Capítulo 13: La decisión.

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✴✴✴✴✴ NARRA TN ✴✴✴✴✴
Lo que me dijo Edoardo hizo que me sintiera avergonzada. Agaché la cabeza y pensé en que seguramente tenía razón. Piero me quería mucho, y yo a él, éramos hermanos, ¿cómo no hacerlo? Y yo lo había tratado muy mal...:
TN: Estás en lo cierto, Edoardo. Piero no es el culpable de nada... Me he pasado.
Él sonrió:
Gianluca: Claro que no lo es. Nunca nadie podrá quererte tanto como te quiere él. Ni siquiera Gianluca podría quererte así...
¿Por qué lo mencionaba? Ya no quería hablar de eso, ¿por qué insistía de esa manera y trataba de decir el nombre de Gianluca siempre que manteníamos una conversación?:
TN: Por favor, deja de recordarme a Gian... Por favor, para.
✴✴✴✴✴ NARRA GIANLUCA ✴✴✴✴✴
No sé por qué había querido hablar de mí en ese momento. Se notaba a leguas que no debí decir nada. Debí haber mantenido la boca cerrada...:
Gianluca: Perdóname. No, es verdad, tienes toda la razón, soy un estúpido, lo siento mucho...
Ella se mordió el labio:
TN: No pasa nada, solo que... Me duele un poco. ¿Sabes qué? Será mejor que cambiemos de tema.
Moví la cabeza en señal de aprobación:
Gianluca: De acuerdo... ¿Qué es eso de que somos novios?
Se rió:
TN: Ya te lo he dicho. Quise chinchar a mi hermano y le mentí...
Le devolví la sonrisa:
Gianluca: Oh, sí, seguro... Porque yo no recuerdo haberlo hecho en "TOOOODAS LAS POSTURAS POSIBLES".
Empecé a reírme como un loco, tanto que me tiré en el sofá y me sujeté la tripa con las manos por la risa:
TN: Ay, bueno... ¿Y qué querías que le dijera, si trató de tener una charla sobre sexo conmigo?
Yo todavía seguía riéndome fuerte:
Gianluca: Podrías haberla tenido conmigo, yo te explicaría todo todito, tema por tema.
Me fulminó con la mirada:
TN: Como si fuese virgen, Edoardo...
La verdad era que no podía parar de reírme. Lo intenté, juro que lo intenté, pero fui incapaz:
Gianluca: Ay, ay... Ay, que me meo, en serio... ¿Nunca has pensado en trabajar de cómica?
TN: JA JA JÁ, qué gracioso eres, por favor... ¿Cómo es que todavía no te han contratado en el circo? Eres todo un showman, chico de las gafas de sol.
Por fin logré parar de reír y me levanté del sofá:
Gianluca: Bueno... No es para tanto...
Me dio un codazo:
TN: Era ironía, idiota...
Gianluca: ¡Hey! ¡Yo no soy un idiota!
Aunque por dentro sabía perfectamente que sí lo era:
TN: Era un apodo cariñoso... Qué sensible estás hoy, Edoardo. Tanto o más que tus ojos.
Me guiñó un ojo y comenzó a recoger la mesa:
Gianluca: Yo te ayudo.
TN: Vale, gracias.
Mientras lavábamos los platos los dos juntos (con gafas incluidas), quise aprovechar para preguntarle más cosas:
Gianluca: Oye, TN...
TN: ¿Sí? Dime.
Gianluca: Respecto a lo que te he dicho antes... ¿Se te vino alguien a la mente cuando te dije que tu rabia se la merecía otra persona?
De pronto, dejó el plato que estaba lavando y me miró:
TN: Pues... Sí. Por supuesto que sí.
Ya tenía una ligera sospecha de quién podía ser, pero pregunté igualmente:
Gianluca: ¿Y quién es?
TN: Mi primo Ignazio. Ignazio Boschetto.
JÁ, lo sabía... Como para no saberlo después de ver lo mucho que se detestaban:
Gianluca: ¿Tanto te molesta?
TN: No tienes ni la más mínima idea del daño que me ha hecho... Es repulsivo.
Gianluca: Cuéntame todo. Quiero saberlo.
TN: Uf, vale, como quieras. Todo empezó cuando mis padres murieron en un accidente de avión. Él ya comenzaba a picarme, pero no era gran cosa. Todo se volvió peor cuando perdí a Gian... Me echó la culpa de todo a mí, y me hizo la vida imposible desde entonces. Manipuló a Piero para que aceptara hacer un trato con él. El trato consistía en que nos mudaríamos aquí cuando le hiciera falta ayuda con el bar. Y, como podrás deducir, ha llegado el momento, sino, no estaría escapándome de casa. Piero es demasiado inocente para ver la maldad de la gente, pero yo no soy así. Somos totalmente diferentes. Obviamente, él lo único que quería era tenerme en su casa para tener autoridad sobre mí. Incluso hizo creer a mi hermano que yo me tocaba... Pensando en ti.
