Astrid
— ¿Tus ojos no eran grises?
Oh, Oh. Olvide ponerme los lentes de contacto, ahora si que estoy en problemas...
— Y-yo... — Entro en pánico ¿Qué se supone que deba decirle ahora?.
Él se me queda viendo fijamente esperando una respuesta — A-ah... — ¡Vamos Astrid, piensa! — ¡Uso lentes de contacto! — ¿Enserio? ¡Por qué no se me ocurrió algo peor!.— ¿Usas lentes de contacto? — preguntó confundido.
— S-si... ¿Por qué no?
— No lo sé, tú dime. — Comenzamos otra vez con su sarcasmo.
— Bueno, a nadie le gusta mis ojos azules, y para ser diferente empecé a usarlos — Ni yo me lo creí, comienzo a darme cuenta que soy una muy mala mentirosa.
— Pues, son unos idiotas, ¿a quién no le gustan? Si tienes unos ojos hermosos — me dijo mientras me miraba fijamente.
Esa mirada esmeralda que pueden ver mi atreves de mi alma. ¿Desde cuándo empecé a notar que tiene una hermosa mirada?— G-Gracias — Bien, estoy sonrojada.
¡Controlate! Se supone que debo actuar con normalidad, y no estoy haciendo nada de eso. Ése maldito idiota que está frente mío lo hace difícil, ¿Desde cuándo "cuidar" a alguien se ha hecho difícil? ¡Nunca!.
Bien, debo calmarme, desde que estoy con Haddock no he sido yo misma últimamente... literalmente.
¿Me parece a mí, o se esta acercando más a mí?.Nos quedamos callados, él me ve directamente a los ojos y ¿yo igual? No sé qué es lo que siento, pero creo que estoy sintiendo una atracción hacia él. ¿Será bueno eso?.
Nos vamos acercando cada vez mas... ¡Creo que va a besarme! Lo siento más cerca, puedo apreciar mejor cada facción de su rostro; pequeñas pecas esparcidas por sus mejillas, unas cejas muy bien pobladas, una mandíbula cuadrada. Lo admito, es guapo.
Estábamos más cerca el uno del otro, hasta que se separa de mí bruscamente.— Yo... me quedaré un rato aquí — dijo dandome la espalda.
¿Se ha asustado?.
— Claro... — suspiro, no pude evitar sentir una decepción.
Agarro mis cosas y subo a mi habitación, ¿Se sonrojo y por eso me dio la espalda? Bueno yo también estoy sonrojada, creo que es algo normal cuando te acercas demasiado a alguien. Es raro, me pongo la pijama y me voy a dormir.
Horas después...
Hipo se encontraba durmiendo en el sofá, veía televisión hasta que el cansancio lo dominó y cayó a brazos de Morfeo.
Astrid aún dormía, cuando se levantó por agua, vio a Hipo dormido y se le acercó para despertarlo para que fuera a su habitación y estuviera más cómodo hasta que escucha un ruido.El ruido venía del comedor, se escuchaba como si alguien estuviera ahí buscando alguno de los cubiertos para comer. Se dirige a ver la razón de tal ruido, cuando distingue la silueta de alguien entrar ¡Un ladrón! Pensó ella.
— ¡Hey! — grita.
La silueta la voltea a ver, se le queda viendo unos segundos, y después se lanza contra ella a atacarla.
Astrid cae y queda debajo del intruso, rápidamente ella reacciona y lo golpea con la rodilla haciendo que esté se queje y ella quedara encima de él, lo empieza a golpear, el intruso no se queda atrás y la patea haciendo que ella caiga lejos, esté inmediatamente se levanta sacando un cuchillo para dirigirse dónde se encontraba Hipo para apuñalarlo.
Astrid se levanta cuando ve las intensiones del intruso, corre y se sube a su espalda para alejarlo de él, ambos caen y se levantan quedando frente a frente.Hipo solo se cambia de posición.
