Camp Goys [1] EDITANDO

19.

Después de la guerra de agua que armamos con Jesse se largó a llover a cantaros haciendo que Grace y Harry nos mandaran a dormir, dando por finalizada la fiesta, es por eso que estamos en la carpa, aburridos.

—Todo lo que sucedió fue tu culpa—acusé a Jesse mientras me seco.

—La que empezó fuiste tú. No me culpes a mí, además no es mi culpa que lloviera, no manejo el clima todavía—rodeé los ojos y decidí callarme porque pueda que tenga un poco de razón.

Si sabes admitir cuando no tienes la razón quien lo diría

Tú siempre tan simpática quien lo diría, eso por si no lo notaste fue sarcasmo.

Lo note, gracias.

—Ninguno tiene la culpa—dijo Lester calmando un poco el panorama—Por cierto, muy buena la guerra de agua, jamás se me hubiese ocurrido algo así.

—Fue muy divertido, lástima que algunos tiraban raras mezclas de bebidas en vez de agua—se quejó Ciara oliendo su cabello—Huelo a tequila, mi hermoso pelo esta arruinado. Ni con miles de lavados podré quitarlo.

—Todos quedamos hechos un desastre—comentó Fiona mirando su ropa todavía algo húmeda—menos Brent y Bailey que se salvaron de la guerra, tuvieron suerte en no terminar como nosotros.

—Cierto... ¿En dónde estaban?—pregunto Corey con su típica sonrisa pícara—queremos los detalles sucios.

Brent le pegó un manotazo en la cabeza.

–Cállate, estábamos hablando... solo eso.

—¿Tiene algo de malo hablar con un amigo?—preguntó Bailey acostándose en su saco de dormir.

—No, por supuesto que no tiene nada de malo—concordó Fiona—Chicos,hagamos algo, no tengo ganas de dormir aún.

—Una orgía—propuso Lester a lo que nos negamos, obviamente.

—Que aburridos resultaron ser—Siguió hablando—Un juego que implique, no se, ¿besos?

—Estas hablando de jugar a la botella ¿no?—preguntó Marleen—por qué si es así, acepto.

—Yo también—respondieron todos al unísono.

—No cuenten conmigo—dije arropándome en mi bolsa.

—Lavina, no seas agua fiestas. Juega con nosotros, por favor—suplicó Ciara.

—No soy aguafiestas, es un juego tonto. Eso lo jugábamos cuando teníamos doce años—cerré mis ojos.

—Agua fiestas—canturreó Jesse. No me moleste en hacer ningún comentario, es mejor ignorarlo—A todo esto ¿dónde hay una botella?

—No hay, las dejamos todas afuera y no creo que ninguno quiera salir, todavía se oye que caen gotas y los guías si nos ven se enfadarán aún más—respondió Corey—¿Cómo jugaremos sin una botella? Sin la botella no podemos, va en contra de la ley del juego.

—¿Con un zapato?—preguntó Brent enseñando uno.

—Quieres que juguemos con un zapato?—se rió por lo bajo Bailey.

—Es lo único que tenemos por el momento—se encogió de hombros.

—Eso es una estupidez—acote.

—Cállate, tú no juegas—me acusó Colt, le saque mi dedo del medio y me volví a acostar—Entonces jugaremos con un zapato, es fácil de girar.

—Todos colóquense en un círculo—propuso Fiona.

—Última oportunidad, Lavina—dijo Marleen—¿Juegas?