"EL QUE SE ENAMORE PIERDE MARIO RUIZ."

Company Ruiz en Colombia.

Narra Mario.

-me siento nervioso al estar frente a personas más grandes que yo y con más experiencia.- dije acomodando mi corbata.

-joven, usted puede llegar a ser el más grande dueño de Company Ruiz, solo no tenga miedo, no lo demuestre frente a los demás.- dijo el señor Ricardo.

El señor Ricardo había llegado hace una semana, mamá no quiso venir por lo mismo de que no quería estar más involucrada en esto de los negocios.

-bien Ricardo, estoy listo, es momento de ir a la empresa.-

No me sentía cómodo con corbata y mucho menos con saco así que solo basto la corbata, le pedí a Arturo su auto, no llegaría en un taxi, bajamos del edificio y nos dirigimos al estacionamiento, me sentía raro al solo tener 21 años y ser dueño de la compañía de quien fuera mi padre. Nos dirigimos al lugar y al momento de bajar solo mire el edificio era enorme.

-joven, póngase este gafete, con esto no necesita estar en recepción, pasa directo.-

Lo tome y me coloque el gafete, una vez que entramos el ambiente era agradable, chicas de 25 años, todo lo que necesitaba Company Ruiz Colombia.

-buenos días señores, en que les...- se quedo callada la chica al verme y de inmediato se paró.

-Se... señor Ruiz, bue... buenos días.- dijo tartamudeando la chica.

-Buenos días, necesito que convoque una junta de todo el personal, no diga que el dueño a llagado.- fue lo único que dije y me encamine a mi oficina con Ricardo.

-muy bien, Mario, espero que no te moleste que te hable de tu.- dijo mientras caminábamos.

-No, varo que no, me hace sentir mejor así.-

-bien, la primer impresión es lo que cuenta, y te mostraste de una manera dura, imponiendo, eso fue lo mejor.-

-gracias.- lo miré.

Llegamos en donde estaban los escritorios y había tanto hombres como mujeres trabajando, solo nos seguían con la vista hasta que deje de sentir su mirada una vez estando dentro de mi oficina.

-todos te han mirado, y al parecer tienen una pequeña idea de que eres el dueño.-

-me siento nervioso Ricardo, tengo que ir a esa junta y hablar frente  ellos.-

-lo se, y se que podrás. Hablando de eso iré a ver si ya esta listo.- salio de mi oficina.

Espere a que saliera y solté aire, me sentía un poco más relajado, me dirigí a mi escritorio y me senté frente a él, tome el teléfono y llame a Arturo.

-hey Mario ¿como va todo? Ya estas listo para ser el dueño de esa empresa.- dijo Arturo.

-me siento nervioso, esto es algo muy grande para mi, no podré con esta carga. En unos momentos tendré mi primer junta ejecutiva y no se que decir.-

Se escuchó una risa de parte de Arturo.

-Solo debes mostrar una imagen dura, es eso, ya lo demás irá saliendo.-

-tienes razón, oye tal vez en la tarde vaya a ver a la señora Julieta, quiero saber donde vive Caro, ya no aguanto más.-

-ok, pero primero piensa en tu junta.-

-ok, lo haré.- en ese momento se habría la puerta y era Ricardo.

-Mario, todo esta listo.- se asomó.
-en un momento voy, Arturo te dejo llego el momento.-

-bien, suerte y me dices que sucedió con la señora Julieta.-

Coloque el teléfono en su lugaf y salí de la oficina, Ricardo me guió a un salón de onde será la junta, tome aire y abrí la puerta, estaban todos hablando pero se formó un silencio y todos miraron a mi lugar, tragedia fuerte y camine al emporio que se encontraba hasta enfrente, mire y todos estaban atentos. Di unos golpes al micrófono para corroborar de que estuviera encendido y así fue.