Mine. [BORRADOR]

25

Capítulo 25

-¿Estas mejor?.-Pregunta Jared sentándose a mi lado. Yo me apoyo en su hombro y suspiro.
-No importa, tu tranquilo.-Susurro y el toma mi mano.
-No puedo estar tranquilo sabiendo que tu la estas pasando mal, Meg. Eres de las personas mas importantes para mi.-Me dice y yo sonrió.-Al menos sonreíste. Me encanta tu sonrisa, podría iluminar una noche oscura.
-Que poeta estas hoy.-Digo y el ríe.
-Solo estoy diciendo lo que pienso, Meg. ¿Que puedo hacer para hacerte sentir bien?.-Pregunta el besando mi mano.
-besarme, besame Jared.-Le pido y el toma mi rostro entre sus manos y me mira antes de juntar nuestros labios.

Miro el techo de la habitación mientras las lágrimas caen por mis mejillas.

-Vamos Meg , entra ahí.-Dijo ella empujandome dentro de la escuela.
-No quero. Quero papa y mama.
-Vamos Meggy, no lo hagas difícil mi niña, entra.-Dice abrazándome.

Siento un pequeño movimiento en mi estómago y llevó mi mano hacia aquel lugar. Acarició el lugar donde mi hija se encuentra esperando a ser el momento de salir.

-¿Megan?.-Dice la voz de la madre de mi novio. Me siento en la cama y la miro. Ella jadea mientras me ve y se acerca rápidamente a mi. Se sienta a mi lado y toma mi mano.-¿Estas bien?
-Si.-Susurro con la voz un poco ahogada.
-¿El bebe esta bien?.-Pregunta ella y yo asiento.-¿Porque lloras?.-Me pregunta.
-No estoy llorando.-Miento y ella niega con su cabeza.
-Puedes contar conmigo Meg. ¿Es Jared? ¿El te trato mal?.-Pregunta y yo niego rápidamente.
-No, el es un ángel. Es tan bueno...-Susurro y sollozo.
-¿Entonces que te tiene tan mal, cariño?
-Lo típico del embarazo.-Murmuro y me pongo de pie. Acomodo mi ropa y mi cabello.-¿Quiere café?
-Jared me dijo que has estado mal y me ha pedido que venga a estar aquí contigo.
-No hacia falta, estoy bien. Yo solo... Yo solo estoy sensible.
-Espero y sea eso. Todo el estrés le hace mal al bebe.

Cuando mi cabello se haya caído y comience a perder mi memoria, la gente ya no recuerde mi nombre, cuando mis manos no tocan las cuerdas de la misma manera.
Sé que todavía me seguirás amando de la misma manera porque la dulzura de tu alma nunca podrá envejecer, será siempre natural

Siento unos brazos en mi cintura y un beso en mi hombro derecho así que dejo de moverme al ritmo de la musica y dejo el bol donde estoy batiendo la crema en la mesada. Me doy media vuelta y miro a mi hermoso Jared

-Hola.-Susurra y yo me abrazo a su cuerpo.
-Te extrañe.-Susurro y el ríe un poco.
-No nos vemos desde ayer por la mañana Meg.
-Que tu no me extrañes a mi no significa que yo no te extrañe a ti.-Digo alejandome de el.
-Meg, no fue mucho tiempo estas exagerando.
-Te extrañe porque te amo Jared. Pero tu no me amas, tu no me extrañas...tu no...tu no sientes lo que yo siento.
-Megan, ya hemos hablado de eso.
-¿A que has venido Jared?.-Pregunto dándome vuelta batiendo la crema.
-Pensé que querías que pasáramos tiempo juntos.
-Pensaste que pensé, tu no querías. Jared, necesitó que te vayas ahora .
-Megan, no. Otra vez con la misma mierda de siempre no. Deja de ser una niña. Tienes 19 años y estamos por tener una hija. Hay que madurar de una vez.
-¿Soy inmadura por enamorarme?
-Eres inmadura Megan. No por enamorarte. Si no por como te comportas.
-Solo quiero que me quieras como yo lo hago.-Le grito al momento que rompo en llanto. El se queda callado y se dedica a mirarme.-Solo quiero que alguien me quiera.
-Megan, le harás mas a la bebe.-Dice el preocupado.- Debes tranquilizarte.
-Quiero que alguien me quiera.-Susurro y soy rodeada por sus brazos mientras me lleva hacia el sofá.
-Mucha gente te quiere, Megan
-No las personas que yo quiero que me quieran. Tu no me quieres, mi madre no me quiere, mi padre no llama, mi mejor amiga no me da señales de vida.
-¿Sabes de alguien que te va a amar toda su vida? Yo si. Esa persona, esta dentro tuyo por ahora. Esa persona es nuestra hija Meg.
-Yo quiero que me quieras.
-Yo quiero que estés bien, Meg, me estas asustando. Estas enloqueciendo.
-¿Es estúpido, no?.-Susurro con lágrimas en mis ojos.
-¿Que cosa?
-Tratar que me quieras, por mas que trate... Tu no vas a quererme.
-Es estúpido lo que estas diciendo. Un te quiero o un te amo no se dicen, se demuestran Megan.

Suspiro mientras siento a mi hija patear dentro de mi vientre. Pongo la mano de Jared y el inmediatamente sonríe. Se acerca a mi estómago y lo besa sobre mi ropa.

-Eres lo mas lindo de mi vida.-Susurra apenas audible.
-A ella le dices que la amas.-Susurro y Jared se aleja y me mira sorprendido.
-Megan, estas siendo estúpida. Para ya, le digo lo que le digo a quien quiera. No me presiones porque hago las cosas mal bajo presión
-Lo siento.-Susurro y miro como el se pone de pie y se dirige al baño. Tomo mi celular y marco el número de Aaron, un viejo amigo.

Escuchó el pitido del teléfono unas tres veces antes que el o alguien atienda.

-H-ola.-Dice el y se escucha agitado.
-¿Sabes quien soy?.-Pregunto esperanzada.
-Si, eres Megan. ¿Paso algo?.-Pregunta el.
-Solo quería hablar contigo.
-Estoy algo ocupado ahora, te llamo luego.-Dice antes de colgar.

Suspiro y dejó el celular sobre la mesa. Enciendo la televisión y pongo alguna pelicula mientras me acomodo en el sofá y comienzo a mirarla.

Una hora después, me pongo de pie y camino a mi habitación. Veo a Jared sentado en el borde de su lado de la cama. Esta sin camiseta y su piel se ve húmeda.

Me acercó a el y me siento a su lado. Apoyo mi cabeza en su hombro y suspiro.

-Siento ser tan idiota Jared, yo se que no puedo obligarte a sentir algo... Lo siento, no se que me sucede...
-Quiero que veas un psicólogo, Megan.
-No lo haré, te prometo que entiendo todo
-Necesitó que hagas eso, por ti, por la bebe y por nuestra relación.
-Prometo que no volveré a comportarme así, Jared. Perdoname.
-Dices que no lo harás mas pero lo vuelves a hacer.
-Lo siento.-Susurro. El toma mi mano y la dirige a sus labios. Deposita un beso en ella y luego me tira un poco para que me siente en su regazo.
-No hay nada que perdonar Megan. Solo no quiero que te pongas así porque temo que algo te suceda a ti o a la bebe.
-Tratare que no vuelva a pasar. Te amo.-Susurro y el besa mi hombro mientras me abraza.
-Vamos a salir adelante, lo prometo.