Prism, el pincel de Sakura

Capítulo 12: "División de color" (3)

*Camino de Hana*

-¡Sakura...!

-Déjalo, no te oirá - dijo la voz de la persona que la sacó de la esfera blanca

-¡Suéltame! 

-Vale, como gustes. 

Le soltó la mano a Hana, pero estaban a una altura demasiado alta. Hana se precipitó al vacío.

-Esto no me detendrá, ¡Primavera!

Hana empezó a volar pero de la nada aparecieron pompas de todos los tamaños. No comprendía que ocurría. Hasta que vio un ave chocarse con una de estas pompas. La burbuja explotó impregnando las alas y las plumas de aquel animal aproximándolo al vacío.

-¡No puedo consentir eso! - Hana sopló y una semilla apareció de la nada y acto seguido se lo lanzó a aquella ave. De la semilla germinó un cúmulo de hojas de matorral que envolvió al animal y al chocar con el suelo las hojas se desbarataron por el suelo liberandolo - Qué bien que lo pude salvar...

-¿Te sientes bien por eso? - decía una voz procedente de la nada

-¡Sal a la luz! - exclamó Hana

-No te las des de lista... no deberías subestimar mi poder... una pompa no es tan frágil como crees...

-Eso ya lo veremos... ¡Sorivides! - Del viento Hana sacó su espada bañada con luz roja y amarilla. De repente, la agitó y el viento cortó algunas de estas pompas. Pero cada vez habían más. Llegó a un punto en el que Hana ocasionó una explosión en cadena. Las pompas fueron estallando una a una sin un respiro para Hana, que tenía que volar hasta el suelo. Pero su vestido de flores de cerezo se vio afectado por esto y no pudo continuar volando. Cuando creía que sería su fin. una pompa estaba en el suelo esperándola. Al chocar con esto, Hana cayó y rebotó.

-¿No creerías que terminaría tan rápido contigo no?

-¿Qué es lo que quieres de mi?

-Me he enterado de que posees la espada de los surcos, bañada en la luz amarilla y roja. De hecho, ¿Es esa que tienes en la mano ahora mismo no? - decía aquella persona mientras se acercaba a Hana

-No puedo permitir que te la lleves... 

Hana no podía moverse. la sustancia de la que fuese que estaban hechas aquellas pompas no se lo permitían.

-Si pudiera moverme... - rogaba Hana...

-Olvidalo, ni siquiera tu amigo ha podido librarse - una pompa apareció, era Eric, estaba atrapado de nuevo - Con esto, tenemos el recipiente y una de las armas sagradas... no sois nada sin esa "elegida" sois patéticos... Sois como jabón sin agua. viscosidad que no fluye.

-Quien te crees que eres para llamarme así... no me subestimes. ¡Eric aguanta, yo te salvaré!

De pronto, en el aire se podía notar una brisa algo espesa... olía a flores recién florecidas. Los insectos se dirigieron hacia Hana, una enorme multitud de ellos se empezaron a comer su traje.

-Esta brisa huele a... nectar. ¿Intentas que los insectos se coman la sustancia que hay en el traje?

-No me puedes subestimar. Me acabas de conocer. Mas vale maña que fuerza, ¿No? Por algo soy Hana, la divinidad de las flores

-Bueno, tienes razón, he cometido un error. Me presentaré... yo soy... "Eresis" - un burbuja explotó - Al parecer, Eresis tenía en secreto su físico porque en realidad es una niña de 10 años. Con las burbujas puede cambiar la apariencia de los objetos (y la suya misma) - Ahora, prepárate a morir. Encantada de conocerte Hana. Te hubiera dejado con vida pero... ya te dije mi nombre... Así que...