Viaje de imprevisto.

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Narra Caroline.

Al día siguiente desperte, estaba en ropa interior, solo recordaba un poco lo sucedido, solo divagaban pequeñas escenas donde Mario me tocaba y al recordarlo mi piel se ponía de gallina. Me levante a buscarlo por toda la casa pero no estaba, no había rastro de él. En la recamara no estaba su ropa y eso era muy raro. Tome mi celular y al ver que tenía varias notificaciones en Twitter. Entre y eran de mi madre
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@ JulietaVar:  @ CaroMar, ¿es en serio Caroline? No puedo creerlo princesa.
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Había olvidado que me dieron un anillo, era hermoso, parecía de... ¿compromiso?
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@ CaroMar: @ JulietaVar gracias mamá. No creas nada es normal.
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@ JulietaVar: @ CaroMar me emociona pensar que tienes un compromiso, felicidades hija.
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A partir de ese momento mi vida estaba echa un caos. No pensé que una simple foto con un anillo, mi madre lo tomaría como un compromiso, solo tengo 18 años. Decidí ya no contestar nada, mi madre creía que era un compromiso, pero no lo era, me tenía o quita al imaginar que Mario no hubiera esperado a que yo despertará para hablar o al menos decir algo de lo que sucedió la noche de ayer. Marque una y otra vez al celular de Ruiz pero era imposible localizarlo, no contestaba las llamadas. No sabía que pensar ahora de Mario, me sentía utilizada por así decirlo,ntuvimos una noche donde las copas no nos ayudaron y el ambiente se puso emocionante. Me duche y baje a ver si había señal alguna pero no fue así, estaba completamente básica la casa, insistía en el celular para ver si contestaba pero era imposible.

Narra Mario.

-Mario, debes venir a arreglar este asunto.- dijo mi madre insistente.

-Mamá, te he dicho que no, no tengo la capacidad suficiente para tanto cargo.-

-Tú hermano me ha dicho lo mismo, se ha molestado conmigo tú eres él único que puede hacer eso.-

Al escuchar las súplicas de mi madre, tuve que acceder a ir a México. Era la única forma de que ella estuviera tranquila.

-Tomo el primer vuelo para haya.-

-Gracias hijo.-

Colgué y de inmediato empaque unas cosas para salir a México. Salí de la casa de Caroline, no la moleste, me sentía apenado por lo que había sucedido. No pienso verla durante un tiempo. Salí de mi casa y me dirigí al aeropuerto. Compré mi boleto y espere a que saliera mi vuelo.

[...]

Ya estando arriba del avión, sonó mi celular. Lo revise y era un mensaje de Caroline.
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De: Caroline.   [12:53]

Hola, ¿llegaste bien a tú departamento?.
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No pensaba contestarle, no ahora que tendría a mi responsabilidad Company Ruiz. No estaba de acuerdo con todo esto. Lo que yo quiero es vender las acciones al mejor postor para no tener que ver con nada de eso. Una vez llegando a México me dirijí a un hotel, no estaría con mi madre. No cuando le diría que no quiero saber nada de la empresa. La empresa era de mi padre, cuando el falleció se quedo a cargo de su mano derecha que ha echo que salga adelante, la empresa estuvo de ir a la quiebra por haber firmado un documento donde le quitaba todo. Por esa razón no estaba de acuerdo en ayudarle al señor Christian. Sonó el celular lo cual me saco de mis pensamientos.

-hijo, ¿ya has llegado?- dijo mi madre.

-me acabo de instalar en un hotel.-

-ven de inmediato a la compañía, vamos a hablar de todo esto.- colgó.

Se me hacia raro que habláramos de la empresa, cuando nunca lo hicimos estando mi padre, realmente nunca acostumbraban hablar con mi hermano y conmigo. Me aliste y tome un taxi hacia la empresa, era realmente grande.

-buenas tardes, ¿en que le puedo ayudar?.- dijo la chica de recepción.

