¿Mi Mejor Amiga?

Dieciocho

Dieciocho:

Ya llevo 20 veces llamando a Alan, siempre me manda a búzon. Desde el desayuno de hoy que no lo veo, se fue sin dirigirme la mirada y no se despidio de mi. Mimi y Richard se quedaron más tiempo que el, estuvimos hablando, comiendo y bromeando sobre los gustos de Richard. Dijo que mi hermano estaba como para chuparse los labios y que si podía lo violaba. Mimi y yo reimos como locas hasta que Yena y Junior se unieron, Yena comenzo a juzgar a Richar y le dijo que los poco hombres no se juntaban con nosotras. Mimi y Richard se molestaron, al igual que yo, no tenía ningun derecho de tratar a mis amigos como lo hacia. Mimi se despidio de todos, menos de Yena, Junior y obviamente ignoro por completo a Jared.

-Gracias a Dios se fueron-dijo Yena riendo junto a Junior.

-¿Por qué? Te sentias intimidada por Mimi-Mimi era hermosa, con sus ojos grises, labios carnosos y rosados natural, su piel dorada y su cabello marrón, era más bonita que Yena con sus mechas negras. Desde que me pelie con Yena no me he echo mi permanente, mi cabello esta regresando a ser negro, por el contrario, Yena se trajo un paquete de tinte de cabello y se hizo sus mechas.

-Por ella, por favor Mad. Ambas sabemos que yo soy más guapa que ella.

-Crees que eres más guapa que ella, Mimi no se pinta el cabello, sus ojos son grises, labios rosados sin maquillaje, piel dorada sin tenerse que hacer un bronceado artificial como tu el verano pasado. Yena, ambas sabemos que Mimi es más guapa y te da celos admitirlo.

Yena se cruzo de brazos y se alejo de mí, Junior me hizo una mala cara y luego se fue tras ella, Jared solo reía observandome.

-¿De qué te ries?-le pregunto molesta, no podia quedarme callada cuando Yena hablaba mal sobre Mimi, tenia que defenderla, me sorprende que Jared no se allá ido tras Yena para consolarla por mi mal trato

-Nada, es solo que te vez sexy cuando te enojas-Jared cómenzo a acercarse a mí, no sé si me dio miedo o sentí mariposas, últimamente, cuando se acerca siento que no es para besarme, o abrazarme, o susurrarme en el oido, siento que me pegara y no podre decirle que no, o que me deje en paz, me aterra la idea en la que algun día no podra detenerse.

Me hice hacia tras cuando note que estaba a solo unos cuantos pasos de mí.

-¿Me tienes miedo?-pregunto parandose a unos pasos de mí.

-No-contesto con la voz quebrada-, estoy muy molesta, no estoy para alagos.

Jared se acerco más rapido hasta que me tuvo entre sus brazos. Cerre los ojos instintivamente, lo siguiente que senti fueron sus labios sobre los mios. Me relaje y le segui el beso, pero, no me sentía comoda, lo que tenia con Jared al llegar no era lo mismo, el no era el mismo, cambio desde que me vio con Alan en mi habitación. Me separe de él, no podía seguir con esto, no me siento bien junto a él.

-¿Qué sucede?-me pregunta viendome a los ojos.

-No es nada, es solo que no me siento muy comoda.

-¿Quieres que vallamos a tu cuarto, para estar a solas? Mejor vamos al mio, quiero estrenar la cama.

-No es eso, es que...

No me dejo terminar, sus labios estaban sobre los mios de nuevo, trate de separarme pero él me atraia más hacia si mismo. Me llevo a enpujones hacia las escaleras, me levanto, trate de separarme de parar el beso, hasta lo mardi con fuerza para que me soltara pero no lo hizo. Le di manotazos en la espalda para que me bajara, perdio el equilibrio, camino a duras penas y cayo sobre mí en la alfombra de la sala. Trate de quitarmelo de ensima pero no me dejo. Separo por un segundo sus labios de los mios para tomar aire. Grite en ese momento.