Te necesito | Rickyl

Capítulo 8

Daryl Dixon;

Toda la tarde estuvo tensa, entre todos.
Shane es un asco y Lori es una perra, es lo que sé... Me imagino como debe estar Rick; destrozado. No puedo evitar sentir lástima por el.

- Hola Daryl - Saludó la canosa, para luego sentarse a mi lado.

- Hey - Saludé simple.

- Déjame ver tus manos - Dijo mientras tomaba mis dos manos, asentí con la cabeza baja.

Carol se sorprendió a ver los nudillos de mis manos rotos, con un poco de sangre. Golpeé a Shane con tanta furia que... Me hice daño a mi mismo, cosa que, da igual.

- Oh Dios... ¿Te duele? - Preguntó un poco tímida mientras tocaba mis nudillos, giré la cabeza a los lados lentamente, negando.

- Estoy bien - Murmuré un poco avergonzado por esa escena tan íntima.

- Rick también lo está - Comentó con una sonrisa en la cara.

Me quedé callado... Rick no está bien, luego de lo que vio obviamente no está bien, para nada bien, eso lo sé. Más que la paliza que le dio Shane, le dolió ser traicionado por su esposa y su mejor amigo. Pobre Rick, no se merece nada de esto.

- Voy a orinar - Usé mi típica excusa, me levanté y caminé hacia mi carpa.

Cuando llegué a mi zona noté que empezaba a anochecer así que prendí la fogata y me senté en el suelo en frente de el fuego, para pensar un poco.

Rick está en la casa, Hershel lo curó y se quedó dormido. Luego el anciano curó a Shane y éste se fue con Lori, esa si que es una perra.

De pronto vi a alguien acercándose, de lejos no supe quien era; llevaba una botella en la mano.

- ¿Rick? - Pregunté un poco confundido, al parecer se despertó.

- Hey Daryl - Saludó con una voz quebrantada y débil, una mirada de temor y dolor. Pobre Rick.

Me le quedé mirando, con lástima. Su aspecto demacrado y depresivo me quebró por dentro.

- Mira lo que traje - Se sentó a mi lado en el suelo y me dio la botella que traía en manos.

- Agua ardiente - Dije al ver la botella.

- ¿De dónde la sacaste? - Pregunté interesado. Ya no es tan sencillo encontrar alcohol en el fin del mundo.

- Hershel tenía varias botellas escondidas - Dijo mientras sonreía, obviamente, una sonrisa falsa.

Me le quedé mirando, abrió la botella y se la bebió a pecho. No lo pensó dos veces, él solo bebía todo lo que podía... Verlo así me lastima, de verdad.

- ¿Sólo te quedarás viendo? - Preguntó un poco enojado y volvió a tomar, luego me la pasó a mi.

Bebí poco. No podemos ser dos borrachos contra el mundo, así que me quedaré consciente por si Rick se vuelve loco y le dan ganas de ir a matar a Shane o a Lori.

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Rick dio el último trago y se me quedó mirando por unos minutos, cosa que, me incomodó un poco... Pero no me quejaba.
Rick ya debe estar inconsciente así que debo estar alerta de sus actos. Parezco su madre, de verdad.

- Daryl, yo... - Su lengua se trababa, cosa que me provocaba risa - Quiero ir al bosque - Terminó la frase con una voz muy descontrolada.

- ¿Al bosque? - Rick tiene unos antojos muy extraños... ¿Debería llevarlo? Está borracho pero después de todo debo ayudarlo.

- Vamos - Se levantó tambaleante y me dio la mano para que me levantara.