Tres semanas antes. [No sé si se entiende, básicamente fue en algún momento de los tres meses que me salté, sí]
— ¿Mami? —preguntó Luke a su madre, quien estaba en su computadora terminando detalles de su trabajo, muy importantes para dirigirle una mirada a su hijo.
— Hay pasta en el microondas. —le dijo esta tecleando sin despegar los ojos de la pantalla.
— Sí, bien. Pero quiero preguntarte algo...
— Hay pasta en el microondas.
— Lo sé, lo dijiste hace un segundo. —murmuró jugando sus sus dedos.— Pero quiero hablar contigo.
— Rápido, cariño, estoy ocupada.
— Alguien hace tiempo dijo que soy hermoso... ¿tú lo crees?
— Los niños no son hermosos, Luke. Sí, eres lindo y a veces llegas a ser tierno, pero quien te haya dicho eso te ha mentido.
— Mami...
— ¡Karisma, Luke necesita ayuda con su tarea!
Se rindió bajando sus hombros desganados, sintió sus ojos picar por las lágrimas que se acumularon y bajaron por sus mejillas. Subió corriendo a su cuarto, sentándose en su cama y tapando su rostro.
¿Michael le había mentido?
Su madre quizás tenía razón, hermoso no era una palabra que él escuchó alguna vez en su vida para dirigirse a un chico. Se bajó de su cama, aún llorando, y buscó en su mochila aquella nota amarilla que había estado guardando desde que Michael y él fueron al concierto de Karisma, donde Michael afirmaba que él era hermoso.
Cuando la tuvo en sus manos se levantó y bajó nuevamente, salió de la casa y la desechó en un contenedor de basura.
Odiaba que le mintieran y Michael lo había hecho.
Regresó a su casa, cerró la puerta y se sentó al lado de su hermana para ver Bob esponja. Su madre había subido a su habitación cuando él entró, lo cual le daba algo más de confianza hablar con su hermana. Él tenía muchas preguntas y, si su propia madre no se las respondía, Karisma lo haría porque nunca dejaba de dar opiniones sobre todo. Al ser su hermana mayor, Luke creía que sabía todo, o al menos mucho más que él porque ella hablaba con su madre y esta le respondía, siempre estaba al tanto de todo y le gustaba leer mucho sobre cosas que Luke aún no entendía.
— ¿A un niño le puede gustar otro? —preguntó hundiéndose en el sofá. Karisma desvió su atención de la tele y miró a su hermano menor extrañada.
— No sé. —respondió confundida. Claro que no acababa ahí, aún faltaba su opinión. — Es raro, creo... No es como que salga a la calle y vea a un chico con otro como novios.
— Oh.
— ¿Por qué?
— Creo que... Creo que me gusta Michael. —susurró nervioso. Su hermana abrió los ojos y la boca sorprendida, comenzó a saltar emocionada y luke la miraba confundido.
— ¡A Lukey le gusta alguien, a Lukey le gusta alguien!
— Kari...
— ¿Es cierto, Luke? —preguntó su madre bajando las escaleras— ¿Quien es la niña?
Karisma se quedó en blanco mientras le pedía a Luke que guardara silencio, todo dio click en la mente de la rubia y le pidió a Luke en un susurro que le siguiera la corriente.
— Una niña de su aula.
— ¿Cómo se llama?
— Clarissa. —dijo Luke, siendo capaz de recordar a la niña solo porque se sentaba al lado de Michael.
— Oh, bien. Aún eres pequeño, pero podría ser tu primera novia. Imaginalo, que lindo. —sonrió y se dirigió a la cocina.
— Me sonrió. —murmuró para él mismo.— ¡Mami me sonrió! ¡Está feliz de que me guste alguien!
— Sí... No creo que le guste cuando se entere que de verdad es Michael. —se quejó Karisma.
— ¿Por qué?
— Todo lo que ella no encuentra bien está mal para todos. No le agrada mucho tu amigo, se queja de que algo pueda sucederte.
— Entonces ¿le hace feliz que me guste una niña? —su hermana asintió.— ¿Y no le gustaría que fuera niño? —su hermana negó. — O sea que si Clarissa es mi novia ¡mamá me querría más!
— ¡No, Luke, no! A ti te gusta Michael, no puedes hacerlo solo por mamá.
— Michael es un mentiroso. —se encogió de hombros el rubio.— A partir de mañana hablaré con Clarissa y ¡si, si, si!
Subió corriendo las escaleras, se tropezó dos veces y su hermana se quedó boquiabierta al ver lo que pensaba hacer su hermano menor.
Luke estaba totalmente equivocado.
[•••]
Pensé en esto cuando estaba en la iglesia y no me arrepiento
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M + L
Random- La M soy yo, tú la L, el signo de más nos une ¿entiendes? - No. - ¡Perfecto!