M + L

21.

El resto de la tarde y el domingo fueron los peores que Robert había pasado con Luke. Todo era por el hecho de que su hijo estaba bastante enojado cuando su padre anunció que se irían de casa de Michael justo cuando llegó el moreno, Luke no quería que su mejor amigo pasara tiempo con alguien que él creía mejor, Michael posiblemente de olvidaba de él y Calum se convertiría en su mejor amigo.

Luke podía ser muy reservado y tranquilo, era bastante educado con sus padres desde siempre; pero en algún momento de su corta vida él tuvo que llamar la atención que no le daban debido a Karisma, y para mala suerte de sus padres aprendió a llamarla de una manera no muy positiva: llorando, gritando y también cuestionando cada cosa que hacían sus padres. Y él supo que haciendo eso conseguiría algo.

— Luke, por última vez te digo que comas los malditos vegetales.

— ¡No quiero! —gritó frustrado. — ¡Y dijiste una mala palabra, se lo diré a mamá!

— Hijo, tú no eres así. Tú sabes que yo te daré lo que quieras si te lo ganas. —habló calmado su padre, recargándose en la silla y esperando que su hijo comiera.

— Estoy molesto. —declaró el pequeño rubio.— Por tu culpa Michael me va a cambiar por Calvin.

— Creí que era Calum. No importa. No es mi culpa que llegara cuando nos teníamos que retirar, Luke, ni tampoco lo sería si Michael se hace su amigo.

— ¡Va a ser tu culpa! ¡Solo tuya!

— ¡Ya basta, Luke! —le gritó su padre irritado, había un limite para todo.— ¡No quiero que vuelvas a hacer un escándalo así de nuevo, sabes que de mi no ganas nada!

Luke lo miró y cruzó sus brazos, se bajó de la silla y salió hacia la sala de estar donde se puso a ver televisión, aún sabiendo que no tendría permiso después de lo que acababa de hacer. Creyó haberlo logrado cuando su padre subió las escaleras, tal vez no sólo a Karisma le funcionaba el gritar y frustrar personas.

— Al auto, no lidiaré contigo si te comportas de esta manera.

— No.

— Luke, te he indicado algo. Sí estás así porque no te dejé en casa de Michael no quiero más problemas. Creo que todo está demasiado bien hasta este punto y no necesito que te comportes como Karisma, yo no soy tu madre para que me manipules así.

— No subiré.

Roberto suspiró y de acercó al niño, lo tomo debajo de sus brazos con intención de hacerlo subir al auto. Luke comenzó a patalear negándose a salir de la casa, hizo demasiados intentos de que su padre lo soltara pero no funcionó nada, entonces comprendió que había colmado la paciencia de su padre y este tenía razón de estar molesto, lo soportó por más de un día con aquella actitud y no había mencionado nada hasta el momento.

Luke comenzó a derramar varias lágrimas mientras dejó de oponerse, miró a su padre y lo abrazó pidiéndole disculpas. Esa actitud no era propia de él, ambos lo sabían y Luke estaba consciente de que él no tenía ningún motivo por el cual tratar así a Robert.

— L-lo siento, papá. Lo siento mucho, no lo haré más, p-prometo no, no hacer eso de nuevo. No me lleves a casa aún. —lloriqueó una vez que su padre lo acomodó en el asiento trasero.

Sus disculpas no sirvieron porque Robert ajustó el cinturón y cerró la puerta del auto para volver a la casa por las cosas de Luke. Este comenzó a patalear frustrado, pero ahora con él mismo porque eso era lo que había logrado: que su padre también se cansara de él.
Frotó sus ojos muchas veces, aún estaba sollozando y escuchó como se cerró la puerta del lado del conductor.

— No te llevaré con tu madre aún. —murmuró encendiendo la camioneta, Luke sonrió levemente.— Pero eso no significa que te saliste con la tuya. Está actitud no me parece para nada aceptable y quiero que quede bastante claro que no recibirás nada más que un buen castigo si esto se repite. ¿Entendido?

— Entendido.

— Tengo que hacer varias compras aún, piensa en todo esto camino al supermercado.

No habló los siguientes minutos, ni cuando iba agarrado del carrito de compras caminando por los pasillos. Se sentía mal por muchas cosas: la situación de sus padres volvió a su mente, pensó en como a Karisma sí la aceptaban con esa manera de conseguir las cosas, Michael cambiándolo por Calum, él comportándose mal, y finalmente en cuál cereal quería que su padre comprara.

No habían sido sus mejores momentos en lo absoluto.

[••••]

Estoy feliz, sí.

Y decidí como haré esto, serán como dos partes pero ambas estarán aquí.
Muke como niños y pre-adoledcentes, nO SÉ, ASÍ HASTA QUE CAMBIE DE IDEA.

Estos son rabietas por las que pasa mi primita jejeje

tengan una buena vida