Capítulo 21

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Rick Grimes;

Abrí los ojos lentamente, pesaban más de lo normal. Lo primero que vi fue una pared descompuesta, allí fue cuando bajé la mirada y me encontré una cama... En la que estaba Daryl, recostado a mi pecho.

- No fue un sueño - Me dije a mi mismo en aquel oscuro ambiente.

Sentí una pierna de Daryl encima de mi muslo; su tacto me hizo recordar cada pequeño detalle de lo que había pasado el día anterior.

- Oh Daryl - Suspiré en su cabeza, así moviendo cada uno de sus lisos y suaves cabellos.

Una de mis manos estaba rodeando al arquero, con la otra levanté un poco la sabana y noté que estábamos completamente desnudos, pues, claro que los estaríamos.

Mi mente quería llevarme a aquella escena otra vez, pero hacía lo posible para que eso no pasara; Terminaría excitado otra vez.

Mientras veía a Daryl en mis brazos no podía parar de pensar en cómo estaría él... Dijo que le dolía mucho y me imagino que hoy le dolerá mucho más. Mierda, lo que menos quería era hacerle daño.

Mis ojos se enfocaron en una ventana que estaba tapada por trapos, por lo tanto, no sabía qué hora era. La curiosidad me mataba, tal vez ya estaba atardeciendo, si eso pasa no podríamos volver hoy; Y tenemos qué.

- Ya vuelvo - Susurré sin importar que no me pudiera escuchar.

Aparté las sábanas de mi cuerpo, para levantarme silenciosamente. Hacía un frío horrible, que me afectaba más ya que estaba completamente desnudo. Tomé mi pantalón, que estaba en el suelo, y me lo puse con cuidado, para que Daryl no se despertara por el ruido de el cinturón.

El suelo estaba más frío aún así que tuve que ir en puntillas hasta aquella ventana. Con mis dos manos quité aquello que no permitía apreciar la vista del exterior, así dejando ver las afueras del hotel.

- Mierda - Solté, al ver las calles repletas de caminantes.

No quería despertar al cazador, pero tenía que hacerlo... Tenemos que irnos antes de que encuentren alguna manera de entrar y no tengamos salida alguna.

Terminé de abrochar el cinturón de mi pantalón y me acerqué a la orilla de la cama, para luego recostarme en ésta.

- Daryl - Lo llamé, sin bajar la voz.

Ni se movió - Daryl, despierta - Me empezaba a preocupar, ya que, desde afuera solo podía escuchar aquellos sonidos que tanto odio.

Como no obtuve resultados, me incliné a el y tomé su brazo para tambalearlo, con poco cuidado - Uuugh - Sollozó, entre dormido.

- Vamos cariño - Le dije, esperando que se animara para salir de la cama.

Abrió los ojos y miró a los lados, como si no entendiera nada. Por último me vio y sonrió. Me levanté de la cama y me enderecé, él intentó moverse para al menos sentarse pero hizo un sonido de dolor y cayó rendido - No puedo - Dijo.

- Daryl, hay caminantes por todos lados... Intentalo, por favor - Le pedí, la angustia comenzaba a consumirme.

Estaba siendo un idiota, ayer había tenido sexo con el y hoy quiero que camine como si nada hubiera pasado, pero, esto es cuestión de vida o muerte... Supongo.

- Bien - Apoyó los brazos en la cama, con fuerza, para luego mover cada pierna con cuidado.

Verlo así me daba dolor a mi también, entonces me acerqué a el y lo ayudé a sentarse. Estaba desnudo así que mientras él se preparaba para caminar, yo tomaba sus prendas de ropa.

Te necesito | RickylDonde viven las historias. Descúbrelo ahora