Asesinatos en "Forest Hill's"

Capítulo XIII

La cita.

No sabíamos que decir, tapé mi frente con mi pelo, para que no vieran la pequeña lastimadura que esta tenía.

-Contesten.-Dijo mi padre, que ya estaba perdiendo la paciencia.

-Estábamos estudiando en la casa de Brittany.-Contestó Ámber nerviosa.

¿Brittany? Ni siquiera conocemos a una chica llamada así.

-Entonces...¿Cómo explican que se bajaron del auto con Alex?

¡Maldición! No pensé que nos habían visto desde la ventana.

-Es que Alex justo pasaba por ahí y se ofreció para traernos.

-¿Y entonces por qué mi amigo Mike me dijo es estuviste en el hospital por un accidente automovilístico?

Mi vida es un caos. Mi padre era doctor y tenía muchos amigos en el tema, era obvio que me iban a descubrir ¿En qué estaba pensando? Ahora me van a castigar de por vida y a Ámber también por cubrirme.

-¿Me van a decir que pasó?

-Estaba andando en bicicleta cuando un auto me atropelló.

Mis padres se acercaron a mi, me preguntaron como estaba, y luego cenamos. Me resultó muy  extraño que no me regañaran por ocultarles la verdad, creo que se preocupaban por mí más de lo que creía.

******

Viernes 6:00 A.M

No me podía dormir, así que me levanté tratando de no despertar a Ámber.

Sí, me levanté antes que ella, va a llover.

Me cepillé los dientes, me bañé, y desayuné.
Era el gran día, era mi cita con Alex, estaba feliz. Me arreglé un poco más de lo habitual, pero no tanto,  porque no quería que pensara que me arreglaba tanto por él, aunque eso fuera verdad.

-¿Te caíste de la cama?-Dijo Ámber al verme lista para irnos tan temprano.

-Puede ser....-Contesté riendo.

-¿O es por tu cita con Alex?- Preguntó con una sonrisa pícara.

-Claro que no Ámber.

-Mmm no lo sé, yo te veo más arreglada de lo común.

-Eso puede ser...pero no es por Alex.

-¿Segura? Yo creo que sí.

-Bueno...me descubriste, es verdad.

-¡Lo sabía!

-Tu siempre sabes todo.-Contesté mientras abría la puerta de entrada.

Al llegar colegio Ámber y yo nos separamos. Yo me fui hacia los casilleros-Como siempre.-a buscar los libros de inglés.

-¡Hola Avril!-Dijo Alex  con una gran sonrisa que dejaba ver sus hermosos dientes blancos.

-Hola Alex.

-¿Cómo estás?-Preguntó.

-Un poco mejor, aunque todavía duele un poco.-Dije tocando la herida de mi frente.

-Tengo una gran idea.-Dijo con una sonrisa maligna.

-Me asustan tus ideas Alex, y más si son grandes...-Dije algo insegura.

-Escapémonos.

-¡¿Qué?!-Dije gritando.

-Vamos Avril, es nuestra cita..

-¿A dónde vamos?-Pregunté no muy segura de todo esto.

-¿Eso es un sí?.-Asentí con la cabeza.-Bueno, entones solo confía en mí.

No dijo nada más y me tomó de la mano llevándome hacia afuera del colegio, hacia el auto.

El auto.

-Todavía no lo devolví, podemos aprovechar...

-¡Vamos Alex dime a donde vamos!

-A la playa.

-¿A la playa?.-Susurré

-Si, ¿no te gusta nadar?

-No sé nadar.-Dije seria.

-No hay problema, te enseño.-Digo con una sonrisa pícara que me hacía recordar a Ámber.

Luego de una hora llegamos a la playa.

¿Que hago aquí?

Era una playa hermosa, eramos los únicos allí, la arena era blanca y el agua turquesa. Se podía escuchar el ruido de la olas chocando entre sí, y una fuerte brisa que recorría mi cuerpo haciendo que mi pelo se despeinara.

-Y...¿te gusta?-Preguntó Alex  mientras me agarraba de la cintura.

-Me encanta.-Dije cerrando los ojos.

-¿Nos metemos al agua?

-No lo sé...

-Vamos...no dejaré que te ahogues si a eso es a lo que le temes.

-Ok, vamos...

Nos metimos al agua,  que estaba muy fría, y al ir avanzando era más profunda. Tenía miedo, Alex se dio cuenta de esa situación y me alzó en sus brazos, dándome una completa seguridad que jamás había sentido. Era hermoso.

-¿Y qué te parece?

-Está muy fría.

-Ya te vas a acostumbrar.

-No lo creo.

Luego de unos largos minutos en el mar decidimos salir. Ya había un poco más de personas, pero no muchas.
Nos sentamos en la arena mirando la salida del sol.

-Avril...-Dijo Alex mientras me tomaba de la mano. Podía sentir su miedo e inseguridad en sus ojos.

-¿Qué sucede?.-Respondí con tranquilidad sin despegar mis ojos de los suyos.

-¿Quieres ser mi novia?.-Dijo nervioso.