Capítulo 16 Mi antología

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—Mylene, dime que es broma.—Dijo Frankie

  — Tenemos que tranquilizarnos. Me sé una receta de té de manzanilla que puede aliviarte. Aunque, no sé si su resultado sea instantáneo. —Dije intentando calmar el ambiente 

Mylene había quedado disfónica. Batallaba demasiado para llegar a las notas altas y su voz empeoraba por forzarla tanto.  Las cosas se habían puesto difíciles debido a que Mylene era la que acompañaba a Frankie como voz principal, quedando Mike y yo como los coros. A un día antes del concurso, habíamos perdido a una de las voces primordiales y se tendrían que hacer cambios drásticos. Mike intentó sustituirla pero, estábamos conscientes de que una voz aguda como la de una mujer era la ideal para la canción. No me gustaba verlos angustiados. Sabía a qué dirección se dirigía todo esto. Yo era la única opción que quedaba para sustituir a Mylene. Ya había vencido a mi ansiedad una vez y podría hacerlo de nuevo.. eso creo. Pero ésta vez no se trataría de un salón de clases, si no, de un auditorio. ¿Cómo podría cantar frente a tanta gente? Si me equivocara, sería una burla. Así es la gente. Puedes ganar,pero nadie se acordará de ti. Puedes caerte y serás la burla por años.  Miles escenas trágicas pasaron por mi cabeza y me hicieron dudar cada vez más si aceptar el reto. ¿No me había dicho a mi misma que quería cambiar? Si tengo miedo a caminar, nunca podré avanzar a ningún lado. Si hiciera alguna estupidez como caerme, si cantara feo, si ganáramos, si fuera la mejor en el escenario, si no lo fuera.. no lo haría sola. Ellos estarían conmigo. Si no estaré sola, entonces, ¿A que le tengo miedo?. 

  — Yo.. lo quiero intentar.

— ¿Segura Sammy? —Preguntó Mike. 

Asentí con la cabeza. Tomó su guitarra y empezó a tocar. Frankie comenzó a cantar. Ninguno me perdía de vista y estaban atentos a mi turno. Cabizbaja, miraba hacia el suelo y cantaba un poco bajo. Jamás alguien me había escuchado cantar. Nadie a excepción de Ximena. A ella la arrullaba y le cantaba y lo sigo haciendo. Me da igual, es Ximena. Pero esta vez los tenía a ellos que son mil veces mejor que yo en esto de la cantada. Me sabía la letra, las pausas, todo. Pero había algo que me alteraba. ¿Y si se me sale un gallo? ¿Y si se me olvida? ¿Y si..?

Mike tomó mi barbilla y la levantó. Mis ojos se centraron con los suyos y me sonrió. Le sonreí también, pero inmediatamente miré hacia otro lado porque temía delatar mi pena al sonrojarme . ¿A quién engaño? ¿Cómo no perderme en las pléyades de sus ojos? Mylene me había advertido en no ilusionarme y lo juro. Estoy tratando. 

Canté mas alto y los miré a cada uno. Trataba de armonizar mi voz con la de Frankie. Fue como si hubiéramos ensayado por mucho tiempo. Nos salió muy bien a pesar de ser la primera vez. Cuando terminamos, los chicos se voltearon a ver unos a otros sonriendo y yo seguía sin creerlo. Frankie se paró y dio dos pequeños aplausos. "listos" fue lo que dijo. Nos levantamos y bajamos a mi cocina para tomar un poco de agua antes de seguir ensayando ya que ahora seré yo la "main star". Aunque, para mi, éramos parte de una antología. 

Escuché a Ximena bajar y acercarse a la cocina. Quería ver su reacción esta vez, ya que la vez anterior no quiso decirme nada al respecto. Entró y no pasó nada sorprendente. Los saludó normalmente y sacó un jugo de manzana del refrigerador. 

  — ¿Y que dices Ximena? ¿Que piensas sobre el hecho de que tu hermana cantará mañana? — Preguntó Mike

— ¿Es enserio? Que extraño. La única canción que le sale bien es la de "Hakuna Matata" y eso porque tiene la misma voz de pumba.  

  — Mira que chistosa. — Dije a la arrogante de mi hermanita. 

 Después de burlarse de mi, a Frankie se le ocurrió una idea. 

Tu eres mi limboDonde viven las historias. Descúbrelo ahora