Capítulo N°13

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Nuestro vuelo fue con destino Dallas. Ahí, según Evans me había dicho poco antes de abordar el avión, era el último lugar en donde lo habían visto. Por un lado, me sentía desconfiada. ¿Cómo era que, de pronto, tuviera tantos contactos en Estados Unidos? Tiempo atrás, cuando trabajábamos en CalTech, me había comentado que esa era su primera vez en el país... ¿Amigos de internet? Hoy en día todo eso era posible, pero, ¿cómo conocían a Sheldon? No entendía nada.


Recorrimos las calles en un automóvil que alquiló llegando a la ciudad. A medida que las horas iban pasando, me iba preocupando más por no encontrarlo. ¿Y si ya se había ido de Dallas?... Repentinamente, el teléfono de Evans rompió el silencio dentro del automóvil.


- Hola, ¿qué sucede?... - contestó con el manos libres, hubiera preferido que pusiera el altavoz - ¿En dónde?... Bien, vamos para allá... - entonces, cortó.


- ¿Qué pasa?


- Lo vieron a unas calles de aquí - me respondió mientras daba la vuelta para cambiar de dirección.


Mis latidos volvieron a acelerarse. Me sentía nerviosa, un poco asustada quizás. No sabía con qué me podía encontrar. Lo vimos a lo lejos, pegando lo que parecían ser carteles, a las afueras de un callejón.


- Detén el auto - le dije, mientras desabrochaba mi cinturón de seguridad.


- Puedo aparcar más adelante...


- No, aquí está bien - hizo lo que le pedí, entonces, añadí antes de bajarme - Espérame aquí, por favor, no quiero empeorar las cosas.


- Bien - asintió algo serio.


Salí del automóvil y me acerqué rápidamente a él. No se había dado cuenta aún de mi presencia hasta que lo llamé...


- ¡Sheldon!


Me detuve en cuanto volteó. Por unos segundos no hubo ninguna clase de interacción entre nosotros, hasta que él se acercó a abrazarme en total silencio. Sólo un abrazo, eso era todo lo que necesitábamos en ese momento. Yo me decidí a romper el silencio luego de un rato...


- Sheldon, ¿qué haces aquí?


- Estuve buscándote... Prometiste que no te irías más... - sus ojos se habían humedecido un poco.


- Lo hice porque creí que iba a ser lo mejor para los dos. Pero jamás quise que dejaras todo atrás...


- Sólo quería encontrarte... ¿Dónde estabas?


- En París... - su expresión pasó de preocupación a seriedad, continué - Evans me convenció para que lo acompañara. Me dijo que era mejor alejarme.


- ¿Ustedes son... novios? - bajó su vista con decepción.


No es nada más que tiempoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora