Doce

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Yena quiso tomar una bandeja de comida y estrellarla contra la chica pero yo tenía algo mejor en mente.

Caminamos hacia los chicos. Yena abrazo a Junior por la espalda dandole un beso dulce, rozando la punta de sus labios con los de el. Yo abrace a Jared por la espalda y la bese directamente en la boca, el me tomo por el cuello atrallendome hacia el. Las chicas observaron a los chicos con el ceño fruncido y los brazos cruzados. La chica pelirroja se aclaró la garganta para luego decir:

-Disculpa, perra, el chico esta con migo.

Deje de besar a Jared. ¿Esa tipa me dijo perra?

-Disculpa, idiota, el chico es mi novio por si no te habías dado cuenta.

-¿Y el otro chico también viene contigo?

-Nop, el es la pareja de mi amiga-Yena movió sus dedos en seña de saludo-Y a ella no le gusta,-me aclare la garganta-mejor dicho, a nosotras no nos gusta que perras putas como ustedes se metan con nuestros chicos. Así que, adiós idiotas.

Las chicas cruzaron miradas y se alejaron de nosotras moviendo sus enormes traseros hacia una mesa alejada. Jared me observó por unos minutos para luego decirme:

-¿Celosa?

-No, nada que ver. Solo, protejo lo que es mio.

-¿Y yo soy tuyo?

-Si

-Vas a tener que demostrarmelo

-Te prometo que te lo demostrare,-Jared me iba a besar de nuevo pero puse mi mano sobre su boca para poder continuar-pero, tu tienes que hacer un esfuerzo para arreglar el lugar muy romántico para que te lo haga rico-reí picara

-mmm, eso es lo que quiero.

Alguien se aclaró la garganta sacándome se mis pensamientos perversos. Junior y Yena nos miraban con el ceño fruncido. Intercambiaron miradas y luego se fijaron en nosotros otra vez.

-Estamos en un restaurante-dijo Junior-no un motel. Y estar escuchando el como van a tener sexo me esta dando náuseas.

-Coincido con Junior-dijo Yena

-¿Quieres irte de aqui?

-Claro

Junior le tendió la mano a Yena para que luego ambos salieran del restaurante, dejándonos solos a Jared, a mi y a las dos chicas que lo seguían viendo.

-¿Que miras?-le pregunto a Jared quien tenía los ojos posandos en la mesa de las chicas

-Nada, solo, examinó el lugar

-¿El lugar o a las chicas?

Se volvió a verme-¿Estas celosa?

-No, solo quiero que me presentes a las chicas, se ve que estan buenas

Jared frunció el ceño, claramente confundido.

-Claro que estoy celosa-continúe-hace unas cuantas horas dejamos en claro que soy tu novia y tu ya estas viendo a otras chicas

-No las estoy viendo. Madelin, ellas no son nada comparadas contigo

-Yo no soy nada comparadas con ellas. Miralas, ellas tienen un excelente cuerpo, hermoso cabello y ojos claros.

-Mad, tu eres única. Ellas pueden ser muy hermosas pero tú... tu eres la única chica que en verdad me ha importado y lo hará para siempre. Te quiero mucho y se que tu me quieres pero tienes que aceptarlo. Soy hombre y es un instinto ver a las chicas como es tu instinto ver a los chicos. Creíste que no note cuando entramos al restaurante y observaste los bíceps de Junior y otro lugar más.

Me quede calla, si lo notó.

-Pero a comparación de ti, yo lo vi por un minuto y tu hablaste, tomaste su mano y la sigues viendo.
-Pero a ellas las veo con ojos de atracción por ser monas pero a ti te veo como el amor de mi vida, te veo con ojos de amor.

-Podrías intentar dejar de verlas, por favor.

-Claro, te veré a ti. En tu dirección la vista es más placentera.

-No lo creo, si te imaginas a alguien más bonita tal vez

-Tu eres hermosa, y me deleitó al verte.

Eso fue suficiente para que mi corazón palpitara a mil por hora. Eso fue lo más hermoso que Jared me ha dicho, nunca pensé que el pudiese ser así de romántico.

Jared y yo caminamos por Central Park, comiendo unas deliciosas crepas de dulce de leche. Era hermoso ver los árboles de un color amarillo y anaranjado del otoño, caminar tomada de la mano de Jared, caminando por un largo y hermoso camino bañado hojas secas, con el aire fresco soplando en mi rostro. Esto era lo que era, lo que siempre quise, lo que tengo y aprovecharé hasta que termine.

Recibí una llamada. Observe la pantalla de mi móvil, Coley me estaba llamando. Contesté.

-¿Mad?-dijo mi hermano

-Coley, ¿Cómo estás hermano?

-Bien, Mad, te olles distinta

-Creo que es por el maldito hombre que tengo a mi lado-bese la mejilla de Jared

-Bueno, me alegro que ese tipo te este cuidando pero te necesito aqui, unos días nada más.

-¿Para que?

-Para que me ayudes con la chica de mi vida

-¿Quien?

-Astrid

-¿Que pasa con ella?

-Vino a visitarme y no se que hacer. Hermana, te necesito, si quieres trae a tu novio pero ven

-¿Puedo llevar a Yena?

-Claro, no hay problema pero ven rapido

-Estare ahí a más tardar mañana

-Gracias. Ya me hacías falta

-Te fuiste hoy, no quiero estar tan apegada a mis hermanos

-Lo sé, pero te extraño. Adios pendeja

Me colgó. Bueno tengo que arreglar maletas, otra vez. Me volví a ver a Jared con mirada firme.

-¿Que pasa?-me pregunto

-Nos vamos a Tarlend

Y nos fuimos a arreglar las maletas para irnos a Tarlend, esto seria divertido.

¿Mi Mejor Amiga?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora