Harry Potter y la hija de Draco Malfoy. (Fanfic) EN EDICIÓN

Capitulo 3 El sombrero seleccionador

Lux aún se preguntaba en su interior por el comentario que había hecho Lorcan Longbottom acerca de los Potter, ¿qué es lo que todo el mundo sabía que ella no? ¿Su padre en verdad fue tan malo como todo el mundo decía?

Cuando por fin llegaron a Hogwarts, los formaron a todos en una pequeña sala, donde los niños y niñas hablaban de su experiencia en el verano, o los nuevos de cómo fue que brotó su magia y los hijos de muggles acerca de lo loco que sonaba todo el mundo mágico.
Rose hablaba de cómo fue que se creó Hogwarts, los directores y como se habían creado las casas. También hablaba sobre su familia y de todas las aventuras que pasaron durante sus años de estudiantes.
A Lux le parecía un poco molesta, pero le gustaba aprender tantas cosas, que Rose era la solución para eso.
Albus también hablaba de su padre, ya que él había derrotado a Lord Voldemort, que en su época, era el mago más temido de todos.
A pesar de la rivalidad entre las dos familias, a Lux siempre le pareció impresionante como Harry Potter fue capaz de sobrevivir y pelear hasta ganar.

Finalmente, una señora, de edad avanzada, salió de una puerta, tenía una túnica rosa que le llegaba a los pies, y su cabello era anaranjado, parecido al de Rose, le caía por los hombros.
—Muy bien— dijo con una voz suave —Por favor todos, síganme.
Todos siguieron a aquella señora hasta una gran puerta.
A Lux no le cabía en la cabeza como era que un castillo pudiera ser tan grande, y aun después de ser reconstruido.
La señora abrió la gran puerta y dentro de ella se encontraban cuatro mesas enormes llenos de niños y niñas con túnicas iguales a los que ellos traían puestos, pero con el color y escudos de sus casa bordados.
Al final del lado izquierdo del Gran Comedor, Lux pudo apreciar el escudo verde con la serpiente de Slytherin, y a su hermano sentado portan dolo en su túnica.
El Gran Comedor estalló en gritos y aplausos, pues los recibían con alegría.
—Ahora deténganse aquí por favor— dijo la señora.
Había una pequeña silla al lado de ella, con un sombrero que parecía ser más grande que cualquier otro común, y detrás, se encontraba la mesa de profesores, todos con los ojos fijos en los nuevos estudiantes.
La señora de túnica rosa tomó un pergamino de la mesa, que le había dado otra señora de túnica verde. Aquella señora era la directora de Hogwarts, Minerva McGonagall.

Ésta se acercó al estrado y los observó a todos y cada uno.

—Bienvenidos a la Escuela de Magia y Hechicería de Hogwarts. Espero que la estancia y educación de la magia en esta institución forme a brujas y magos de excelencia. Como todos los años les platicaré de las reglas de esta escuela y honraremos a las víctimas de la Batalla de Hogwarts, que sin su sacrificio y valentía, jamás hubieramos triunfado. En primera, entrar al bosque prohibido que está a las afueras de la institución es severamente penado y se dará un mes de detención a quien se encuentre en esta zona. Ningún estudiante puede estar fuera de su sala común a partir de las 9 de la noche y, cualquier uso de artefactos muggles modernos quedan sancionados, al igual que las dichas "redes sociales", ya que exponernos al mundo es un gran riesgo para todos.

Dicho eso, el grupo de coro entonó una hermosa canción, mientras en grande se leían los nombres de las víctimas de la batalla.

—Bien, ahora la Profesora White Wembley, mencionará sus nombres y ustedes pasarán a sentarse aquí, les colocará el sombrero seleccionador, y él dirá en que casa quedarán.

Lux no estaba nerviosa. Estaba feliz, pues estaba segura que su casa sería Slytherin.

—Lysander Logbottom.
En la parte de la mesa de los profesores, estaba el profesor de herbolaria, que sonreía de oreja a oreja.
Lysander tomó una bocanada de aire y se acercó a la silla.
Aquel sombreo le cubría el rostro hasta los ojos, y se veía tan gracioso que Lux reía en silencio.
—Uhm....- empezó a decir el sombrero con voz grave —Un Longbottom... Qué sorpresa. Creo que esta es fácil, te pondré en... ¡GRYFFINDOR!
La mesa que estaba a un lado de la de Slytherin estalló en aplausos y gritos, al igual que su padre, y Lysander felizmente se acercó a ella y se sentó. Su hermano, Lorcan, había tenido la misma suerte.

Pasaron varios nombres, hasta que llamaron a Rose.
—¡Gryffindor!— gritó sin especular con su voz ronca y gruesa.                                                                       De nuevo la mesa estalló en gritos y aplausos.

Al final solo quedaron Albus y Lux. A Albus se le notaba nervioso, pues tenía miedo que el sombrero lo colocara en la casa de Slytherin.
—Albus Severus Potter.
Se acercó lentamente hacia la silla y se sentó en ella. El sombrero comenzó a hablar dentro de la cabeza de Albus, tomándose su tiempo.

Después de unos segundos, el sombrero finalmente gritó.
—En honor a tu padre... ¡GRYFFINDOR!
De nuevo aquella mesa estalló en aplausos y gritos de alegría, y, finalmente era el turno de Lux.
—Lux Malfoy.

Ahora sí estaba nerviosa, todos sabían quién era ella y parecían conocer bien a su familia.
Se sentó en la silla y le pusieron el sombrero, que sólo la dejaba ver oscuridad.
—Oh....— fue lo único que dijo el sombrero, no dio ningún discurso, ni tampoco hizo un sermón, simplemente a secas dijo en voz baja —Gryffindor.

Su corazón empezó a latir a mil por hora, y esta vez no hubo aplausos, ni gritos de alegría, solo silencio y preguntas susurradas como "¿Una Malfoy en Gryffindor? ¿Qué le pasa al sombrero?"
Lux se acercó lentamente hacia la mesa de Gryffindor, y sentía todas las miradas sobre ella. ¿Por qué el sombrero le había hecho esto? Ella lo sabía, nadie en su sanidad hubiera esperado a una Malfoy en Gryffindor, ella debería estar con su hermano a donde pertenecía. Ella pertenecía a Slyhterin.

Se sentó a un lado de los Potter, quienes la miraban con confusión.                                                              —El sombrero debe haber cometido un error— comentó Lorcan.                                                          Lux decidió quedarse callada. Estaba demasiado preocupada pensando en lo que su familia haría cuando se enterasen.

La profesora McGonagall se acercó de nuevo a su estrado y comenzó a hablar, tratando de disimular su confusión.
—Muy bien, ahora que todos están en sus respectivas casas, que comience el banquete— dio un aplauso y toda  la comida apareció frente a ellos.
Pollo, ensalada, dulces y más.
Lux sabía que su hermano la miraba con más odio del que ya le tenía, pero no volteo, solo se limitó  a estar en silencio. No tenía apetito, y sentía que si daba un bocado a su comida, la devolvería en seguida.
—Es genial que el legado de los Potter siga entre nosotros— comentó un chico que estaba al lado de James y enfrente de Lux.
Sus padres la habían llamado así en honor a su abuelo, Lucius Malfoy.
—Hey, Lux— susurró Albus que estaba a un lado de ella —¿Estás bien?
Ella sólo asintió con la cabeza.
—¿Cómo es que una Malfoy entro aquí eh?— preguntó el mismo chico que hablaba con James. Tenía el cabello muy corto, y facciones muy extrañas —Digo, ellos han estado en Slytherin por generaciones, esto es muy extraño.
Lux simplemente bajó la cabeza e intentó sostener sus lágrimas.

--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Este es el final del capítulo 3 ☺️
Apóyenme con sus votos y que tengan un lindo día 🤗🤗 ya está gracias a @Imnotmuggle21 por las correcciones