El Reencuentro

Capítulo 20

POV Tom

Corrí hacia la pieza de William, justo en ese instante estaba confundido con migo mismo. Necesitaba de alguien con quien charlar.

Al momento de salir de la habitación de Bill no podía dejar de pensar en sus ojos.

Toque la puerta un par de veces, al instante mire su cabello rubio desalineado, algo extraño en el. Se hizo hacia un lado invitandome a pasar y eso hice, entre y fui directo hacia la cama me acosté a lo largo de ella y pronto sentí el peso de alguien más.

-¿Qué pasa Tom? Ya es algo tarde - Bostezo mientras estiraba su brazos tratando de tocar la pared de detrás de nosotros.

Algo nervioso toque mis trenzas y suspire mientras recordaba lo que había pasado hace unos momentos.

-Estoy confundido, muy confundido.

Junto sus cejas en una expresión de obvia confusión - ¿Confundido? ¿Podrías explicarte un poco más?

-Me gusta alguien, más de lo que quisiera.

-Pues eso es algo bueno, por fin sientas cabeza, espero ella sea la definitiva.

Trage en seco y mire hacia mis manos, las cuales se encontraban entrelazadas. En mi mente buscaba la forma más eficaz en la cual decirle a William que la persona por la cual me estaba fijando más era en un chico.

- No recuerdo si te lo dije pero la persona que me gusta no es una chica, por más que quisiera.

-¿Eh? ¿Tom? ¿Qué tratas de decir? ¿La persona que te gusta es?...

-Si Will, es un chico.

Me miró sorprendido y confundido, rasco brevemente su brazo izquierdo y sonrió mirando hacia el vacío.

-¿Estas seguro de que te gusta? -  Preguntó y  afirme viendolo a los ojos -¿Qué es lo que te gusta?

-Su forma de ser tan... extraña, sus ojos, su cabello sus labios...

-¡¿Sus labios!?  ¡¿Eso quiere decir que ya lo besaste!? 

Mis ojos se abrieron de par en par para luego mirar aleatoriamente la habitación. Mi idea era no darle detalles, pero aquello no podría ocultarlo.

-¿Hay algún problema con eso?

-Sabes que no, ahora - Hizo silencio un par de segundos mientras juntaba sus dedos y lo ponía arriba de sus pecho, se sentó de golpe y me miró desde arriba - ¡¿Quien es el afortunado!?

-Eres un chismoso, idiota - Me reí por la expresión que puso, un golpe me hizo callar y frotar con mi mano el lugar adolorido, mi hombro - Hey no tienes que ser violento - Me fulmino con la miradas y entendí - Bien, te diré, ¿Recuerdas a el chico de hace un par de años? ¿El de cabello negro que fue a tu casa conmigo?

-Obviamente lo recuerdo, era una copia mia en la adolescencia, claro sin tantos tatuajes, pero nos parecíamos ¿No el ahora es el cantante de Tokio Hotel?

-Si, lo es, pero eso no viene a el caso, el es el chico que... me gusta. Esto me parece estúpido, pero no se que hacer, ayúdame.

-¿En que podría ayudarte pequeño? - Me preguntó mientras reía silenciosamente.

-No lo se, no se que hacer - Me encogi de hombros y me recoste mejor en la cama, ocultando mi rostro en la almohada.

-Mhm, empieza por contarme lo que sientes a el verlo.

-¿Lo que siento?

-Pues no lo sé - Hizo una pausa mientras tocaba su frente - Al verlo te sientes ¿alegre? O  ¿más positivo de lo normal? .

Recordé la primera vez que mire a Bill, tan  vulnerable y sólo. Cuando peleabamos por el control de la televisión, cuando ponía su mirada furiosa y mordida su labio cada vez que me reía de su cabello, cuando comíamos en silencio para después reírnos como idiotas. Recordé lo bien que me sentí cuando vivíamos juntos. Y ahora que no lo estamos, cada vez que lo veo sonreír o reír a lo lejos.

-Si, eso es justo lo que siento.