Capítulo dieciocho.

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-¡Scarlett tu hermano llegó!- gritó la madre de mi amiga desde la planta baja, ella pegó un brinco de la cama al suelo y me miró con una enorme sonrisa que pocos teníamos la dicha de observar.

-Vamos, vamos-me apresuró arrastrándome hacia las escaleras, me sentía fuera de lugar, Max, el hermano de Scarlett, era cuatro años mayor que nosotras, por lo cual aunque lo vi varias veces antes de que se fuera a la universidad, no habíamos hablado mucho. Regresaba este fin de semana para el cumpleaños de su madre, un viaje rápido de solo tres días.

Quizás no me correspondía estar aquí para el encuentro familiar pero después del chasco en la escuela, de la vergüenza y la rabia, solo queria estar en un lugar seguro donde pudiera esconderme, la casa de mi amiga me habia parecido perfecta.

Scarlett y Nick me habían llevado a mi casa, estaba sola al medio dia asi que solo tomé un cambio de ropa y le dejé una nota a mamá. Bajé las escaleras detrás de mi amiga la cual abrazó a un hombre alto con el cabello castaño claro y los ojos azules , le sonrió y despeinó su cabello alborotándolo antes de notarme. Max habia cambiado desde la ultima vez que lo vi, parecía mas alto, mas adulto y mucho mas guapo también, aunque él siempre había hecho el honor al termino ¨el hermano guapo de mi amiga¨.

-_____________- saludó sorprendiéndome un poco porque recordara siquiera mi nombre.

-Hola- murmuré medio sonriendo, antes de fruncir el ceño a las cejas levantadas de Scarlett.

Me uní a la cena de festejo y miré a la señora partir el pastel, al final Scarlett dejó a sus padres en la sala y nos sacó hasta el porche para platicar, o más bien a oír hablar a Max sobre la experiencia universitaria.

-Suelta todos los detalles jugosos- le pidio Scarlett mientras Max sonreía rodeando los ojos.

-¿Crees que estoy loco? Seria como darte ideas- argumentó Max haciéndome reír, él me miró cómplice.

- Mas bien no quieres admitir que eres un tipo aburrido que no sale a fiestas- le gruño su hermana mientras él reía.

-¿Parezco aburrido?- me preguntó juguetón y yo solo me encogí de hombros divertida.

-He aprendido que no se puede juzgar a la gente solo por lo que puedes ver- le dije y él asintió mirándome un poco más atentamente.

- Siempre supe que __________ te ganaría en ser inteligente- le bromeó a su hermana mientras mi amiga asentía totalmente de acuerdo.

Hablamos un poco más entre bromas y recuerdos mientras por un me habia olvidado de todo lo que habia pasado en las ultimas semanas, por un momento mi pecho se volvía mas ligero, era como estar en paz y poder bajar la guardia.

-¿Tienes novia?- le preguntó Scarlett mientras él arqueaba una ceja.

-Hasta crees que responderé eso- murmuró Max.

- No te estoy diciendo que me digas si te acuestas con alguien, solo si sales con alguien- explicó su hermana haciendo que ambos nos sonrojáramos a pesar de que ella siguiera tan fresca como una lechuga.

-¿Cómo la soportas?-me preguntó.

-Es parte de su encanto- le respondí mientras él levantaba su puño y yo lo chocaba divertida.

A pesar de no querer irme, el cielo hacia mucho que habia oscurecido.

- Ya es muy tarde- le dije a Scarlett mientras ella asentía algo descontenta porque era hora de que me fuera a casa la realidad es que hacia mucho que no me reía tanto.

-¿Te llevo a tu casa?- preguntó Max mientras yo miraba a Scarlett. Si, era una cobarde pero Max era atractivo y simpático y yo no me sentía bien, ellos veían solo la cascara de _______ , lo de adentro aun seguía recluido, herido e indefenso. Aun seguía queriendo a Shawn y odiándome por ello.

-Perfecto, tu la llevas y yo le ayudo a mamá a recoger- propuso Scarlett mientras yo la miraba con los ojos entrecerrados.

OTRA OPORTUNIDAD. »Shawn MendesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora