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Avery
Busqué mi celular en el bolsillo y fui caminando a mi cuarto.
Cerrando mi puerta con mi pie , me doy cuenta de que mi ventana estaba abierta y las cortinas bailaban en el viento.
Deje mi bolso encima de mi silla de escritorio.
''Qué mierda?'' Susurré.
Esta ventana no la he abierto en meses por el mismo frío y viento que hay, quién habrá sido.
Me acordé que en las películas esto siempre pasa y el o la tipa esta detrás tuyo.
Me di vuelta y no había nadie.
Caminé en reversa hacia la ventana, no veía por dónde pisaba.
Me topé con el borde de la ventana.
''Mierda'' Dije agarrando el borde.
Casi me caigo del segundo piso.
Vi mis manos y eran garras enterradas en la madera.
Me acordé que hoy estaba la maldita luna.
Es un instinto sacar las garras en momentos de pánico.
Las ''guarde'' y fui a buscar mi celular que estaba botado en el piso.
''Dios mio'' Dije agachadome para recogerlo.
Me acordé de la escena de película otra vez.
''Grr'' Hice en tono de broma. La mayoría de las veces hago bromas horribles y algunas las hago cuando estoy sola.
Me tiré a la cama que era alta, ahora tengo espacio debajo.
Tiré mi largo cabello castaño hacia atrás, aveces me dan ganas de sacarme todo el cabello para quedar calva.
''A ver... A ver'' Murmuraba mientras desbloqueaba mi celular.
Busqué en mis contactos la letra C.
Habían muchos, siempre agregó gente que pienso algún día hablarles, todos tienen el mismo nombre pero con diferente número Agradable 1-2-3... y así seguía la lista.
Lo encontré y le marqué a la fugitiva.
Esperaba en el teléfono.
El aire de afuera comenzó a entrar y me rozó la cara.
Sonreí a la frescura.
Cuando estoy literalmente sola soy más feliz que con gente, hay menos ruido.
Andar con gente desconocida me pone tensa, soy todo menos sociable.
A Carrie la conozco desde los seis años, tengo mucha confianza con ella, pero me da miedo contarle lo que en verdad soy, me da miedo al rechazo y a que ella misma y mis amigos me teman.
A ellos nunca les haría daño, espero.
Pensado en estas cosas me da impotencia, porque no puedo cambiar lo que soy.
Carrie no me contestó, mejor la llamo después. Quizás tenga algún problema familiar.
Tiré mi celular por otro lado y quede tirada en mi cama mirando el techo.
Tenia un mechón de pelo en mi cara, lo empecé a soplar por falta de entretención, pero después vino otra ráfaga de viento por la ventana, mi mechón salio volando y consigo mi entretenimiento.
Pensé en ir a trotar un rato, el bosque no queda lejos de mi casa.
Vi la hora en el reloj de pared y marcaba las 15:42 Pm.
Saldré a las 16:00 mejor.
Por ahora intentaré dormir un poco, estaba cansada. No soy mucho de dormir cuando debo.
Cerré los ojos y me acomode en medio de las almohadas gigantes que tengo.
Estuve así unos minutos pero después los abrí de golpe al recordar lo que había hecho Richard, mató a alguien.
No le había tomado el peso al asunto antes, pero se me fue toda la flojera.
Me levanté y fui a buscar mi laptop.
Le puse la contraseña, Rioor.
No tengo idea en que estaba pensando cuando coloqué esa contraseña y tampoco sé cómo cambiarla.
Puse una página de noticias y busque si alguien había muerto.
Encontré una noticia, decía.
Se encuentra cuerpo de mujer de 42 años, se identifica como Whitney Grimes.
Mis ojos de abrieron al máximo, mi boca estaba en el subsuelo, no podía creerlo, es la mamá de Carrie.
''Por eso se fue hoy... '' Dijé entre mi.
Vi la hora de la publicación y decía 14:27 Pm.
Pero Carrie se fue como a las doce del día... Quizá la publicaron después.
Apreté la noticia y pude ver imágenes en blanco y negro, era para proteger la salud mental, creo.
Había más sangre que cuerpo.
Tenia muchos rasguños en el cuello, demasiados. En las piernas unos tantos y en los brazos también tenia pero pocos.
''Carrie debe estar destruida'' Dije.
No sabia si llamarla o esperar a que me llamara. No soy muy buena con las palabras en estas situaciones.
Cerré la computadora y me fui a sentar a la cama.
Recordé lo que Carrie me había mostrado hoy, era un lobo, el de ojos amarillos era Richard, minutos después de matar a la mamá de mi mejor amiga.
Por eso peleaban los dos hace poco y es verdad lo que dijo mi padre, ahora nosotros estamos en peligro.
El sonido de mi puerta al abrir me interrumpió mis pensamientos.
''Sabes algo? '' Preguntó Katie cerrando la puerta a sus espaldas lo más silencioso posible.
''Si y mucho'' Le contesté.

La chica de los ojos extraños Donde viven las historias. Descúbrelo ahora