Asesinatos en "Forest Hill's"

Capítulo V

El sobre negro.

-Esto si que es incomodo.-Pensé.

-Hola..mamá, papá él es Alexander Pride mi nuevo compañero y nuestro vecino.

-Hola Alexander, un gusto. Mi nombre es Ethan y ella es Adalia-Dijo mi padre mientras señalaba a mi madre.

-El gusto es mío señor Colier.

-¿Y que te trae por aquí?-Preguntó. Mi padre era un hombre muy celoso y eso se notaba mucho, pero cuando digo mucho es mucho.

-Me enteré que asesinaron a una chica aquí y solo pasaba a preguntarles como estaban y si necesitaban algo, pero ya me estaba yendo.-Dijo nervioso.

-Bueno, gracias por preocuparte por mis hijas, pero ya estoy aquí.

-Ok entiendo. Hasta luego señor y señora Colier..-Dijo Alex mientras salía por la puerta. Su rostro estaba totalmente colorado.

Odiaba cuando mi padre hacía eso.

Luego de unos minutos mi familia y yo empezamos a comer pizza, el ambiente estaba tenso, era obvio que a mis padres, no le había agradado que Alex esté en casa, por lo que paso con Maggie.

******

11:15 P.M

Ámber y yo ya nos estábamos por ir a dormir, cuando alguien me tomo del brazo...

-Avril...Alexander, parece un buen chico.-Dijo mi padre.

Eso sí que fue raro.

Me fui hasta mi habitación y me puse el pijama. Mañana era miércoles y me esperaba un largo día.

******

Miércoles 6:30 A.M

-¡ARRIBA BELLA DURMIENTE!-Gritó mi hermana, haciéndome despertar de la cama de un salto.

-Me vas a matar de un paro cardíaco Ámber.- Dije algo molesta.

-Si claro.- Dijo mientras se cambiaba.

Yo me levanté e hice mi rutina diaria. Me cepillé los dientes, me bañé, me vestí con lo primero que encontré por ahí, desayuné rápidamente y salimos del departamento para ir a la escuela.

-Hey Avril, ese chico no es Alex?-Me susurró Ámber.
Y así era, ahí estaba Alex al final de la escalera, con su mochila, esperándonos para ir a la escuela.

-Sí, es el.-Contesté mientras estábamos bajando las escaleras.

-Al fin!.- Dijo el, mientras sonreía.- Hace media hora que las estoy esperando ¿por qué llegan tan tarde?.

-Pregúntale a ella.-Dijo Ámber revoleando los ojos.

-Pff, yo no soy la que duerme con música, haciendo que mi hermana menor no pueda dormir.-Contesté mientras la fulminaba con la mirada.

-Bueno...no se peleen que ya es tarde.-Dijo Alex.

-Y tú que haces por aquí?-Pregunte mientras salíamos del edificio.

-Era temprano y como imaginé que todavía no habían salido, decidí esperarlas, para ir juntos al colegio...pero si le molesto me voy.-Aclaró.

-Claro que no nos molestas.-Dije, y Ámber me guineo el ojo izquierdo mientras él no la veía.

Ya habíamos llegado, Ámber se fue a su clase de educación física, mientras que Alex y yo fuimos hacia el salón de informática y nos sentamos juntos.
Luego de diez minutos entró la preceptora al salón informando que la profesora no vendría y que teníamos una hora libre. Como todo adolescente de dieciséis años, todos empezaron a gritar y saltar de la alegría, ya que ese día teníamos un examen bastante difícil.

Salimos del lugar y nos dirigimos hacia los casilleros.

-Alex, te quería pedir disculpas...-Dije nerviosa. Él me miró confundido.-Por lo de mi padre, ya sabes es un hombre muy celoso.-Aclaré.

-Pues, no hay problema. Entiendo a tu padre, yo también sería celoso si tuviera una hija tan hermosa como tú.-Dijo un poco avergonzado. Podía sentir como toda la sangre se dirigía a mis mejillas convirtiéndolas totalmente rojas como un tomate. No contesté, no podía hacerlo, y no sabía como, así que solo sonreí tímidamente.

******

Ya había tocado el timbre que indicaba la hora del almuerzo. Ámber, Alex y yo nos sentamos en una mesa vacía. Empezamos a hablar, hasta que un chico se me acercó.

-Se te cayó esto de la chaqueta.- Dijo mientras me alcanzaba un sobre negro.

Era el sobre que había encontrado en la escena del crimen.

-Ok, gracias.-Contesté.

-¿Qué es eso?.-Preguntó mi hermana.

-Emm si...hablando de esto, hay algo que tengo que contarles.-Dije seria.