"EL QUE SE ENAMORE PIERDE MARIO RUIZ."

>[+18]<

Narra Mario.

En cuanto escuche que quería que la llevará a la recamara lo hice sin pensarlo, al escuchar su gemido sobre mis labios me había exitado demasiado, al saber que fue solo con un beso. Una vez que llegue a la puerta de su recámara la baje, ella abrió la puerta y me tomo de la mano. Entramos y ella se dejó caer sobre su cama, llevandome con ella puesto que me tomo del saco. Comencé a besarla de nueva cuenta. Esta vez podía tocar más de ella, puso una de sus piernas arriba de mi espalda baja y eso ayudo para que pudiera recorrer con mi mano toda de ella. Comenzaba a dejar un pequeño camino de besos sobre su cuello, y ella aprovecho el momento para quitar mi saco. Le ayude y este mismo salio volando a alguna parte del cuarto. Continuamos besándonos y ahora ella desabotonaba mi camisa de uno en uno, una vez que llegó al último de la misma manera me la quite. Cuando solo quedaba yo en pantalones la sente en la cama y de nueva cuenta comense a besar su cuello, haciendo a un lado su cabello para que pudiera bajar el cierre de su vestido. Una vez que lo baje completamente comenté a quitárselo por los hombros y conforme iba bajando el vestido yo iba dando besos húmedos. Comencé desde sus hombros y justo cuando llegue a sus pechos me detuve a observarlos, era una primicia estar frente a ellos, eran grandes y bien formados, una delicia para quien ya los haya tenido antes. Continúe quitándole el vestido hasta que llegó a sus glúteos, de hay solo me quede hasta su obligó puesto que ella estaba sentada. Levante mi cara y ella tenía los ojos cerrados y la cabeza hacia atrás, disfrutaba lo que le hacía.

-reposa sobre la cama.- ella me miró y obedeció.

Continue mi camino de pequeños besos justo donde me había quedado, en su ombligo. Hice que elevar un poco sus cadera y al fin el vestido salio. Su piel era suave y se veía espectacular la forma que que lucia su abdomen, los huesos de la cadera se marcaban y eso era una hermosura.

-detente Mario.- jadeo Caroline.

-¿qué sucede?- la mire, mientras me encontraba arrodillado.

-yo...- se quedo callada.

-¿qué sucede Caroline?- le insistí

-yo no he tenido intimidad con alguien...- me miró apenada. -soy virgen- Al escuchar eso no supe que decir. -Pero continúa.

-yo no puedo hacer eso Caroline.- me levante del suelo.

-si puedes ven.- dio unos cuantos golpes sobre su cama indicandome que me pusiera a un lado.

Lo hice y me recoste a un lado de ella. Ella me miró y tomo mi mano, lo que hizo fue poner mi mano sobre si abdomen y empezó a mover mi mano sobre ella, hizo que mi mano recorriera poco a poco hasta que llegó a su feminidad, sentí por un momento mi pantalón apretar me en la parte baja, efectivamente era una erección. Caroline con mi mano comenzaba hacia que la empezara tocar ella solo abría su boca pero no decía nada. Hasta que ella comenzó a hacer lo mismo conmigo.

De pronto ella desabrocho mi pantalón y comenzó a meter su mano poco a poco hasta que llegó a mi miembro y comenzó a masajearlo de arriba a abajo. Sin pensarlo dos veces introduci dos dedos en ella y solo gemia, ambos nos desconocíamos en ese momento, nuestro odio se había olvidado por completo. Continuamos así hasta que ella llego al orgasmo, yo me contenía ya que si lo hacía me iba a ver de una forma muy grosera. Caroline dejo un beso en mi boca mientras tratábamos de recuperar la respiración.

-vez como se puede tener un buen rato sin que se tenga una penetración, conservo mi virginidad.- dijo jadeando.

-¿cuantos años tienes?- le pregunte

-18 años, y conservo mi virginidad.- rió.

-me sorprendes.- le conteste.

-hay varias formas de complacer sin necesidad de que el pene entre a la vagina.- se acomodo en la cama. -ya duerme, es tarde y estoy cansada.-

No digamos más y ella se quedo dormida, era increíble lo que había pasado justo en la noche de Navidad. En realidad era Noche Buena, y vaya que si lo fue.

(faje: acto sexual que no es necesario la penetracion, toque en partes genitales de hombres como mujeres) No se si sepan pero más vale. :)