Enséñame a amar (historia lésbica)

Capitulo 7

Los siguientes días serian duros, lo sabía desde ya, estaba lista para ver a Alexa de manera indiferente como una compañera mas, sentía algo de pena al echar a perder todo pero que podría haber salido bien de todo esto? No dejo de pensar que fue lo mejor.

Estábamos en recreo y tomaba café junto a mis compañeros, Alexa estaba lejos hablando con un alumno y yo la veía de reojo. Siempre se ve ben, es muy linda no voy a negarlo.

Cuando mis compañeros se fueron quede sola con Esteban.

-Será mejor que dejes de mirarla si no queres que te llamen la atención

-Que? No la miro de manera especial

-Puedo ver que si, hay mucha química entre las dos...

-Ya no lo creo esteban, se acabó

-Se acabó?

-Si, anoche fue a casa y le dije todo

-Osea, que le dijiste que te gustaba?

-No! Le dije que no quería nada con ella

-Que? Por que?

-Porque asi es, no quiero un juego, ya no estoy para eso

-Y como sabes que Alexa estaba jugando?

-Ay por favor Esteban, es lo mas obvio! Las personas asi no se enamoran.

-Yo creo que todos se enamoran y si Alexa no lo estaba no le faltaba mucho...

-Ya está, no me interesa

-Es una pena... harían tan linda pareja

-Eso no es lo mas importante

-Tal vez no...- Esteban se fue y yo quede viendo la figura de Alexa a lo lejos sin tener ninguna reacción.

Ya en la sala de profesores entro la directora Estela algo estresada.

-Muy bien, para el acto quiero que todos los profesores se sienten juntos.- Estela siempre trataba de hacer las cosas mas organizadas posibles, era algo molesta, pero en fin.

-Y quiero que algunos estén más dispersos para controlar a los niños, en estos actos suelen aburrirse y empezar a molestar

-Es que son muy largos Estela, de hecho yo también hago lo mismo

-Muy gracioso Eduardo, quiero que te sientes con los de primer años así los controlas bien

-Creí que Alexa estaba encargada de todo.

-De casi todo Mirta, los lugares los pongo yo y ella el resto

No veía a Alexa por ningún lado de seguro preparaba algo para el acto que teníamos. Estos actos eran eternos y aburridísimos pero era obligación estar ahí.

Tuve que sentarme al lado de Mirta quien me conversaba sobre sus hijos, su esposo, su madre, sobre todo, a esta mujer le encanta hablar, al menos servía de distracción mientras el acto comenzaba.

Y si como era de esperarse vi a Alexa que solo tuvo que decir unas palabras y se sentó un par de lugares adelante mío, antes de sentarse me miro directo a los ojos pero no de la manera que lo hacia antes me miro casi que podría decir con odio o bronca, yo la mire de la misma manera o al menos eso creo, se sentó y no volteo en todo el día.

El acto era interminable como todos sabíamos, niños y maestros que pasaban leyendo actuando o haciendo lo que sea yo solo quería largarme de ahí. Aunque no podía evitar ver las letras colgadas detrás, eran las que Alexa llevo a mi casa con la excusa de que la ayudara, recuerdo ese momento como si lo estuviese volviendo a vivir ahora mismo, esos labios tan tiernos y suaves y sus manos recorriendo mi cuerpo me daban escalofríos de recordar.