN: ¿Qué? ¿Pero por qué?
Ernie: Bueno... Quiero quedarme por aquí.
TN: Ah, bueno, está bien... Pero déjame subir a mí.
Ernie: ¡NO! Es decir... No, yo... Quería invitarte a algo.
TN: ¿Qué? Ernie, se me hará tarde y como no llegue a casa en el bus, mi hermano es capaz de contratar al FBI para que me busquen.
Ernie: Por favor... Toma, te dejo mi móvil para que lo llames...
Me lo ofreció, pero yo ya tenía el mío:
TN: No, gracias... Ya lo llamo yo.
Marqué el número de teléfono:
Piero: ¿Diga?
TN: Hola Piero, soy yo.
Piero: ¡Hermanita! ¿Qué tal tu primer día?
TN: Bien, ya he salido... Escucha, voy a quedar con un amigo a tomar algo. Solo era para avisarte de que no iré en el autobús de vuelta a casa.
Piero: De acuerdo, no hay problema. Pásalo bien. Te quiero.
TN: Yo también te quiero. Chao.
Colgué y le sonreí a Ernie:
TN: Bueno, ¿y adónde tienes pensado que vayamos?
Titubeó un poco y luego dijo:
Ernie: Ven por aquí.
Lo seguí y me llevó a una cafetería cercana. Nos sentamos a beber afuera.
✴✴✴✴✴ NARRA GIANLUCA ✴✴✴✴✴
Terminé de comer y miré mi reloj. A esta hora, Ernie ya debía haber salido de la universidad. Aún así, quise enviarle un mensaje para asegurarme:
"¿Ya habéis salido?"
✴✴✴✴✴ NARRA ERNIE ✴✴✴✴✴
Estaba hablando con TN sobre mi obra maestra de la clase de plástica cuando vi que me habían enviado un mensaje. Obviamente, era de Gianluca. Le respondí:
"Sí, estamos en la cafetería que queda enfrente de la universidad. Ven rápido, no sé cuánto tiempo más podré entretenerla".
✴✴✴✴✴ NARRA GIANLUCA ✴✴✴✴✴
Tan pronto como vi el mensaje de Ernie pidiéndome que me diera prisa, me puse en camino enseguida. Tampoco había mucho tramo desde mi casa a la universidad. Llegué bastante rápido. Salté fuera del coche y me dirigí a la cafetería que me había dicho mi hermano.
✴✴✴✴✴ NARRA TN ✴✴✴✴✴
Estaba entretenida con Ernie, pero de repente, vi aparcar un coche delante de donde estábamos. Un coche familiar para mí...:
TN: Mierda...
Ernie: ¿Qué pasa?
Era Gian, eso pasaba:
TN: Ernie, por favor, ¿podemos irnos?
Ernie: ¿Qué? ¿Pero por qué?
TN: Por favor, por favor...
Y en ese momento, Gianluca gritó:
Gianluca: ¡Ernie!
Él se giró para mirarlo y sonrió:
Ernie: ¡Gian!
Yo estaba histérica:
TN: ¿Pero qué cojones... Qué pasa aquí?
Ernie me cogió las manos y me miró a los ojos fijamente:
Ernie: TN, yo... Me llamo Ernie. Ernesto Ginoble. Y soy el hermano pequeño de Gianluca.
Y lo entendí todo. Por eso me sonaba tanto su nombre... Y por eso él no me había dicho su apellido. ¡Estaba ayudando a Gianluca a acercarse a mí!:
Gianluca: Hola... TN, tengo que hablar contigo... Debo advertirte.
TN: ¡¡¡DÉJAME EN PAZ, GIANLUCA, DÉJAME EN PAZ!!!
Traté de levantarme, pero como Ernie seguía sujetándome, me fue imposible:
Ernie: TN, déjalo hablar, por favor...
TN: ¡¡¡TÚ CÁLLATE, PUTO FALSO!!! ¡¡¡YA ESTOY HARTA DE TANTOS GINOBLE!!!
Se miraron entre ellos y Gian habló:
Gianluca: Al coche.
TN: ¿¡QUÉ!?
Gianluca: Ernie, ayúdame a meterla en el coche.
Y, mientras Ernie agarraba mis manos, Gianluca me cargó justo como un saco de patatas. Yo gritaba y pataleaba lo más fuerte que podía, pero los demás inútiles que estaban por allí, en vez de compadecerse de mí, se reían. Me metió en el asiento trasero y, para que no pudiera escapar, Ernie se sentó a mi lado:
TN: ¡¡¡TE ODIO, GIANLUCA GINOBLE, TE ODIO!!!
Gianluca: Solo te llevo a casa... Debo decirte algo.
TN: ¡¡¡ESTO ES SECUESTRO, PODRÍAN METERTE EN LA CÁRCEL!!!
Gianluca: No lo harán. Luego te dejaré marchar, te lo prometo...
TN: ¡¡¡ERES UN CRETINO, CADA VEZ TE SOPORTO MENOS!!! ¡¡¡TE ODIO, TE ODI...
Ernie me puso una mano en la boca para que me callara:
Ernie: ¡Dios, cierra el pico ya! Mañana tendré dolor de cabeza por tu culpa... Y no seas tan dramática, por favor, Gianluca y yo no somos malos tíos, ¿qué te crees? ¿Que te vamos a descuartizar o qué?
Al final me callé y me dediqué a mirar por la ventanilla. Sería mejor para mí que me fuera haciendo a la idea de que acabaría en la casa de Gian otra vez...

✴ VIVO PER LEI ✴ {Gianluca Ginoble & Tú} #Wattys2015Donde viven las historias. Descúbrelo ahora