Ay Dios, se toca pensando en mí... ¡¡¡SÍÍÍ, JODER, ME DESEA!!! Pero ¿qué cojones? ¿Por qué pienso en sucio? Además, ella había dicho que no lo hacía... Me vine arriba demasiado pronto:
Gianluca: ¿Cómo que pensando en mí?
TN: Ah, bueno... Es que el día que te conocí me tumbé en la cama repitiendo tu nombre... Me gusta, es muy bonito y siempre sentí curiosidad por ti, desde que empezaste a venir al bar. Siempre me pregunté cómo te llamabas, y aquel día lo descubrí. Pero Ignazio entró sin llamar a la puerta y me escuchó. Me levantó a la fuerza, quería hablar conmigo, no sé de qué... Y me preguntó si me estaba masturbando. Yo le dije que no, de mala manera, claramente, y se enfadó. Me estaba haciendo daño, así que pedí socorro, y le pateé las pelotas. Abrí la puerta para marcharme, pero Piero estaba detrás... Y ese gilipollas aprovechó para decirle que me tocaba. Y, ¿sabes qué? Se lo creyó... Por eso quiso hablar de sexo. Y por eso quise escapar.
Madre mía... Ahora lo entendía todo. Comprendí su frustración y sus ganas de mandarlo todo a la mierda:
Gianluca: Es impresionante que lo hayas aguantado tanto tiempo. No es justo lo que has tenido que pasar. No es justo que tus padres murieran, no es justo que tu primo te trate así, y no es justo que Gianluca no te dejara explicarte... Es un imbécil integral. No sé por qué sigues queriéndolo. Él sí que no te merece. De verdad te lo digo...
Sin comerlo ni beberlo, me soltó un bofetón. Lloraba, pero intentaba no hacerlo:
TN: JAMÁS VUELVAS A HABLAR ASÍ DE GIANLUCA, ¿ME HAS OÍDO? JAMÁS EN LO QUE TE QUEDA DE VIDA. TODO FUE CULPA DE LAS ZORRAS DEL INSTITUTO, ¿POR QUÉ NO PODÉIS DEJARLO EN PAZ DE UNA VEZ? ÉL YA ESTÁ MUERTO, PARAD YA CON ESO, JODER, DEBÍ HABER SABIDO MANTENERLO A MI LADO, PERO NO FUI CAPAZ, Y ES LÓGICO QUE SE HARTARA, ¿NO TE HE DICHO QUE TODAVÍA ME DUELE? Joder, parad... Yo también tengo corazón, me lo machacáis con estos comentarios, ¿no te das cuenta?
Me toqué la cara. Me había dado una buena hostia, la verdad sea dicha... Pero me quería, y cómo me quería... Si pudiera volver al pasado, si no hubiera sido tan impulsivo, si las putas de sus amigas no se hubieran metido, si Ignazio no me hubiera convencido, seguiríamos juntos y felices... Ella no había tenido la culpa de nada... Estábamos en la misma situación: Los dos descargábamos nuestra ira con quien no debíamos... En vez de fijarnos en los verdaderos culpables:
Gianluca: Lo siento, otra vez, hoy yo también me estoy pasando... Pero, ¿sabes qué? De una cosa estoy seguro. Gianluca te quiere. Nunca podría dejar de hacerlo. Muerto o no, para él sigues siendo su fantasía.
Trató de sonreír, y vino a mis brazos:
TN: Gracias... Ojalá fuera así.
Gianluca: Lo es. Fíate de mí... Te haces querer.
Se separó rápidamente y me miró mientras se secaba las lágrimas:
TN: He tomado una decisión, Edoardo.
Gianluca: ¿Cuál?
TN: Yo... Yo debo volver a casa. Por Piero. Seré fuerte por él. Y no permitiré que Ignazio me hunda.
Me sentí bipolar en ese momento. Por un lado, era mejor que se fuera, así a Ignazio le sería más difícil descubrirnos. Pero por el otro... Ahora que mis sentimientos estaban más que claros y los suyos también, me daba pena no tenerla más tiempo para mí, pero... Era así como debía ser. Si la amas, déjala ir:
Gianluca: ¿Estás segura?
Asintió:
TN: Cien por cien segura. Estoy agusto aquí, pero ambos sabemos que debería estar en otro lado, ¿verdad?
Gianluca: Eh... Sí...
Sonrió:
TN: Haré la maleta.
Gianluca: Quiero llevarte yo.
TN: Oh, no te molestes... Estaré bien.
Gianluca: Te dije que no te dejaría ir sola, y no lo haré. Es inútil que trates de convencerme, te aseguro que no lo conseguirás.
Suspiró:
TN: Vale... Llévame tú.
Se dio la vuelta y entró en mi habitación. Deberías estar aquí conmigo... Nunca he dejado de quererte.

✴ VIVO PER LEI ✴ {Gianluca Ginoble & Tú} #Wattys2015Donde viven las historias. Descúbrelo ahora