Camp Goys [1] EDITANDO

29.

LAVINA

Pasó media hora desde que Marleen pidió hablar con Jesse a solas y una parte de mi quiere saber el motivo de la tardanza.

No lo malinterpreten, no son celos o cualquier parecido, solo estoy preocupada por mis amigos.

Durante la cena me llamó la atención la actitud de Marleen, ella se mantuvo callada y en algunas ovaciones pude atraparla observando a Jesse.

—Opto que Lavina se corte el cabello como dora la exploradora y también debe teñirse de amarillo chillón ¿Estás de acuerdo?—sentí un codazo, por lo que asentí sin entender de lo que hablaban.

Fiona me tomó por los hombros y me sacudió para volver a la realidad.

—¿Te cortarás el cabello y lo teñirás de amarillo?

—¿Qué?—exclamé horrorizada. Ni en aunque estuviera loca haría tal cosa—No, por supuesto que no.

Bailey se rió.

—Es una lástima, pagaría lo que sea para verte luciendo ese look—hizo un puchero—Seguro te verías bien.

Rodé los ojo.

Ciara me dió una mirada molesta.

—Bájate de la nube es la que estas y que presta atención al plan. En cinco minutos Grace pasará como siempre a revisad la cabaña, una vez que verifique que estamos todas, se irá y ahí le enviare un mensaje a Lester para darle luz verde.

—Sigo diciendo que es una mala idea—dije acostándome en mi cama.

Ellas dijeron algo como que era una aguafiestas y que estaban preocupadas por mi porque ya no era lo suficientemente divertida como en el pasado y que parecía una vieja amargada.

—Si no se dieron cuenta aún, Marleen no ha llegado y Grace llegará en cualquier momento.

Apenas termine de hablar Marleen entró a la cabaña irradiando felicidad, ¿cómo lo sé? Pues, su sonrisa de oreja a oreja lo comprueba.

Ciara comenzó a reír cuando Marleen comenzó a girar en el lugar, y pretendió tirarse en su cama pero terminó aterrizando de golpe al piso.

—¿Estás bien?—preguntamos todas al unísono.

Asintió y se levantó sentándose en su cama.

—¿A que se debe esa sonrisa?—Bailey enarcó una ceja—No lo digas, esa sonrisa es por Jesse ¿no?

Marleen parpadeo y se sobo la cabeza, luego me dió una breve mirada.

—Puede ser, todo en la vida puede ser.

Maldita sea.

—No te hagas la misteriosa y cuéntanos—mi voz sonó más dura de lo que quise. Las chicas me miraron sorprendidas, por lo que come aclaré mi garganta y sonreí—¿Pasa algo con Jesse?

—No, todavía no—suspiró— De todas maneras se lo dije, no quería ocultarlo mas. Está bien ¿no?

Su pregunta iba dirigida a mi.

Fruncí el ceño.

—¿Por que lo preguntas?

Se encogió de hombros.

—Por el pacto—dijo— No quiero que se molesten si algo llega a pasar con Jesse.

Las chicas le dieron el visto bueno, claro por soy la única idiota que todavía sigue tratando de cumplirlo.

Bailey me lanzó una mirada de preocupación.

Ella es la única que sabe todo lo que sucedió con Jesse, pero estoy bien.