Al ver a aquel demonio frente a ellos, despertó la curiosidad de los demás, por un lado Sebastian lo observaba curioso y a la vez con deseos de conocer a su nuevo compañero en dicha misión, Ciel solo había bajado su arma guardándola, pero desconfiando un poco de aquel ser ante ellos, ya que nadie en juicio vendría hasta ellos para ofrecer su ayuda, las palabras de Perla no ayudaban del todo a convencerlos, pero William solo lo vio fríamente, observándolo de arriba abajo, sabia que el tiempo continuaba su curso, que quizás Bruno estaba llevándoles bastante ventaja y siendo sinceros, para un shinigami esto es una falta a su linaje completamente imperdonable, ya que su mente debería de estar ocupada pensando en un plan para rescatar a Grell, el era su motivo principal de que este equipo se haya conformado, el se había convertido en un motivo mas no solamente para vivir, si no también para sentirse comprendido, querido, amado de tan solo pensarlo desvio la mirada hacia el suelo, sintiendo como su corazón se apretaba por dentro en su pecho,¿ Cuanto tiempo tenia de conocerlo? Toda una eternidad , por su amado seria capa< de cualquier cosa, aunque era comprensible que ahora desconfiara de aquel ser, sin detenerse a pensarlo mucho, saco de sus armas, una pistola plateada con negro, apuntándole directo a su frente, dejando a los presentes sorprendidos por su acción, Sonya hubiera hecho lo mismo, claro si su dueña se lo habría ordenado, Sebastian no se había extrañado por su reacción, el siempre solia ser un poco impulsivo cuando se trataba de proteger a Grell, en cambio Fausto no dijo adsolutamente nada, solo se dediacaba a observar las reacciones de este shinigami, sin sentirse amenazado por su arma.
-Escucha bien, si te atreves a traicionarnos, no lo dudadre y esta pistola hara su trabajo.
Sonriendo avanzo dos pasos para verlo a los ojos, cambiando su mirada violácea a una aazul, levantando su mano, colocando la palma sobre la parte superior del arma, bajándola un poco para después responder
-Lo tendre presente, guarda tus balas, porque si las desperdicias en mi, seria una lastima que no pudieras acabar con nuestri enemigo, llevando poccas reservas, veras que no me atreveré a traicionarlos, si me uni a ustedes es porque tenemos un objetivo en común, Bruno debe pagar por todas las acciones que ha hecho, no solamente a ti te ha lastimado, somos varios los que queremos venganza, confía en mi
-Tranquilo William, yo lo vigilare de cerca si eso te hace sentir mejor
Observo a Perla rápidamente por sus palabras, negando con la cabeza, la tomo de su hombro, para verla a los ojos
-No hara falta que hagas eso, con su palabra me bastara, además tengo un plan en mente, tu trabajo es otro y lo sabes, ahora debemos darnos prisa que el tiempo avanza y Grell nos esta esperando
-Te recuerdo que no vas solo, nosotros vamos contigo, Sebastian – En el acto Ciel había hablo parándose enfrente de Will , lo cual por supuesto atrajo la presencia de nuestro demonio de mayordomo , el cual se encontraba detrás de su amo, colocando sus manos en sus hombros, sonriendo a su conde
-Debe calmarse Boccha, este hombre nos será útil, puedo sentir que es sincero , aunque me gustaría conocer sus habilidades- Observandolo de reojo, con su mirada carmesí brillando ligeramente para sentir la energía de aquel ser, siendo su nuevo aliado en este batalla que cada vez se encontraba mas cerca, provocando en sus palabras una ligera risa en el rubio, quien se tomo la molestia de avanzar hacia adelante, entrando primero al castillo, conduciéndolos a la primera sala, una escalera frente a ellos, a los lados dos salas mas, observando el panorama dentro del castillo Versalles, el cual comenzaba a sentirse el ambiente bastante pesado y lleno de maldad, alertando a los demás, quienes avanzaron dentro, escuchando como las puertas se cerraban tras de ellos.
-No se separen, tenemos compañía- Lo menciono Fausto, sintiendo la presencia de tres seres acompañándolos, esperando el momento oportuno para poder atacarlos
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Secreto CarmesiGrell x William Kuroshitsuji
FanfictionPrologo Grell Sutclift mejor conocido en el Despacho General como el responsable de los dolores de cabeza y por supuesto horas extras de trabajo que le da a su jefe, el mas organizado de todos, William T. Spears, pero un dia esta rutina cambia de go...