Girls like Girls

Un viaje largo

Durante el verano fui a pasar las vacaciones en la casa de mis primos en Miami. No era porque quisiese, sino porque mis padres me obligaban a ir, ellos dicen que debo mantenerme alejada de los libros y empezar a formar un vinculo social con personas de mi edad.

No me mantuve atenta del tiempo en el que iba al auto viajando, pero por la hora que enseñaba la pantalla de mi celular habían pasado mas de doce horas. Sentía como mi espalda y trasero y todo lo que alla detrás de mí se iba amortiguando del dolor.

-Por favor dime que ya llegaremos en poco tiempo

Mi voz resonó en el silencioso auto. Veía inquietante a la cabecera trasera del asiento de mi padre esperando una respuesta.

-Es tu día de buena suerte ya que ya llegamos.

Estacionó el auto frente a una casa de tres pisos color ladrillo. Fruncí el ceño.

-Y quien vive aquí?

Pregunté sin dejar de observar la construcción.

-Nuestros primos, te repetí mas de diez veces en el viaje que se habían mudado recientemente de zona en la ciudad pero estabas más concentrada en escuchar aquella musiquita tuya en los audifonos.

Regaño mi madre interviniendo.

-Ey, tu sabes que si no escucho música en un viaje no sobrevivía todo el trayecto

Me defendí mientras bajabamos del auto.

Cada uno agarro sus maletas y caminamos tambaleandonos unos a otros por el peso, especialmente yo ya que mi mamá me obligo a llevar la maleta más grande con la típica excusa "no quiero que me reclames que te falte ropa y uses la mía"

Si, suelo "pedir prestado" ropa de mi madre a veces. ¿Quién no lo hace?

Nadie Coley

Intervino una voz en mi mente. De esas voces que siempre te contradicen.

En fín, sin hacer más rollos. Saludamos a nuestros primos, mis padres como siempre contando las nuevas novedades mientras yo solamente corrí por las escaleras hasta la habitación que se suponía que era mía pero algo cliché pasó y entré a la equivocada.

Donde había una chica sin playera, que desconocía totalmente. Mi piel se tornó pálida. No hice ninguna movimiento, parecía que mis pies estaban enterrados en el suelo ya que no podía voltear e irme. Simplemente me quede allí estancada.

La chica me observó fijamente, pero ni si quiera tuvo una pizca de molestia, ni si quiera le importó que yo le haya visto semidesnuda pero no nos conocíamos y era muy incómodo para mí.

Arqueó su ceja esperando una explicación. Utilizaré el plan Z, no es A porque los planes A nunca funcionan así que el plan Z suena bien ¿cierto? Mi plan consistía en disculparme por entrar así y girar e irme. Fácil. Bien lo haré.

-Disculpam..

-¿Quién eres?

Me interrumpió bruscamente mientras seguía sin playera. Qué clase de chica es, ¿porqué no puede ponerse una playera? Aunque debo admitirlo, parece que la chica iba al gimnasio todos los días porque su abdomen era totalmente liso y plano y tenía unas curvas impresionantes y...basta!

Otra vez la voz mental.