Capítulo 28. Demasiado tarde

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El teléfono yacía apagado sobre el buró, me quede de pie examinándolo pensado si sería una buena idea tomarlo y llamarlo.

Últimamente mis sentimientos me traicionaban, mi ánimo decayó considerablemente, la razón una muy obvia. Él.

Seguí viendo las entrevistas que le hicieron aquella noche donde hizo su despedida de soltero y más me envenenaba con la idea de que él estuviese con ese imbécil de Kim Kibum, su amiguito según él. Yo solo... yo solo quería verlo de nuevo, lo extrañaba mucho, cada día mis pensamientos se veían inundados por su presencia e imagen. Su olor, su forma de hablar, su sonrisa. Mi Hee Chul.

Ladee la boca un poco, no, él no era mi Hee Chul, nunca lo fue.

...

Mire el hermoso espectáculo que ofrecía esa noche en Beijing desde la amplia ventana de mi oficina, el reloj apuntaba las 12 de la noche y aun no iba a casa ¿La razón? Simple no quería comenzar a pensar y que la incertidumbre llenara mi cabeza, bostece llevándome las manos a la cara, no había dormido en días y ya me estaban cobrando la factura.

Tome mi saco y celular, iría a casa no había otra opción por la vibración insistente pude notar que Zhou Mi no dejaba de llamarme, la preocupación era mucha supongo.

–Me quede trabajando –dije casi gruñendo cuando le conteste. Colgué mirando mi celular... ¿A caso sería bueno...? ¡No! Deseche la idea de inmediato, era estúpido eso era estúpido.

–Señor buenas noches –Jin Liang abrió la puerta del auto dejándome entrar.

–A casa –me recosté en el sillón mirando el paisaje nocturno.

...

–Me tenías preocupado ¡No llamaste en todo el día! –Y ahí tenia a mi primo cruzado de brazos mirándome ceñudo, vestía su pijama al parecer se iba a dormir pero me espero hasta que llegara.

–Siento interrumpir tu sueño de belleza pero no tenías por qué esperarme –me pase de largo lleno directo a mi habitación.

–Estas insoportable –alcance a escuchar que me grito, lo ignore siguiendo mi camino.

Varias veces me gire en la cama pero no podía conciliar el sueño, Hee Chul rondaba mi mente mi corazón ¡Mi vida! Lo extrañaba, lo quería, quizás hasta lo... me dormí.

...

Un día ajetreado en la oficina, había nuevas vacantes para puestos importantes, los ascensos que daríamos estaban creando un caos en los empleados aunando la nueva firma que teníamos con una multinacional australiana.

–Bien necesito que los contratos estén listos y revisados, necesitamos esta firma es una de las más importantes –Woo Min asintió apuntando todo en su libreta.

–Bien, señor con respecto a la firma hotelera en Grecia se llevara una junta de accionistas en dos meses debe asistir por lo que ya confirme su asistencia –eso era algo bueno.

–Entendido, solo necesito... ¿Dónde está Mí? –pregunte sin quitar la vista del papeleo.

–El señor Zhou Mi partió el día de hoy a Seúl para la boda del Sr. Max –mi corazón se detuvo ¿Qué? ¿Qué mierda había dicho?

–La boda será en dos semanas –mi voz sonó asustada, desesperada, con terror.

–Me permito informarle que la boda fue adelantada, la nueva fecha se confirmó hace una semana y se le notificó al señor Zhou Mí –mi cabeza comenzó a doler.

–Déjame solo –taje molesto, mi secretario se fue rápidamente.

Me levante pesadamente del asiento ¿Eso era cierto? ¡¿COMO CARAJOS ERA POSIBLE QUE HEE CHUL SE CASARA TAN PRONTO?! ¿QUE DEMONIOS HACIA EN CHINA CUANDO ESTABA POR PERDER AL AMOR DE MI VIDA? Tome mi saco y corrí por el pasillo como desquiciado.

–WOO MIN –grite sin dejar de correr, tome el ascensor viendo como mi asistente me alcanzaba en el mismo.

– ¿SEÑOR QUE PASA? –pregunto asustado.

–Necesito irme a Seúl ¡Necesito mi Jet ahora! –grite desesperado.

–Pero su Jet está en Seúl, podría esperar pero lo mandaron a checar por unas fallas menores, le podría conseguir un boleto para un... –

– ¡HAZLO! ¡AHORA! –grite fuera de mis casillas, el asintió asustado sacando su Tablet.

–Lo siento señor no hay boleto hasta dentro de tres horas –

–PUES EN CLASE TURISTA JODER MANDAME A SEUL AHORA MISMO –gruñí exasperado.

–Se... se... ñor no hay tampoco en esa clase, solo hay uno que sale en 20 minutos pero es de paso si no llega a tiempo lo perderá no hay garantía alguna –

–COMPRALO –y salimos del elevador, corrí hacia el auto.

–Al aeropuerto –cuando Woo Min abordo el carro arranco.

– ¿A qué horas empieza la boda? –

–A las 5 en punto es la ceremonia a las 7 la recepción –

–Dame los datos, mándalos a mi teléfono ¡Date prisa! –le exigí al conductor que no pudo evitar dar un salto leve.

El maldito aeropuerto estaba atascado de turistas ¡Maldición! Aunque no trajinera equipaje fue una odisea estar ahí, después del digno cateo al que fui sometido a mi parecer innecesario ¿Qué? Viajando en Jet me evito tantos problemas, un hombre millonario como yo no debiera estar pasando por esto.

Después del valioso tiempo que perdí logre subir al avión ¿Esa era la clase turista? ¿Cómo carajos podía viajar la gente de esa manera? Todo estaba innecesariamente junto y apretado.

Me deje caer en el asiento mirando la ventana, una mujer tomo lugar a mi lado y lo peor ¡Traía un bebe en brazos! Todo el jodido viaje se la paso llorando, comiendo y lo peor me golpeo con el biberón en el brazo.

Baje después de unas horas, me llevaba todo lo que existen en el mundo, corrí prácticamente por todo el lugar buscando la salida.

Un taxi ¡necesitaba un jodido taxi ahora! Con rapidez detuve un transporte.

–Lléveme... lléveme –Me quede callado no recordaba la dirección, después de llamar a Min para pedir indicaciones –Al hotel Zeus por favor –al parecer la boda se llevaría a cabo en un salón adyacente del hotel y en un salón privado seria la recepción.

Mire mi reloj histérico eran las 4:50 ¡Puto tráfico de Corea! Las calles estaban atestadas un accidente acababa de ocurrir por lo que el taxi se detuvo ¡quería gritar, llorar y correr! –Dígame donde queda más o menos el hotel –rogué.

Después de instrucciones precisas salí del auto corriendo como desquiciado, atropelle gente, muchas personas me miraba como si fuera un loco, seguí corriendo sin detenerme, no iba a llegar a tiempo.

Pude divisar el hotel, jadeante me detuve mirando la fachada del hotel, con parsimonia me levante tratando de emprender la carrera, entre mirando el living y me dirigí al living –Discul... dis... ¿la... la boda de... Max...? –pregunte jadeante la recepcionista me miro sorprendida.

–Oh la boda término –me sonrió con dulzura. ¿QUE? ¿QUE CARAJOS HABIA DICHO? Me di la vuelta sin decir nada.

–Señor... señor –la chica me detenía pero no hice caso, a paso lento salí del hotel con la cabeza gacha.

No había llegado a tiempo, Hee Chul se había casado.

Lo había perdido para siempre. 


...

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Bajo los pétalos de cerezo (Hanchul)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora