Harry Potter y la hija de Draco Malfoy. (Fanfic) EN EDICIÓN

Capitulo 1 El dia esperado

En el mundo mágico, no sólo existen brujas y magos, hay varios tipos de criaturas sorprendentes y extrañas y hermosas, duendes, dragones, fotografías vivientes. Este mundo no es muy diferente del mundo muggle, aquí también la gente se ha clasificado; sangre sucia, hijos mágicos nacidos de padres muggles; mestiza, hijos de un padre mago y un padre muggle; y, finalmente, los sangre pura, hijos de padres magos. La familia Malfoy ha sido por generaciones una de las familias que se ha mantenido pura, pero después de que el Señor Tenebroso desapareció y Lucius Malfoy fue enviado a Askaban, y Draco Malfoy dejó de ser mortifago, este formó una familia junto con Astoria Greengrass, con dos hermosos hijos, Scorpius y Lux Malfoy, dejando uno de ellos en duda y vista de todos... Llevándolos a Hogwarts, la mejor escuela de magia y hechicería donde van los mejores magos.

La luz entraba con dificultada a la oscura sala de la Mansión Malfoy. Esta era húmeda y cubierta por mármol de un color negro, que reflejaba diferentes figuras causadas por la chimenea que era la única fuente de luz en esa parte. Sentada junto a la puerta había una niña, su cabello rubio, casi blanco, le caía como agua hasta llegar a la cintura, su tez pálida resaltaba los enormes ojos azules, los cuales estaban centrados en el único sobre que había en el suelo.
—¡Papá!—gritó ella.
Ella había esperado este día desde los siete años, cuando encantó la escoba de su madre y voló por toda la casa. Su padre le había contado de Hogwarts ya varias veces, y ya que había llegado a la edad de once años, su carta había llegado hasta la puerta de su casa.
—Ya voy Lux, tranquila—respondió su padre mientras bajaba de las escaleras. También estaba en piyama, y su cabello rubio también estaba despeinado, y sus ojos brillaban como estrellas a media noche.
Lux tomó la carta del suelo, que en la parte de atrás tenía escrito, con una tinta color esmeralda, la dirección de su casa, el nombre de la escuela y su nombre. Se la enseñó a su padre, que enseguida la tomo de la cintura y le dio un fuerte abrazo. Por fin estaba adentro, podría ir a Hogwarts, como siempre lo había querido.
Lux comenzó a leer su carta:
"Querida Srta. Lux Malfoy,
Nos complace anunciarle que usted ha cumplido los once años de edad y tiene los talentos necesarios, ha sido aceptada en la Escuela de Magia y Hechicería  de Hogwarts. Encontrará ajunta una lista de todos los libros y equipos necesarios.

El curso comienza el 1 de Septiembre. Esperamos su confirmación para no más tarde del 31 de Julio.

Atentamente,

Minerva McGonnagall."

Lux saco la carta adjunta y leyó:
"-Libro de defensa contra las Artes Obscuras. Volumen I, Saucus Esmeraldo.
-Libro de herbolaria, grado I- Longbottom Neville.
-Libro de hechizos y pociones, Volumen I, Liviano Peter.
-Pociones y más pociones, Volumen I y II, Salazar Slytherin. (2017)
-Varita.
-Túnica y sombrero.
-Caldero del número II.
NOTA: los estudiantes pueden llevar mascotas como lechuzas, sapos, gatos o ratas. "

Su mamá bajó del piso de arriba, junto con su hermano Scorpius, que tenía un gesto de disgusto y envidia. Siempre había sido un niño mimado, al igual que su hermana, pero su carácter era más egocéntrico e intenso.
—No hagan tanto alboroto por algo tan simple.—comentó poniendo sus ojos en blanco, pero Lux estaba tan feliz, que decidió no darle importancia al comentario de su hermano.
—¿Sabes a dónde debemos ir ahora?—preguntó su padre sonriendo de oreja a oreja.
—Al callejón Diagon.—respondió Lux, sonriendo de la misma manera.

