capitulo 23

293 8 0
                                        

Momentos después, Elsa ya había llegado a su casa y prosiguió a conseguir algo de ropa, para llevarle a su hermana, pero una llamada telefónica, la distrajo de su tarea.

-señorita Elsa Arendell?-pregunto una vos masculina.

-sí, con quien tengo el gusto?- pregunto Elsa, al no reconocer la voz.

-soy el jefe de policía, tengo noticias sobre el paradero de Hans-

-qué?, donde esta, donde tiene a Kate?-preguntó Elsa ansiosa y preocupada.

-recientemente, nos llamo un funcionario, de un hotel, contándonos de sus sospechas, al ver a un hombre solo, con una niña. Al parecer comenzó a sospechar de él, en cuanto noto que la niña lo rechazaba, como si no lo conociera, entonces decidió llamar a la policía por si acaso- comunico el policía.

-si no es mucha molestia, le quería pedir por favor, si nos podría acompañar a confirmar la identidad de este hombre, ya que usted lo conoce mejor, y también conoce a la niña-dijo el policía.

-sí, sí a donde tengo que ir!?-dijo Elsa alterada.

-debe ir al hotel "santa barbará". Nosotros la estaremos esperando en la entrada, trataremos de hacer todo lo más discreto posible, para no alertar al sospechoso-finalizo el policía.

-está bien, estoy saliendo para ahí-dijo Elsa finalmente cortando el teléfono y apurándose a salir con el auto hasta el hotel. Todo paso tan rápido, que a Elsa no le dio tiempo de avisar nada a nadie, es que en realidad no quería ilusionar a Anna, si es que el sospechoso resultaba no ser Hans.

Una vez que Elsa llego al hotel indicado por los policías, aparco su coche en el estacionamiento del mismo, y se dirigió a la entrada, para su encuentro con los policías.

-señorita Arendell?-pregunto el jefe de policía.

-sí, soy yo-

-ha, mucho gusto, mi nombre es Kai, y soy el jefe de policía-dijo el policía presentándose.

-mucho gusto. Que es lo que tengo que hacer?-pregunto Elsa.

-en este momento, nos dirigiremos a la habitación, en la que nos indicaron se encuentra el sospechoso; tocaremos la puerta con la escusa de que somos de limpieza, y luego cuando habrá, usted nos dirá si la niña con la que está el sospechoso, es su sobrina, y si usted lo confirma, lo arrestaremos en ese instante-

-de acuerdo me parece bien- dijo Elsa, asimilando el plan de los policías.

El grupo de policías más Elsa, ingresaron al hotel, pidiendo indicaciones de la habitación del sospechoso. Cuando todos se encontraban en frente a la puerta, el jefe de policía toco...

-señor, la limpieza, podría abrir por favor...- dijo el jefe de policía, pero nadie respondió. Este siguió insistiendo un pardee veces más, pero nada. Ya que nadie abría, decidió tirar la puerta abajo, encontrándose con que la habitación estaba vacía, no había rastros de Hans, ni de Kate, pero Elsa en cuanto vio una pequeña remera que pertenecía a Kate, supo que el que había estado en esta habitación era Hans.

Los policías decidieron bajar a recepción para interrogar donde podría haber ido el sospechoso, pero Elsa tuvo una mejor idea; no conocía mucho a Hans, pero se imaginaba, que con una mete tan retorcida y calculadora como la de él, lo único que querría, seria no levantar sospechas, y la única manera de eso seria, evidente mente, evitar salir por la entrada principal. La única otra salida que se conocía, eran las escaleras de emergencia que quedaban por el lado de afuera de edifico, así que, sin pensarlo ni un momento más, y sin avisarle a los policías, Elsa decidió subir por su cuenta hasta la azotea, que era el lugar más cercano desde la habitación, para acceder a las escaleras.

Elsa llevaba un pequeño cuchillo por si acaso, ya sabía de lo que Hans era capaz, así que decidió no ir desarmada esta vez. Prosiguió a caminar por las escaleras hacia arriba, lo mas silenciosamente posible. Solo estaba a un piso de distancia de la azotea. Cuando abrió la puerta, se topo con la imagen de Hans, de espalda, quien sostenía a Kate en sus brazos y quien ya se había percatado de la presencia de su tía. Elsa le hizo una señal a Kate, de que no alertara a Hans de su presencia, colocando un dedo en su boca y pidiéndole también que cerrara los ojos, ya que no quería que la niña viera lo que estaba a punto de hacer.

Con silencio, Elsa cegada por un odio irracional, se acerco a Hans para apuñalarlo por la espalda, clavándole el cuchillo en el omoplato derecho. Hans al sentir la punzada en su espalda, se dio vuelta de inmediato, para encontrarse con Elsa.

-maldita, quien te crees que eres... para apuñalarme por la espalda, eres una... miserable...-

Dijo Hans comenzado a caer al suelo de apoco, recostado contra un pequeño muro, al sentirse mareado por la pérdida de sangre.

Kate al instante, se libero del agarre de Hans y fue corriendo con lagrimas en los ojos hasta su tía.

-tía Elsa, tía Elsa, tenía mucho miedo, quiero ir a casa, quiero ir con mama, por favor no me dejen nunca!- decía Kate, con lagrimas que caían como cascadas de sus hermosos ojos.

-tranquila hermosa, todo está bien ahora, yo estoy aquí, te tengo, te tengo- decía Elsa abrazando a Kate acariciando su cabello para tranquilizarla y dándole la espalda a Hans. Elsa no quería que Kate viera al supuesto cadáver, entonces se puso de espalda a él, para tapar la visión del mismo a Kate.

-ahora vamos para casa de acuerdo, tu mami y Alice te extrañaron mucho, y quieren llenarte de besos y abrazos, y yo también te extrañe mucho corazón- dijo Elsa ahora mirando de frente a Kate, agarrándola por su pequeños hombros. Estaba tan feliz y aliviada de tener a Kate en sus brazos que no pudo evitar comenzar a llorar al igual que la pequeña.

Elsa observaba como la expresión de Kate comenzaba a cambiar de tranquilizada a asustada de nuevo y Elsa intrigada y con terror, se dio vuelta solo para encontrarse con que Hans sostenía un arma en contra de ellas. Elsa inmediatamente puso a Kate detrás de ella para que nada le pasara.

La mano de Hans que sostenía el arma temblaba incontrolable mente, Hans estaba perdiendo el conocimiento de a poco, por la pérdida de sangre, y por esa razón le era difícil sostener el arma correctamente.

-maldita perra, como te atreves a herirme-decía Hans comenzando a ver de forma borrosa, la escena que tenía en frente.

-tu mal nacido, como te atreves a meterte con mi familia, nunca te voy a perdonar lo que le hiciste a Anna, ni lo que le hiciste pasar a Kate, eres una basura, tu no mereces vivir- decía Elsa con pura rabia y a la vez con temor de que en cualquier momento se dispararse el arma.

Elsa sentía que Kate temblaba incontrolable mente del miedo, solo quería sacarla lo más rápido posible de esa situación.

-me da igual si me perdonas o no, ustedes destruyeron mi vida. Sé que voy a volver a la cárcel, estoy herido y la policía está muy cerca, sería imposible escapar, pero al menos... si debo volver a la cárcel, lo haré con la ultima satisfacción de haberle robado a Anna a su querida hermana, para siempre!- dijo Hans con una sonrisa maliciosa.

Banggg ...

quiero protegerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora