Las hermanas E «Hogwarts».

Capítulo 4.

Eleanor.

-Maldito Malfoy -gruñí, mientras caminaba a la salida de la sala común mi casa, Slytherin. Seguí maldiciendo al estúpido rubio. Había conocido a Draco Malfoy cuando me pusieron en Slytherin, también conocí a Vincent Crabbe y a Gregory Goyle, unos trogloditas, más tontos que el mismo Malfoy. También conocí más Slytherin, más arrogantes que nadie en el mundo. Pero no todo son unos discriminadores, conocí a una chica totalmente diferente, y se me hizo raro que fuera slytherin, su nombre es Adele Lexington, una chica rubia con ojos color miel, muy tierna y tímida, sus padres son aurores, y gracias a ella encontré mi libro de Historia de Hogwarts, cuando la muy tonta de Parkinson solo seguía hablando de lo estupendo que seria si Hogwarts no tuviera sangre sucias recorriendo el pasillo. Nos hicimos una clase rara de amigas.

Estaba caminando al Gran Comedor mientras me arreglaba más mi corbata. Ni siquiera pude arreglarme bien a causa de la pelea que tuve con Malfoy. ¡Cómo se atrevía el maldito a llamar a mi familia un desperdicio para el mundo mágico! ¡Cómo si sus padres fueran la perfección en persona!

Abrí las puertas del Gran Comedor, y miré hacia la mesa de los leones, donde estaba Emily y sus amigos, parecía que peleaba con Ron, mientras Hermione y Harry hablaban de no sé qué cosas.

Me senté en la mesa de Slytherin, y me serví un poco de avena y jugo de naranja, era alérgica a la calabaza. Tiempo después llegó Adele, la cuál me sonrió.

-¿Por qué no me has esperado?

-Tuve una pelea con el fastidioso de Malfoy -le di un sorbo a el jugo mientras Adele reía.

-¡Qué raro! ¿Ahora por qué fue? Digo, no llevan ni dos días de conocerse y se han peleado más de 20 veces -Adele se sirvió un poco de tocino, huevo y juego de calabaza, junté las cejas.

-Ha insultado a mi familia, el muy... Como si su familia fuese un pan de Merlín -inflé los mofletes y miré hacia la mesa de Gryffindor, Emily me veía preocupada, yo bajé la mirada un poco avergonzada por como la traté el día de la Selección.

-Deberías hablar con tu hermana -me dio un codazo, miré a la rubia, tal vez tenía razón.

Antes de que pudiera continuar, el profesor Snape, el encargado de la casa de Slytherin, paso dándonos los horarios de clases. A primera hora de hoy me tocaba Pociones con los Gryffindor.

-Habla con ella antes de llegar a las mazmorras -asentí y me dispuse a terminar mi avena.

Vi como Emily se levantaba junto a sus amigos. Me terminé la avena y el juego en tiempo récord.

-Te veo en las mazmorras -me despedí de Adele, mientras tomaba mis cosas y salía corriendo en dirección a Emily.

-¡Emily! ¡Emily espera! -la pelirroja se detuvo y los alcancé, los dos chicos, que no me conocían me miraron raro- Emi, quería... Disculparme por como te traté ayer, y sabes cuándo fuiste a la mesa y te ignoré, en serio, me siento muy apenada, no sé porque te traté así, eres mi hermana, y sabes que te quiero mucho -me miró sorprendida, era la primera vez que le decía que la quería.

-Eleanor... No sé qué decir.

-¿Me perdonas? -antes de decir algo más, me abrazó tan fuerte que me dejó sin aire- Hermanita, me dejas sin aire -Emily se rió y me soltó.

-¡Qué despistada soy! -enredó su brazo con el mío y sonrió- Te presento a Harry Potter y a Ronald Weasley -me dijo el segundo nombre algo asqueada o al menos eso me pareció-. Ella es mi hermanita Eleanor.

-Mucho gusto -Harry me saludó con una amplia pero tímida sonrisa al igual que yo. Suspiró aliviado, tal vez esperaba que me pusiera a saltar y cantar a su alrededor, como la mayoría de la gente hace.

-Hola... -el pelirrojo sonrió de lado.

-Chicos, vamos a clases no queremos que Snape nos baje puntos comenzado el año -habló Hermione, y todos coincidimos.

-No creo que le baje puntos a la chica Slytherin, Snape tiene una preferencia hacia ellos -murmuró Ron, mientras íbamos hacia allí.

-Me llamo Eleanor, no "La chica Slytherin" -corregí, mirándolo.

-Como sea.

Llegamos a las mazmorras y ya había varias personas. Emily y Hermione se sentaron en la parte donde había más Gryffindor. Yo me fui del otro lado esperando a Adele, la cuál llegó corriendo. Después de varios minutos todos estábamos allí. El profesor Snape empezó a dar un sermón, demasiado aburrido, casi me quedo dormida, si no fuera por Adele.

Cuando terminó la clase, ya no pude ver a Emily, porque me tocaban otras clases. Fuimos a comer al mediodía. Más tarde fueron mas clases aburridas, la que creo que fue la más divertida fue Defensa Contra las Artes Oscuras, porque el profesor Quirrell, que tartamudeaba demasiado, y me sacó más de una carcajada, si no, hasta Emily me vio raro porque me reía mucho.

Hoy sin duda el mejor de mi vida.

¡POR LAS BARBAS DE MERLÍN! ELEANOR A DEMOSTRADO QUE TIENE SENTIMIENTOS! ok no.

Muuuuchas gracias por leer, los amaría el doble si votan.

¡¡Estoy muy emocionada con esta novela, y si la leen los amo muchooooo!!

Me voy, cambio y fuera.

-Denisse.