-mmm... buenas tardes, vengo a una junta.- fue lo único que se me ocurrió decir.

-bien, ¿cual es su nombre?- me miró.

-Mario... Mario Andrés Ruiz.-

Al escuchar la chica mi nombre me miró sorprendida y nerviosa.

-señor Ruiz, disculpame, pase por aquí.- se levantó de su asiento y me llevo a una oficina donde en la puerta tenía una placa que decía Sr. Ruiz. Toco la puerta y se escucho la voz de mi madre ordenando que entrara.

-adelante.- dijo la chica.

Entre y mi madre estaba ahí, sentada junto con otro señor, al parecer el señor era el amigo de mi padre quien nos había ayudado con la empresa.

-hijo.- se levantó mi madre y se acercó a darme un abrazo.

-hola mamá, ¿de que tenemos que hablar tan urgente?- me separe de ella.

-Ricardo, dígale por favor de que es.- mi madre lo miro.

-bien joven, tome asiento.-

Mi madre y yo lo hicimos y empezó a hablar de todo lo que había sucedido con la empresa de nosotros. Realmente yo no era como todos los que tenían empresas. Me gustaba ganar mi dinero, el dinero que producía la empresa solo mi madre y mi hermano lo ocupaban, yo en absoluto no.

[...]

-Y hasta ahora esto a sido de la empresa joven.- dijo Ricardo.

-¿quiere darme a entender que los números rojos son todo lo que ha crecido la empresa?- miraba las gráficas que me había entregado.

-así es joven. Quiero dejarle en claro todo esto de la empresa, yo ya estoy grande para seguir con esto. Y esos números señalan que la empresa puede seguir creciendo de forma internacional.-

-¿tenemos presupuesto para empezar otra empresa por ejemplo en Colombia?.-

-así es joven, y sin necesidad de que se quedara a vivir aquí, usted puede manejar ambas empresas desde Colombia si lo desea o aquí.-

Me quede pensando por un momento todo lo que me había dicho, esa oferta me gustaba, iba a estar todo más cerca de mi, podría continuar con mi vida en Colombia y seguir con la empresa era lo adecuado y así mi madre se quitaría muchas angustias de encima.

-de tu última palabra la que digas hijo.- tomo mi mano mi madre.

-acepto, quiero dirigir la empresa desde Colombia, que se haga lo necesario para que se empiece.- mire a mi madre contento.

-bien joven, esta echo todo. Del papeleo me encargo yo. Por ahora yo seguiré aquí en esta empresa.-

-muchas gracias, yo le recompensare todo lo que ha echo por esta empresa y llevarla de nuevo a que se levantará después de que casi se va a la quiebra.-

-no hay necesidad jóven, con permiso.- salio el señor Ricardo de la oficina.-

-creo que has hecho lo adecuado hijo, en Colombia será una buena opción, aunque la competencia va a estar muy fuerte, recuerda que Compañía Rosart es la más poderosa de Colombia.

-podemos empezar desde cero madre, eso no importa. Llevaremos la empresa de nuevo a la sima.-

-esta bien hijo. Bueno yo tengo que irme, iré a arreglar unas cosas. Te veo hijo.- mi madre salio de la oficina y yo me quede ahí.

La oficina tenía una hermosa vista, me acerque a la ventana y solo observé, tome mi celular y volví a leer el mensaje de Caroline. No tenía el valor de contestarle, no después de haber echo lo de anoche, regresaría a Colombia después de una semana. Tal vez depues la buscaría. También traía en la cabeza lo que me había propuesto Christian. Con el no jugaría, y mucho menos ahora que la compañía era mía. No dejaría que el se entrometiera y solo me falta pensar que es lo que haría con Rebeca. Tendría tiempo para pensar las cosas, por ahora me tomaré esta semana de vacaciones.

Hola chicas :3 ¡FELIZ AÑO NUEVO! les deseo lo mejor.

"EL QUE SE ENAMORE PIERDE MARIO RUIZ."Donde viven las historias. Descúbrelo ahora