— ¡Alejaté de él! — le gritó Astrid — Si es que no quieres salir herido.
— ¿Por qué no me lo demuestras, preciosa? — le reto el oponente.
— Muy bien, si así lo quieres.
Entonces Astrid se lanza contra él y empiezan a pelear, Astrid esquiva los golpes que su oponente le daba, se agacha esquivando un golpe, y le da un puñetazo en el rostro, el intruso le logró cortar un poco la mejilla derecha.
Mientras que Hipo soltaba pequeños quejidos, dando a entender que se iba a despertar.
Astrid se dio cuenta de eso que siguió dando golpes, para ese entonces hipo empezó a despertar, Astrid da volteretas hacia atrás cayendo inclinada enfrente de Hipo.
— Duermete pronto, duermete ya, que viene el coco y te comera la la la la la la la la la — cantó rápidamente haciendo que este volviera a dormir.
Pero en ese instante el oponente la lanza un cuchillo esta inmediatamente lo esquivo, se levanta le da una patada en el estómago haciendo que cayera.
El oponente rápidamente se levanta y se dirige a atacarla.
— ¿Es que acaso no te cansas? — preguntó ya fastidiada.
Lo vuelve a golpear en el rostro, el oponente saca un arma e intenta dispararle, pero esta reacciona rápido y le da una patada en la mamo arrebatandolé el arma, lo agarra y lo lanza lejos, lo patea haciendo que el oponente caiga de retroceso y caiga de la ventana rompiendola a su paso y cayera al suelo del jardín, Astrid se va a la ventana y ve al hombre levantarse e irse.
— Eso pensé.
Al día siguiente...
Hipo despertó con un dolor de cuello y espalda, se dio cuenta que durmió en el sofá en toda la noche, se dirige a la cocina para tomar algo.
Pasa por la ventana cuya noche anterior fue destruida, sin embargo, esta se encontraba intacta.Al entrar a la cocina ve a Alice preparando el desayuno.
Astrid
Anoche si que estuvo cerca, ese rufián casi mata a Hipo, pero por suerte lo derribe antes de que fuera tarde, ese maldito intruso si me dio una buena pelea, rompió la ventana pero por suerte contacte a alguien de la agencia para que la reparara lo más pronto posible antes de que Hipo despertara. También tuve un poco de tiempo para cubrirme la cortada que me había hecho, desde ese momento ya no dormí por cuidarlo, parezco una madre cuidando a su hijo, ahora debo fingir que nada ha pasado absolutamente nada.
— ¡Buen día! — me saludó.
— Buenos días, ¿cómo has dormido? - pregunté para saber si en mitad de su sueño se dio cuenta de algo.
— Un poco incómodo, pero de lo contrario, diría que bien.
He soñado a dos ninjas pelear y uno me cantaba una canción a mitad del combate,¿loco no?.— Si... muy loco — bueno, era casi imposible que no se hubiera dado cuenta.
— Si te soy sincero, he tenido sueños peores. — dijo en voz baja, pero lo suficiente para que lo lograra escuchar.
Su semblante cambió rápidamente, ¿sus fantasmas lo atormentan por las noches?.Sentí un poco de pena, y él se pudo dar cuenta, sin embargo, no dijo nada.
— Yo una vez soñé que estaba dentro de la película de Shrek.
El rió. Bueno, gracioso o no, al menos su semblante triste cambió.
El timbre sonó de repente.
Es muy temprano como para que alguien busque, me dirijo a la puerta para ver quién es. Vaya sorpresa la que me llevo...— Heather...
ESTÁS LEYENDO
Bad Liar || Hiccstrid
Hayran KurguDespués de la traición de su mejor amiga, Astrid es reclutada por una nueva agencia de espías para que sea el guardia personal del millonario Hipo Haddock. ¿Qué pasará en ese tiempo que pase con él? Astrid pasará por muchas cosas a las que se deberá...