Capítulo 9 Juntos somos una constelación

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-¿Talent Show?

- ¡Si! Cómo nadie quiere entrar, los profesores de ética están dando diez puntos extras a quien participe y créanme que los necesito.

- ¿Y que haríamos nosotros Frankie? -Preguntó Mike

- ¿Es enserio que me preguntas eso? Tu tocas, nosotros cantamos.

- ¿Nosotros? - Pregunté

- ¡Si! Sam, tu puedes ser mi coro. Va a ser divertido te lo juro. No es nada difícil, sólo crea una cuarta pared y no mires al público. Saca todo tu talento y si te equivocas sólo sonríe.

Me quedé en silencio. Si quiero hacerlo pero.. ¿Y si estropeo todo? Cuando paso al frente y siento las miradas, mi cara se pone roja y confundo las palabras.Pude librarme el día de la clase pero..¿Cantando? ¿Les ahorro la vergüenza o participo con ellos sin importar qué? Mike sólo me miraba esperando mi respuesta y Frankie se veía nervioso.

- Es que no lo sé, podría estropearlo todo pero si digo que no, siento que podría perderme de algo grande..

- Ya sé, tengo una idea. - dijo Frankie

Agarró un paquete de chocolates m&m's y lo abrió. Dijo que las reglas eran que yo tenía que elegir un color. Elegí el amarillo. Si salía el color que yo dije, iba a participar y si no salía, no tenía que hacerlo. Agitó los chocolates y después abrió el paquete. Mike me tapó los ojos y metí mi mano para agarrar el chocolate. Tomé uno y lo fui sacando lentamente. Cuando salió..

- ¡A huevo! - gritó Frankie

El chocolate era amarillo. No me quedó de otra mas que sonreír. Volteé a ver al cielo. "Es un nuevo reto ¿Verdad? Haré lo mejor que pueda" Pensé. 

Al otro día, fuimos al salón de teatro para inscribirnos pero nos encontramos con una sorpresa. No se aceptaban menos de cuatro participantes. Frankie se puso como loco y la única explicación que le pudieron dar era que el año pasaron fueron tantos solistas que se alargó el tiempo y querían evitar eso. Sólo podían participar grupos de cuatro o más. Éramos tres, no solistas. De todos modos nos volvieron a contestar "Así se estableció el sistema" dejándonos sin otra alternativa. Nos volteamos a ver unos a otros y no encontrábamos que hacer al respecto. Parece que la profesora notó nuestra angustia y nos recomendó a una chica solitaria que quería participar y no sabía con quien hacerlo. Su nombre era Mylene. Estudiaba en nuestro mismo semestre.

Fuimos a buscar a la chica por casi toda la universidad pero no pudimos encontrarla. Nos separamos y nos repartimos diferentes lugares. Yo fui al estacionamiento y le pregunté a un grupo de chicas si la conocían, dijeron que sí pero que estaba un poco ocupada. Señalaron hacia una pareja discutiendo dándonos a entender que era ella. La discusión llamaba mucho la atención. Todos los estaban mirando.

- ¡Ese es el problema Mylene! Haces lo que se te da la gana y por más que te busco tú sólo me ignoras, ni dándote rosas..

-¡¿Quieres callarte?! Siempre hablas a lo tonto. Ya lárgate que no quiero volver contigo.

- ¡Mylene te amo! Daría todo por ti, eliminaría mis redes sociales y si quieres podemos compartir el celular. Te perdono que hayas sido infiel ¡Yo sólo te amo a ti!

- ¡Ya basta! - Cruzó los brazos y dejó hablando al chico.

Entre murmullos de la gente, muchos la criticaban. Le decían frases como «Que zorra »« Es una perra»« Después de que le regala flores todavía se enoja»« Es uno de los chicos más dulces que conozco, totalmente ella es el problema» . Sabía que no era el momento para pedirle un favor. Mejor me retiré y pensaba decirle a los chicos que sería mejor buscar a otra persona. Pero, a lo lejos pude escuchar a una de las chicas diciendo "¡Mylene! ¡La chica que va allá te estaba buscando!".

Tu eres mi limboDonde viven las historias. Descúbrelo ahora