5. Algo estúpido como: te quiero

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"Corre." La rubia le grito a Gavin quien trataba de seguirle el paso, no es como si fuera sencillo para el, la arena sobre sus sandalias no le permitía moverse mas de prisa. Ninguno de los dos imagino que un día de playa terminaría siendo un día tratando de escapar de la lluvia.

"¡El auto esta del otro lado!" Gavin grito, era cierto, no tenia idea de hacia donde corría Maya, solo podía ver unas cuantas casas playeras a lo lejos. "¡Maya para!"

"Tu sígueme." Le pidió aun sin detenerse. 

Gavin observo la algo vieja pero linda casa frente a el, la rubia observaba por las ventanas como si tratara de encontrar algo.

"Maya tenemos que irnos, esto es propiedad privada."

"¡Aquí esta!" La rubia agito el cordón negro del que colgaba una llave. "Sabia que la abuela la había guardado por algún lado." El moreno aun intentaba procesar toda la información. Con un par de empujones la puerta cedió. "Bienvenido a la casa de los Presley, mis abuelos."

Gavin observo el interior, un poco sucio y todos los muebles cubiertos de sabanas blancas, llego a la conclusión de que habían pasado muchos años desde la ultima vez que alguien había habitado esa casa. Sonrió al ver la fotografía de dos pequeñas rubias abrazando a dos pequeños osos de felpa, esa era una de las pocas que tenían color pues las demás eran al blanco y negro y con personas desconocidas para el.

"No puedo creer que la abuela aun tuviera esto." Gavin giro hacia donde se encontraba Maya, llevaba un pequeño marco de fotografía y dos toallas colgándole del hombro.

"¿Que es?"

"Es un dibujo." Soltó una risita muy baja aun mirando el marco. "Cuando los abuelos vivían, Blake y yo pasábamos fines de semana con ellos, el abuelo ponía sus viejos vinilos y la abuela nos regalaba colores y un montón de hojas para dibujar..." Maya levanto la mirada hacia Gavin y sintió su corazón bombear con fuerza, era una imagen tan bella, su sonrisa era tan melancólica y dulce y sus ojos brillaban conteniendo lagrimas. "Blake dibujaba princesas y yo dibujaba jardines todo el tiempo, los jardines de margaritas eran mis favoritos."

Gavin quiso abrazarla, tomarla en sus brazos y pedirle que llorara, pedirle que hablara mas de su infancia, de sus abuelos o cualquier cosa que le viniera a la mente, le gustaba verla así, tan humana sonriendole al dibujo enmarcado por su abuela.

"¿Por qué prefieres margaritas y no rosas?" Tal vez la pregunta era muy estúpida pero su cabeza apenas y podía procesar y juntar dos palabras con sentido en esos momentos.

"La sencillez de su belleza."

...

"Empiezo a creer que Gavin es muy tacaño o realmente las jodidas margaritas esconden un secreto del que no me haz hablado." Ronnie dijo observando el cuarto ramo de margaritas en la semana. El mostrador del vídeo club empezaba a llenarse de aquellas florecillas. "Esto empieza a parecer el cuarto de hospital de la tía a quien nadie quiere."

Maya sonrió, no podía creer que Gavin se acordara de aquella tarde en la casa de sus abuelos refugiándose de la lluvia.

*I know I stand in line
Until you think you have the time
To spend an evening with me
And if we go some place to dance
I know that there's a chance
You won't be leaving with me

And afterwards
We drop into a quiet little place
And have a drink or two
And then I go and spoil it all
By saying something stupid
Like I love you.

(Sé que permaneceré en pie en la cola
hasta que creas que tienes el tiempo necesario
para pasar una noche conmigo.
Y si vamos a algún lugar a bailar,
sé que hay posibilidades
de que no sea conmigo con quien te vayas (de allí).

Y más tarde,
nos dejamos caer en un tranquilo y pequeño lugar,
y tomamos una copa o dos,
y luego, voy yo y lo echo todo a perder
diciendo algo estúpido,
como "te quiero")

Culpa a la sencillez de tu belleza, el no querer dejarte en paz.

Releyó la nota por tercera vez y volvió a reír. Todo eso había sido tan cursi, el usar la letra de la canción que bailaron, o que mas bien Gavin volvió a obligar a Maya a bailar esa noche, el chico tenia problemas con el baile. Y luego por ultimo esa frase que parecía tan impropia de Gavin, Maya ni siquiera podía imaginarlo decir esas palabras, le pareció tierno y un buen intento pero no caería tan fácil en el juego.

"Oh por dios." Ronnie leyó el pedazo de de cartón con una enorme sonrisa. "Que dulzura." Empezó a abanicarse con la mano mientras Maya reía con su reacción. "¿Que te hizo ese chico para que no puedas perdonarlo? Esta muerto por ti."

"No es sencillo Ronnie."

"No cariño déjame decirte que no es sencillo, el decirle a tus padres que eres gay en esta época y que quieres ser chef, no doctor." Maya se encogió de hombros mientras Ronnie esperaba algo de ella. "¿Acaso tu ya no lo quieres?"

"Ronnie." Dijo con advertencia. 

"Ronnie mis nalgas, responde. ¿Ya no lo quieres?"

Maya suspiro con pesar pasando las manos por su cara, dio un vistazo de nuevo a las margaritas y sonrió.

"Puede ser un idiota y tal vez eso me hace mas idiota que el... Pero le quiero, le quiero tanto que me da miedo."

Ronnie sonrió y camino hasta su amiga envolviéndola en un abrazo, Maya no pudo notar que a sus espaldas su amigo levantaba el pulgar en alto, Gavin observaba todo desde afuera pegado a la ventana. Ahora tenia un nuevo aliado, Ronnie ayudaría en lo que pudiera.



*Somethin' Stupid: es una canción escrita por C. Carson Parks y grabada originalmente en 1966 por Parks y su esposa Gail Foote, como "Carson and Gaile". Es el más conocido en la versión interpretada por Frank Sinatra y su hija, Nancy Sinatra.

Memorias de una ex rubia (CALM#2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora