Prism, el pincel de Sakura

Capítulo 2: "El color de la muerte" (2)

Por primera vez en mucho tiempo, me sentí con vida... Se que desde el momento en el que blandí esa especie de "espada" mi vida cambiaría... Pero no era consciente de lo que sucedería más adelante... De haberlo sabido, me hubiera dejado matar por aquellas bestias.

-Venga, venga... que esto no es un hostal. Ya estás atendida y descansada, vuelve a tu casa.

-¿Eeh?

-Vamos, vuelve a tu casa. ¿A qué saco la escoba?

-No no. Ya me marcho. Oiga, una pregunta: ¿Dónde esta el chico que estaba en aquella cama?

-Yo solo te he visto a ti y desearía no volver a verte más por aquí. ¿Pero te vas ya o qué?

La enfermera coge la escoba y saca a Sakura de la clínica.

-Y no vuelvas más por aquí.

-Vaya, podría habérmelo pedido amablemente... Parece que ya esta atardeciendo... ¡Tengo mucha hambre!

Sakura se va a su casa a comer.

-Sakura, ¿Qué haces ya en casa?

-La enfermera me ha sacado a patadas...

-No te lo tomes mal. Desde que murió su hijo no le gusta tener a nadie en la clínica. Pero hazme caso, se preocupa más por los niños de lo que tu te crees.

-Mama, ¿Me haces de comer?

-Claro hija.

Sakura empezó a pensar...

-Ya veo, cada uno tiene una "ley de vida". La enfermera cura a todos sus pacientes como si fueran sus propios hijos, aunque en el fondo sabe que no lo somos. Por eso nos trata así cuando nos ponemos bien... o al menos eso pienso.

-Toma Sakura, tu comida favorita: Chocolate caliente.

-Muchas gracias mama...

-¿Te pasa algo?

-Mama, ¿Cual es tu "ley de vida"?

-Pues, eres tu. siempre lo intento arriesgar todo para que estés lo mejor posible. Porque aún eres mi bebe.

-Mama, me vas a sonrojar

-Jajaja, venga anda que se te va a enfriar. Voy a comprar cosas para la cena. volveré algo tarde.

La madre de Sakura sale de la casa.

-Debería buscar a Eric y darle las gracias por todo...

Sakura también sale de la casa en busca de Eric. Pregunto por todos lados pero no daba con Eric. De lo cansada que estaba Sakura decidió ir al césped a tumbarse.

-Me encanta notar la hierba en las manos... Pero, no es lo mismo estando sola...

-Ya no lo estás.

Sakura mira a los lados y vio que Eric se tumbo junto a ella.

-Eric, ¿Qué haces aquí?

-¿No puedo estar junto mi admiradora secreta?

-¿Qué dices?

-Has estado preguntándole a todos por mí.

Sakura se sonrojó.

-No es lo que tu te crees. Es solo qu- que... te quería decir gracias.

-Bah, no pasa nada. Aunque soy yo el que debería dártelas.

Sakura sonrió y le dijo:

-No hay porque darlas.

-Deberíamos formar una pareja. ¿No crees?