Ella-Capítulo 2: Cosas sobrenaturales

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Espere un buen rato al guardia pero este seguía tardando, observe las ventanas y los conflictos de las reclusas seguían como siempre, me di cuenta enseguida por los sonidos que se escuchaban desde a fuera. De pronto, el guardia entro o eso creí, puesto que la puerta se abrió sola y no había nadie, confundida observe mejor hacia la puerta y efectivamente el guardia si estaba allí pero era completamente transparente como si fuera un fantasma. Cuando me di cuenta, porque tarde en reaccionar, pegue un grito y Salí corriendo de ahí, mas perpleja quede cuando encima lo traspase, aunque creo que el no se dio ni cuenta de mi presencia.

Asustada y traumatizada corrí por todo el lugar. Escuchaba mi respiración muy fuerte dentro de mi oído, el lugar ya no era el mismo, al igual que el guardia todos eran trasparentes, todo era muy brillante, los sonidos sonaban con un eco extraño y la gravedad parecía más liviana. Quería salir de allí, llegue a la puerta de salida de esa cárcel y volví a recordar que había traspasado al guardia, entonces me atreví a cruzar la puerta de esa manera pero lo hice más cautelosamente, lentamente pase primero mi mano y vi como pasaba atreves, continúe con el brazo y luego con un poco más de confianza, cerré los ojos y traspase la puerta.

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Así recordé como había llegado aquí. A este lugar hermoso y mágico, di la vuelta y la cárcel había desaparecido.

Comencé a no estar segura en el tiempo en el que estaba.

¿Este es el principio? ¿El presente?

Recuerdo donde estoy, sin embargo no entiendo nada. Sigo observando este precioso lugar, camino sobre las flores y me doy cuenta que estoy descalza. Sigo caminando, encuentro un lago y observo mi reflejo, la ropa de carcelaria que tenía ya no estaba más. En cambio ahora tengo un pequeño vestido rosa que lleva hasta mis caderas con un short debajo y mi cabello que era de un lacio corto castaño oscuro que llegaba hasta mi oreja cambio a un rubio ondulado mucho más largo que llega hasta mis hombros.

Continúo observando el lago y me empujan desde atrás, caigo al agua pero no me estoy ahogando, sigo cayendo y atravieso una especie de agujero brillante que me hace caer a otro suelo donde ya no hay agua, al golpearme tan fuerte contra el suelo me desmayo.

Estando semiinconsciente, siento que alguien me levanta, cuando recobro la conciencia, reacciono bruscamente para levantarme, no lo hago completamente ya que mi cuerpo se siente pesado, me toco la cabeza y tengo una venda en ella, era evidente que alguien había curado mis heridas de cuando me caí.

― ¿Pero quién? ― digo en voz alta.

Siento unos pasos y un hombre abre la cortina y dice.

― Yo he sido ¿Estas mejor?

A lo que le respondo.

― Si pero... ¿Quién eres?

― Mi nombre es Nadir pero en este lugar soy solo N-58

― ¿Por qué?

― Ah, lo siento, eres recién llegada ¡Bienvenida a la ciudad de los suicidados!

― ¡¿Qué?!

― Aquí tenemos que pasar algunas pruebas para poder llegar al paraiso y mientras vivimos aquí.

Entonces efectivamente lo que había pensado cuando llegue aquí era verdad, si estoy muerta y también he pecado por suicidio pero...

― Disculpa ¿Cómo es que estoy herida si estoy muerta?

El me responde

. ― Si mueres en este lugar puedes reencarnar y volver a intentarlo todo desde el principio, pero igual te recomiendo que no lo hagas, morir aquí puede ser muy doloroso y aunque las pruebas también lo son, te será un camino más rápido que volver a vivir todo otra vez.

Antes y después de mi muerte (sin editar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora