Un ruido muy fuerte se escucho y Elsa, al instante cayó de rodillas por el impacto.
En ese preciso momento llego la policía, y al ver la situación deciden disparar a matar contra Hans.
Hans al instante cae al suelo sin vida, con al menos 5 balazos en el cuerpo y uno en la cabeza, ahora sí, definitivamente, no había posibilidades de que alguien pudiera sobrevivir a eso.
-tía Elsa, que tienes? estas bien?, porque estas sangrado, no te mueras por favor, te amo mucho, no me dejes solita- gritaba Kate asustada, al ver una mancha de sangre al costado de la remera de su tía.
-Kate, mi amor, no te preocupes, estoy bien no me paso nada-decía Elsa tranquilizando a su sobrina. Por fortuna la bala, paso limpia de lado a lado, solo desgarrando un parte pequeña del musculo en su lado izquierdo. Elsa en estos momentos agradecía que Hans tuviera tan mala puntería.
-señorita se encuentra bien? Déjeme revisar la herida-pidió permiso el jefe de policía.
-por fortuna no es nada serio, la bala salió limpia, pero de todos modos, hay que desinfectar, no se preocupe, tengo un kit de emergencia en la patrulla, lo haré en un segundo y podrá irse-dijo el policía guiándolas hasta la patrulla.
Elsa y Kate, ya estaban en el auto, preparadas para dirigirse al hospital, donde estaba Anna. Debía de estar muy preocupada ya que Elsa nunca más llamo o apareció.
-tía Elsa, estás segura que no te duele?- pregunto Kate aun preocupada.
-si hermosa, no te preocupes, ya te dije que no fue nada, enserio- contesto Elsa con una sonrisa, por la preocupación excesiva de su adorada sobrina.
-Kate, necesitó que me cuentes, todo lo que paso con Hans, yo se que debes está asustada, y que lo que menos quieres es recordar, pero por favor, necesitó saber que no ha hecho nada para lastimarte- dijo Elsa con tono serio.
-tía Elsa, no te preocupes, después del golpe que me dio cuando estaba con mama, el no me ha vuelto a tocar, solo me gritaba de vez en cuando, cuando no lo quería obedecer, pero nada más, enserio- dijo Kate tranquilizando a su tía.
-está bien, te creo, si tú dices que nada a pasado y que estas bien, yo confió en ti, yo se que eres una buena niña y que nunca mentirías. Ahora vamos a darle una sorpresa a tu mami, se va a morir de la emoción cuando te vea, y Alice se muere por jugar con tigo, no ha parado de llorar por tu ausencia- dijo Elsa cambiando de tema, para distraer a su sobrina.
-Tía Elsa, ese hombre me dijo que él era mi padre, es cierto?-pregunto Kate, desconcertando totalmente a su tía. Elsa no sabía que responder, Anna le había dicho toda la vida a su hija, que su madre y padre era ella misma, y Elsa no era quien para contarle la verdad a la niña.
-Kate, yo... yo pienso que es mejor que eso se lo preguntes a tu madre, lo único que puedo decirte es que todo lo que tu madre hizo, hace y hará por el resto de su vida, es por tu felicidad-dijo Elsa tratando de conformar a Kate, con esa respuesta. Eso era todo lo que Elsa podía decir, no tenía derecho a meterse más en ese asunto.
-está bien tía, no te preocupes yo entiendo. Cuanto falta para llegar al hospital, ya quiero ver a mami y a Alice- dijo Kate ahora emocionada. Elsa se tranquilizo al ver que la niña no seguiría interrogándola a cerca de ese tema. Si no fuera porque Kate realmente era pequeña, Elsa diría, que comprendía perfectamente toda la situación y por eso había desistido en seguir preguntando, aunque en realidad no dudaba que así fuera, Kate era una niña muy inteligente, nada se le escapaba.
-Mira!, ya llegamos, voy a aparcar el auto-
Al estacionar, Elsa apago el auto dispuesta a bajarse, pero la dulce voz de su sobrina la detuvo.