UNA SEMANA DESPUES:
Elsa ya había comenzado su periodo de vacaciones, que ella decidió tomarse para ayudar a Anna a cuidar a Kate, aunque sinceramente no parecía que estuviera de vacaciones, ya que tenía unas ojeras muy marcadas, por no dormir bien durante la noche a causa del llanto de Kate. Las tres dormían en el cuarto de Elsa; Anna y Elsa en la misma cama como ya estaban acostumbradas, y Kate en la cuna del lado de la cama de Anna. Pero por alguna razón Anna y Elsa se dieron cuenta que Kate prefería dormir en la cama con ellas, porque a la hora de dormir, cuando colocaban a Kate en la cuna, esta comenzaba a llorar y Anna para calmarla, la ponía en su cama con ella y Elsa y al instante cesaba su llanto. Así que a partir de ese momento decidieron que lo mejor sería, si por ahora, Kate durmiera con ellas, ya que de esa manera no lloraría tanto y ellas podrían dormir un poco mejor, pero no querían que fuera permanente ya que Anna no la quería malcriar, como ella ya estaba malacostumbrada a dormir con Elsa.
Anna estaba durmiendo la siesta con Kate a su lado y Elsa viéndolas enternecida desde la puerta, decidió unírseles. Ahora estaban Anna y Elsa en cada punta y Kate en el medio.
Elsa se puso en una posición de costado, usando su brazo como soporte de su cabeza, para poder contemplar la escena de madre e hija durmiendo pacíficamente. Kate fue la primera en sentir la presencia de Elsa, despertando con una sonrisa muy tierna y simpática en su cara. "esa hermosa sonrisa es igual a la de Anna cuando era pequeña, definitivamente va a tener la cálida sonrisa de Anna" pensó Elsa, acercando mas a la bebe hacia ella para observarla más detalladamente.
-como durmió mi sobrina favorita?, por esa cara de felicidad me parece que dormiste muy bien, no es verdad Kate?-dijo Elsa besando la cabeza de Kate y haciéndole unas delicadas cosquillas, para seguir manteniendo la sonrisa en la cara de la bebe. Elsa amaba ver esa sonrisa, le hacía sentir un cosquilleo de felicidad en su interior, y también amaba besarla, y en el acto, sentir esa aroma dulce y característico de los bebes. La hacía sentir un calor especial en su pecho. Elsa era inmensamente feliz en estos momentos, al ayudar a su hermana a cuidar a su sobrina. Elsa podía ver la profunda felicidad en los ojos de su hermana, cada vez que esta veía a su hija, demostrando, lo embobada y enamorada que estaba con su hija y eso a Elsa le causaba mucha ternura. Elsa también estaba embobada con Kate; le cumplía todos los pequeños caprichos a su sobrina en todo momento, cegada por el amor que le tenía, pero a veces Elsa se ponía a pensar en que le gustaría tener algún día su propia familia, y experimentar algún día ese único vinculo de madre e hija que su hermana estaba viviendo.
Anna había despertado ya hace un rato, con mucho cuidado de que Elsa no lo notara, ya que le gustaba observar a Elsa como jugaba con Kate. Elsa era tan tierna "Elsa es tan dulce, seguramente cuando tenga a mis futuros sobrinos va a ser una madre maravillosa" pensó Anna.
-quien es la bebita más linda, he? Quién es? Pues eres tu Kate-decía Elsa con vos juguetona, mientras le hacía gestos y cosquillas a Kate para entretenerla, aun sin darse cuenta que Anna la observaba enternecida.
-sabias Kate, que tienes a la mama mas buena y cariñosa del mundo? Tu mama es la persona más dulce que conozco, y ahora tu eres la persona mas importante para ella en este mundo, por eso, te voy a pedir por favor, que siempre la cuides mucho, ya que es muy valiosa, seguramente la vas a amar tanto como yo lo hago, ella es tan alegre, que es capaz de con su sola presencia, cambiar el día de una persona, de malo a maravilloso, tan solo mostrando esa bella sonrisa llena de vida que tiene y creo que tu sacaste la misma sonrisa, no es así princesa?-dijo Elsa con tono gracioso para sacarle otra sonrisa a la niña.
Anna estaba conmovida con las palabras de su hermana. Tanto que no pudo evitarlo más y se paró de inmediato de la cama, yendo hasta su hermana a abrasarla. Elsa quedo en estado de shock en el movimiento tan repentino de su hermana, pero al instante respondió el abrazo.