La familia Malfoy siempre había sido de las familias más ricas del mundo mágico, y no necesitaban viajar por medio de polvos flu, y gracias a que su padre había sido un gran jugador de quiddich, -o eso es lo que él decía-todos tenían una escoba último modelo, una Nimbus 2017.
Tomaron sus escobas y volaron hasta al Callejón Diagon, en donde aún se sentía el ambiente de magos y brujas, sin importar cuánto tiempo haya pasado.
Aterrizaron al lado del banco Gringotts, que era una estructura blanca muy grande, donde solo trabajan duendes. Ellos sabían a donde ir, pues no era la primera vez que los Malfoy viajaban a aquel mágico lugar.
Decidieron que primero irían por sus libros, después por su varita, irían por algo de dinero a su caja fuerte, y finalmente conseguirían su mascota.
Scorpius acompañó a su hermana hasta la tienda de libros, donde él le ayudaba a buscarlos de mala gana.
Todo iba bien, hasta que Lux se topó con un señor de cabello marrón y ojos color azabache.
—Lo siento señor—se disculpó Lux.
—No hay cuidado pequeña—respondió aquel con voz suave.
A Lux se le hacía muy gracioso que ese señor usara lentes tan redondos y grandes, y creía que ya lo había visto por alguna parte.
Lux siguió buscando sus libros, sin percatarse de que, a un lado de ella, su hermano se peleaba con alguien.
—Pero miren quien es—dijo la voz de su hermano—Si eres James Potter, creí que no regresarías por tus libros, ya sabes, para volver a Hogwarts.
—Pues al parecer tus deseos no se cumplieron Malfoy, me quedaré en esa escuela el tiempo que yo quiera—respondió el chico de nombre James.
Lux ya había escuchado hablar de los Potter varias veces en la radio, pero sus padres nunca los mencionaban. Ella siempre había sido muy curiosa, y que sus padre no le contarán lo que necesitaba saber, la incitaba a saber aún más, pero nunca investigó a los Potter, y menos por la forma en la que hablaba su hermano de ellos.
—¡Scorpius!—le gritó Lux, con la intención de que dejaran de discutir.
Scorpius se giró de mala gana y se volvió con su hermana.

Después de haber comprado todos sus libros, los Malfoy fueron a Ollivander's, a comprar la varita de Lux.
Al entrar a la tienda, un chico de edad adolescente se acercó a ellos y los saludo con amabilidad.
—Bienvenidos a Ollivander's, déjenme presentarme, soy Ollivander III, y yo les ayudaré a encontrar su varita. Por favor, díganme el nombre del que va a comprar.
—Lux Malfoy—dijo la pequeña con voz suave.
—Una Malfoy eh...—Dijo el joven buscando entre sus estantes una varita perfecta para Lux. —Me han contado sobre ustedes, vinieron aquí... Hace dos años ¿cierto?
—Si.—respondió Scorpius orgullosamente. —Por mi varita.
—Ya veo.—dijo, y regresó con una caja con un pequeño rectángulo rosa en el frente. —Esta es la correcta, estoy seguro.—dijo, dándole la caja a la pequeña Lux.
Ella la tomo con nerviosismo y la abrió. Era una preciosa varita, color negro, con el mango dorado, incrustado con diamantes color magenta y flores talladas en el cuerpo.
—Anda, pruébala.—la animó su madre, orgullosa de ella.
La tomo por el mango, que a pesar de los diamantes, era muy liviana y fácil de agarrar. Ésta, al momento, dio un gran destello amarillo.
—Como decía mi abuelo, el mago... No, era... La varita no escoge... ¡Bah! ¿Qué más da? Es tuya, espero que te sea útil por el resto de tu mágica vida.
—Gracias señor Ollivander.— dijo Lux.
—No hay de qué pequeña. ¡Por cierto! Es un regalo, por tu primer año en Hogwarts.
Lux miro a su papá y sonrío.

Finalmente se decidieron por ir al banco por el dinero de Lux, pero ella decidió esperar afuera, pues los duendes no le daban muy buena espina.
Mientras esperaba sentada en un escalón, se dio a la tarea de contar cuantas brujas llevaban sombrero, y cuantos magos llevaban capas ; cuales magos se veían de dinero, y cuales no; cuantas brujas y magos tenías padres muggles, y cuales no.
Su padre le contó que la casa de Slytherin siempre había pertenecido a los sangre pura, y que las demás casas eran de los sangre sucia. A Lux realmente no le importaba quién tenía padres muggles, o quién era de padres magos, o mestizos, simplemente quería pasarla bien en la escuela.
Cuando finalmente salieron sus padres junto con su hermano del banco, fueron por la mascota de Lux.

Entraron a una tienda donde habían varios tipos de animales, desde
Los más normales, como perros, gatos, ranas, lechuzas y ratas, hasta hipogrifos, dragones y otras cosas que Lux no reconocía.
Su padre le dijo que se tapara los ojos, y que le daría una sorpresa. Al destaparlos, se encontró con una jaula, donde adentro se encontraba una pequeña lechuza con plumas doradas y ojos azules color cielo.

Después de haber conseguido todos lo que necesitaban para la escuela, volvieron a la mansión Malfoy, y Lux espero con ansias hasta que llegara el día 1 de Septiembre.
Entre más cerca estaba el día, más lento se pasaba el tiempo.
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Este es el fin del primer capítulo ☺️ por favor díganme lo que piensan y ayudenme con un 👍🏻

Adiós 👋🏻🤗